Autor: MARGHERITA CORDANO.

La mitad de los escolares no ven conexiones entre ellos y la comunidad más allá de sus fronteras
72% de los estudiantes chilenos de 15 años dice estar de acuerdo con la frase "cuando veo malas condiciones de vida para algunas personas, siento la responsabilidad de hacer algo". ENCIFRAS » 8 de cada 0 creen que los inmigrantes deberían poder mantener sus costumbres y estilos de vida, El mismo porcentaje piensa que quienes ya viven enel país deberían poder participar en las elecciones. 38% de los escolares del país muestran interés por conocer sobre las religiones que existen en el mundo, siendo uno de los temas que menos inquietud les provoca. A de cada tres estudiantes reporta participar en actividados que promueven la igualdad de género. Asimismo, 40% dice elegir productos por razones políticas, éticas o ecológicas.
Resultados a nivel local sobre el módulo de Competencia Global que por primera vez evaluó PISA: Ajo la idea de que un mundo interconectado requiere una educación que ponga énfasis en temas globales, la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) deci dió medir si los escolares del mundo están aprendiendo habi lidades que les permitan desenvolverse en sociedades mucho más multiculturales.
A través de su prueba PISA —evaluación que mide las competencias de jóvenes de 15 años en más de 70 naciones—, la organización indagó, por ejemplo, en la capacidad de los estudiantes deanalizarasuntos globalese interculturales, valorar distintas perspectivas o emprender acciones que apunten al bien común.
Y si bien los resultados a nivel mundial se dieron a conocer ha= ce unas semanas, solo ahora se conoce el detalle de los datos chilenos, los que fueron entregados através dela Agencia de Calidad de la Educación.
Estos muestran que más del 70% de los estudiantes del país dice estar al tanto de ciertos problemas globales, como la necesidad de alcanzar igualdad entre hombres y mujeres, abordar la migración o las causas de la pobreza.
Menos conocidos son los temas de salud global (se debe tomar en cuenta que la última prueba PISA se realizó en 2018, previo a la actual pandemia de coronavirus) y los conflictos que tienen carácter internacional.
Otros resultados muestran algo de dicotomía: aunque ocho de cada 10 alumnos en Chile dicen pensar en sí mismos como ciudadanos del mundo, más de la mitad (55%) no cree que su comportamiento pueda afectar a las personas de otros países. Es decir, no ven conexiones entre símismos y la comunidad más allá de sus fronteras.
Poca influencia Daniel Rodríguez, secretario ejecutivo de la Agencia de Cali dad de la Educación, plantea que “una posible explicación es que los jóvenes hoy están permanentemente conectados con otros lugares del mundo, algo que internet y las redes sociales max mizan; saben más sobre lo que pasa en otros países. Pero eso no necesariamente los hace sentirse M Aunque se consideran ciudadanos del mundo, los jóvenes no creen que su comportamiento afecte a las personas de otros países. Internet influiría en hacerlos pensar que conocen lo que ocurre fuera, pero que no tienen mayor incidencia. Parte de esos lugares, como para pensar que sus acciones generan algún tipo de impacto”, dice. Con esa idea concuerda Patricio Abarca, director de la Escuela de Educación de la U. Mayor.
“Los adolescentes se encuentran conectados, interactúan y se informan de lo que ocurre en el mundo —precisa—. Sin embargo, la capacidad de influir en Otros se ve limitada, producto Interactuar de manera exitosa La OCDE define la competencia global —un ítem que por primera vez midió su más reciente prueba PISA— como un concepto "multidimen: nal y que abarca la capacidad de la persona para examinar problemas globales e interculturales, comprender y apreciar diferentes perspectivas y puntos de vista, interactuar de manera exitosa y respetuosa con los demás y tomar medidas para el bi nestar colectivo y el desarrollo sostenible”. Daniel Rodríguez, secretario ejecutivo de la Agencia de Calidad de la Educación, explica que hoy se considera necesario evaluar este tipo de conocimientos porque "un mundo profundamente interconectado hace que la capacidad de establecer relaciones interculturales sea central. Además, aprender sobre lo que ocurre en otros lugares o comunidades nos permite a todos analizar y comprender mejor nuestro propio entorno”. Aprender de otras culturas “no es un lujo o algo anecdótico. Es un aprendizaje cada vez más esencial”, concluye.
Del poder que poseen los medios u organismos de cada país” En cuanto a considerar la perspectiva de otros, el 68% de los estudiantes chilenos dice que tratan de entender mejor a sus amigos imaginando cómo se ven las cosas desde sus perspectivas.
Otro 62% piensa que cada situación tiene dos lados y trata de considerar ambos, una intención Que no se condice mucho con otros resultados locales, como que seis de cada 10 estudiantes no se sientan representados con la frase “cuando estoy molesto con alguien trato de adoptar la perspectiva de la otra persona”. Al mismo tiempo, 48% no se siente identificado con el planteamiento “trato de considerar los puntos de vista de todos antes de tomar una decisión”. Ideas y argumentos La clave para reforzar este tipo de contenidos, cree Abarca, se encuentra en el desarrollo del pensamiento crítico. “Es una habilidad compleja, puesto que demanda la capacidad de evaluar diferentes perspectivas para una toma de decisiones consciente y analítica. Esto está presente en las actuales bases curriculares, ya que pensar críticamente es transversal a todas las asignaturas del currículum”, explica. Aquí, más bien, el desafío está en “explicitarlo y generar estrategias didácticas para su desarrollo”, comenta al respecto. En relación con este punto, Marisa Meza, académica de la Facultad de Educación de la U. Católica, menciona la necesidad de capacitar a los futuros docentes.
“Uno le exige a la escuela tomarlo en cuenta, pero para eso, los profesores también tienen que poder tomar en consideraCión los puntos de vista diversos como motor de las ideas, no como un cuestionamiento personal. Y en eso la formación inicial docente tiene un rol”, indica.
La especialista destaca el papel que puede jugar la filosofía ala hora de tratar temas como la educación respecto de diferentes culturas, enseñar que habrá personas que no siempre piensen como uno y potenciar el diálogo. “La filosofía trabaja con ideas y argumentos, con la diversidad.
Y no necesariamente desde el punto subjetivo y emocional, sino desde el punto racional”. Respecto de otros resultados locales, entre aquellos con porcentajes más altos destaca que más del 80% de los jóvenes dicen respetar a las personas de otras culturas como seres humanos iguales, y que la misma proporción está de acuerdo con que los hijos de inmigrantes deben tener las mismas oportunidades de educación que el resto.