“Las leyes no pueden cambiar la cultura de las personas de un plumazo”
La doctora en Filosofía, Nicole Darat, defiende la educación con perspectiva de género: “Tu hijo, hija, hije se va a encontrar con gente que no se ajusta a la binariedad y la forma en que reaccione no es un problema de tu familia, es un problema de la sociedad”. É La idea de una democracia feminista es la idea de volver a la raíz de la democracia como participación de los muchos, de las muchas pobres, de las muchas oprimidas y esta radicalización no puede sino provenir de lo que Rousseau con miedo denominaba “el desorden de las mujeres”, dijo en una columna hace ya cuatro años, cuando el movimiento feminista se tomó las calles de la mano de las estudiantes en lo que ha sido conocido como el “mayo de 2018”. Hoy la autora de esas palabras, Nicole Darat, conversó con Región F respecto de sus líneas de investigación, ligadas al género, la sexualidad y la raza. Para la doctora en Filosofía de la Universidad de Valladolid y académica de la Universidad Adolfo Ibáñez, la palabra que más la define es feminista. Por eso, su análisis del contexto político que vive Chile lo hace desde el conocimiento y expertise.
En esa línea, Darat comienza con un razonamiento crítico de la Ley de Cuotas que rige actualmente las elecciones parlamentarias, gracias a la reforma del binominal de 2015, y que obliga a los partidos a presentar en sus listas al menos a un 40% de candidatas. “Había mujeres que estaban de relleno”, afirma respecto de las pasadas jornadas de votación.
“TamNICOLE DARAT, DOCTORA EN FILOSOFÍA DE LA UNIVERSIDAD DE VALLADOLID Y ACADÉMICA DE LA Región F es una producción audiovisual que pretende valorar y dar a conocer historias de mujeres de la región, que aportan al desarrollo del país desde distintos ámbitos y que cuentan sus experiencias a través de entrevistas bisemanales, en un trabajo conjunto de la Escuela de Periodismo de la Universidad Adolfo Ibáñez, Soy Valparaiso. Cl y La Estrella. Revisa la entrevista íntegra hoy en Soy Valparaiso.
Cl COORDINADOR GENERAL: MAITE BERENGUER / PRODUCCIÓN PERIODÍSTICA: ANTONELLA BOCCAZZI IGNACIA MEGE — CRISTOBAL CATALDOÁNGELES CORTÉS/ COORDINACIÓN DE PISO: JOAQUÍN GARRIDO — SOFÍA PEÑAFERNANDO Ríos / EDICIÓN: FRANCISCA MARTÍNEZ - BENJAMÍN CARRASCORODRIGO CARRASCO — CAROLINA BERRÍOS — TOMÁS GUTIÉRREZ / EQUIPO CALLE: LETICIA ORTEGA — TRINIDAD MÁRQUEZ — JUAN JOSÉ BAHAMONDESSEBASTIÁN BARRÍAFRANCISCA PARDOTÁMARA FUENTES/ REDACCIÓN: VALENTINA MORALES — Ma TÍas MARÍN— MAGDALENA PEÑAMARA RÍOSJAVIER TORRESMAITE FOXON/ MAITE BERENGUER - SOFÍA CAEROLSRODRIGO ESPINOZACARVAJAL / REDES SOCIALES: JAVIERA MORGADO — ANTONIA RODRÍGUEZRICARDO VILLAROELPAOLA CRUZ — LEANDRO SANTANA poco estaban priorizadas en las listas y sabemos que cuando la gente no conoce a los postulantes, vota por el que aparece primero de la coalición política con la que siente más afinidad”, agrega.
En esa misma línea y marcando la diferencia entre uno y otro sistema, la autora de numerosos libros y artículos académicos asegura que la participación femenina en la Convención es un logro del movimiento que busca la equidad de género, pues en este caso, se aplicó la paridad una vez realizada la votación: “Es un tremendo avance.
Recordemos que grupos feministas salieron a la calle y, paralelamente, en la academia hubo un rol súper importante que cumplió la red de politólogas”, añade y explica que la normativa, en este caso se aplicó la “paridad de resultado”-, “implicó que los partidos pusieran buenas cartas de mujeres y que se preocuparan por ellas.
Los partidos y los movimientos sociales se pusieron las pilas”. La paridad y la inclusión de pueblos originarios hace que este proceso (la Constituyente) sea único en el mundo”. Nicole Darat la filósofa cree que la constituyente es un “espacio interesante de experimentación e imaginación política”, puesto que “la paridad y la inclusión de pueblos originarios hace que este proceso sea único en el mundo”. Según Darat, el proceso por la nueva Constitución cumple estándares democráticos bastante exigentes, abriendo “espacios de participación política que antes estaban cerrados”. Pero, advierte que “las leyes no pueden cambiar la cultura de las personas de un plumazo”, sentencia.
Respecto del gobierno de Gabriel Boric, autodenominado como “feminista”, la académica reconoce que efectivamente está lleno de simbolismos y de “buenas señales”, que son “un tremendo avance”. Desde quienes lideran carteras ministeriales -14 mujeres y 10 hombreshasta la inclusión del Ministerio de la Mujer y la Equidad de Género en el Comité Político.
Pero aclara: “Creo que lo sustantivo todavía está por verse”. Y por eso, reconociendo el progreso en materia de género, la académica sugiere tener cuidado: “Tenemos paridad ministerial de nuevo, tal como en el primer gobierno de Bachelet. Pero duró poco. La contingencia forzó el giro hacia caras más tradicionales de la Concertación”, recuerda. EDUCACIÓN NO SEXISTA Y CÍVICA La académica reconoce que ha habido distintos hitos en esta materia, como la elección de Emilia Schneider, primera diputada trans. No obstante, considera que aún existe una deuda con las mujeres transgénero.
Además, problematiza sobre los recursos económicos que se entregan a las candidaturas para las personas disidentes durante las campañas: “¿ Tienen a los y las militantes para volantear? ¿ Pondrán las lucas? son cuestiones materiales que hacen la diferencia”, asevera. En ese sentido, destaca la necesidad y el derecho tanto de impartir como de recibiruna enseñanza libre de machismo, que cuente con perspectiva de género.
“Tu hijo, hija, hije se va a encontrar con gente que no se ajusta a la binariedad y la forma en que reaccione no es un problema de tu familia, es un problema de la sociedad”, asegura.
A su juicio, el aprendizaje como ciudadanos requiere de una formación con perspectiva de género y en la que se deben eliminar prejuicios de la ciudadanía: “Dejemos de pensar en la educación cívica como adoctrinamiento en la ideología de género”, concluye. €