Autor: ÓSCAR VALENZUELA
Ojo, postulantes: panorama total de la acreditación de las universidades
CNA acordó bajar la certificación de la U. Alberto Hurtado de 5 a 4 años La U. Arcis y la U. Del Pacífico debieron cerrar sus puertas repentinamente.
Al momento de cesar funciones, ninguno de estos planteles contaba con acreditación. ¿Era esta una señal? Sí, estima Loreto Jara, investigadora de política educativa de Educación 2020. "La acreditación es un proceso que tiende a garantizar la calidad de la educación entregada por las instituciones de educación superior.
Desde nuestra perspectiva es un mecanismo muy útil, porque en un mercado tan desregulado y complejo como el de la educación superior, se necesita una forma de garantizar que los procesos educativos sean de la calidad que se requiere”, opina.
La acreditación consiste en una evaluación externa a la que se someten las universidades, institutos profesionales y centros de formación técnica en distintos ámbitos, como mecanismos de autorregulación del plantel, aseguramiento de la calidad, investigación o vinculación con el medio. En opinión de la investigadora, este sello le otorga estabilidad a los estudiantes. “Una institución acreditada tiene menos riesgos de sufrir problemas financieros donde la universidad arriesgue un cierre, como hemos visto antes”, agrega.
Daniela Véliz, académica de la Facultad de Educación UC e investigadora del Núcleo Milenio en educación superior, coincide en que la acreditación es un factor útil a la hora de postular: "Es un indicador más -no el único que nos puede dar una orientación para saber qué tipo de calidad tendría una institución versus otra. A mayor cantidad de años de acreditación, mayor es la calidad que se podría definir”, opina.
La importancia de los años Paula Beale, secretaria ejecutiva de la Comisión Nacional de Acreditación (CNA), explica que a partir del año 2020 tener este sello será obligatorio para todas las universidades. "La institución que no se acredite va a entrar a un proceso de supervisión ante el Consejo Nacional de Educación, que implica que su autonomía se verá bastante disminuida. Ese proceso servirá para reforzar los aspectos débiles que tiene la institución”, comenta. Los criterios actuales para otorgar la certificación rigen hasta el 2022, cuando deberían entrar en vigencias nuevos estándares.
Para elegir, hoy hay de todo: universidades que no están acreditadas y otras que alcanzan el máximo de 7 años (ver tabla). “No significa que haya una institución que sea perfecta y tenga todo bueno, porque siempre existe el incentivo a mejorar, pero hay instituciones que tienen observaciones que requieren mayor urgencia para solucionarse.
En esos casos la comisión le asigna un menor número de años de acreditación: se le da un plazo más breve a la institución para que mejore y vuelva nuevamente a revisión, para ver si ha superado las dificultades”, dice Beale. Un caso reciente es la U. Alberto Hurtado (UAH): la CNA acordó bajarle la acreditación de 5 a 4 años.
Paula Beale explica que no puede referirse al tema hasta que la resolución sea conocida por la universidad; sin embargo, aclara que el cambio no debería afectar a los alumnos, pues bajo ambas leyes -la vigente y la nueva el plantel sigue en un mismo tramo de acreditación. Ricardo Carbone, director de Aprendizaje Institucional de la UAH, confirma que hasta el momento no conocen el detalle del acuerdo tomado por la CNA. “Por lo tanto, no sabemos si vamos a apelar. Es que el proceso aún no ha terminado. Confiamos en la seriedad de la CNA y estamos esperando el acuerdo para evaluar los pasos a seguir”, recalca.
En proceso Ante la inminente obligatoriedad, otros planteles se encuentran en pleno proceso de acreditarse, como Uniacc. "Lo hacemos en primer lugar para dar cuenta de que la universidad cumple y adhiere a los criterios de aseguramiento de la calidad. Por otro lado, le otorga a los postulantes y a los alumnos la oportunidad de acceder a beneficios, becas y formas de financiamiento público.
A la universidad le da a oportunidad de postular a fondos, por ejemplo de innovación o desarrollo, a través de proyectos que otorga el ministerio”, destaca Óscar Irían, vicerrector de Aseguramiento de la Calidad y Análisis Institucional de la Uniacc. Expertas concuerdan en que este sello de calidad es un factor útil a la hora de elegir dónde estudiar.