COLUMNAS DE OPINIÓN: Violencia escolar y el acabamiento de ser hombre
COLUMNAS DE OPINIÓN: Violencia escolar y el acabamiento de ser hombre Marcas Huvlaic Martinis! Sae sedota eatólieu Ja la da (santa AtvI. áa Jespacian Jespacian las noticias acerca de la violencia que se vive en el sistema escolar y, aunqiacln hechas que más captan la atención social pudieran ser siluacioncs puntualos, puntualos, aun el reflejo de no ambiente violento que partee estar instalado enla convivencia escolar, desde Isa diversas formas de aeosoybuliyng bastalas violentan peleas quo lachaso han llegado a apudslamientos y balazos entre estudiantes.
Además, está todo el capitulo de las faltas de respeto y agresiones de tipo que sufren muchos profesores y profesoraa. ¿Qné está pasando? ¿ Cómo hemos llegado a que colegios y liceos puedan ser lugares peligrosusoquela peligrosusoquela dignísiinalabordclos rnaeatres pueda ser una profesión riesgos a? Anteel prohlensapue4ensurgir varias tentaciones. La primera es onipozara buscar culpables, pero el problema requiere una reftsnddn mayor que indicar a otros con un dedo acusador. Otra es la de ininimizarel ininimizarel problema diciendo que esto no sucede en todas partes, lo cual es verdad, pero también es verdad que el ambiente agresivo ya ea parte de la convivencia en elsistcmaescolar.
Otra tentación es culpar a las familias porque los niños aprenden lo que ven, y ea muy cierta la atinnación que la fasnilia es la primera educadora y el colegio es su mejor colaborador, pera.. ¿qué sucedo cuando los mismos padres catáis inhibidos y no logran (o lo que soria peor, no las intereaa) dialogar con sus hitos? Hay preguntas de fondo que requieren ser socialmente respondidasy respondidasy que se echan de menos cuando sepiensa que la soluciónes establecer protocolos de convivencia-Locual convivencia-Locual nstámuybien, perono basta-, o incluso discutiendosi hay que instalar detectores de metales en la entrada de establecimientos eseolarespara prevenirlaentrada de armas u otros objetos peligroscu peligroscu ¿ Cómo bansos llegadoa eso? Al final, tenemos que preguntarnos preguntarnos qué es educar y para qué educar, y ai la educación y el sistema escolar sirven para algo.
Puede haber respuestas rápidas y funcionales: para que aprenden. para que puedan llegar a tener una prolesién y se ganen la vida. para que elpais pueda aprovedsar el talento o la fuerza cte trabajo del capital humano que son les actuales estudiantes, y otraa par ti estilo que -sin dudatienen su verdad, pero no son suficienlea ni motivan a medios jóvenes, pues no olvidemos que los “ninis” (ni estudian ni trabajan) entre Loa lSy 24asióa ya son alrededor [le 350.0 W en el psis, según eL Inc. El problema en su conjunto es muy complejo y, ciertamente, muchos especialialasen educación están trabajando en el toma, el cual requiere también una amplia conversación en la sociedad.
Desde mi experiencia como estudiante y, luego, durante mAs de treinta años como profesor en varias universidades del psis, quisiera rescatar el carácter modélico modélico de la figura del educador en ese proeeao que el rey Alfonso X de Castilla, lLamadoel Sabio”, hace casi ochocientos años delnió delnió como “el acabamiento de ser hombre”. Porque de eso se trata todo proceso educativo, de colaborar colaborar a que otros puedan llegar a ser personas; ca lo que Alfonso X llansaba “el acabamiento de ser hombre”, y hoy decimos “y mujer”, por cieno.
La verdad es que este “acabamiento “acabamiento de aerhombrss” no se juega, cii primer lugar, en la adquisición de destrezas ni un el desarrollo d. c habilidades, tampoco en la dirmacicle dirmacicle por competcnciaani en el manojo manojo de temsologlas; ciertamente, todo eso tiene su lugar, pero nada de eso da consistencia ala persona cts su “acabamiento de ser hom bre”, pudiendo inclusollegara ser un “idiota especializado”. Sólo la formación valórica da consistencia a la peraons, haciéndola haciéndola crecer en su “acabamiento de ser hombre, proceso en el cual encuentran su lugar las destrezas y habilidades, las competencias y las tecnologías.
Los educadores besico un capital capital de cultura, de búsquedas y de prudencia, una experiencia de los valores que humanizan (y deles que deshumanizan), que es preciso transmitir -como figuras modélicaspara colaborar a que otros puedan vivirsu “acabamiento de ser hombre”, y esa colaboración es parte del proceso de “acabamiento” “acabamiento” del propio educador o educadora Sin duda, con esto se abren nuevas preguntasacerca de dónde y cómo se están transmitiendo los valores que lsurnanizanysi aeaso los educadores seporcibena simianos simianos como hgunsmodélicssqueviven hgunsmodélicssqueviven su propio”aeabamiento de ser hombre” siendo para estudiantes y colegas una fuente de inspirac Wsn, estimulo de eonocirnientoyansor el bien, la justicia y la belleza; y, por cierto,.. , qué pasa con la primera escuela que son las familias. Son preguntas que quedan para otra columna.. - -