Autor: NICOLÁS DURANTE | Economía y Negocios
El debate que se instala sobre el rol del Estado
LOS EXMINISTROS DE | LARRAÍN, RODRIGO VA MARFÁN ANALIZAN DC ESTÁN DANDO EN MED QUE SE PROFUNDIZARÁ CRISIS SANITARIA: ESTADO Y HACIA DÓNDI DEUDA DEL PAÍS. I en octubre de 2019, con el estallido social mediante, el rol del Estado en Chile ya era un tema a revisar, hoy con el coronavirus a cuestas el debate se acentúa.
La crisis develó que se requiere de un Estado más fuerte, plantean algunos; uno transformado y más moderno, dicen otros, o con el mercado bogando por sí mismo una vez que la crisis sanitaria inicial amaine. El asunto genera debate entre economistas y políticos.
Si en décadas pasadas la discusión en el mundo era si los países optaban por el modelo de John Maynard Keynes, con un Estado más fuerte y aplicando política fiscal potente —particularmente en períodos de crisis—, o el modelo del economista Milton Friedman, centrado en el valor del mercado para resolver problemas, de gran influencia en el Chile de los años 80, hoy el debate pareciera ser otro y está en la escala de los grises. Evidente que una de las lecciones de la pandemia es que necesitamos tener un Estado más efectivo.
Las protestas de octubre llevaron a una discusión aún inconclusa sobre el tamaño del Estado, sus rolesredistributivo y como proveedor de servicios, así también sobre cóhacer para garantizar derechos, lo que incluye salud y seguridad social. Creo que la pandemia puso el aspecto de efectividad del Estado mucho más al centro en esa discusión.
La idea de que es posible tener una comunidad que funcione, con 66 TENEMOS ESPACIO PARA GASTAR MÁS, ¡LAS TASAS A 10 AÑOS SON UF + 0%! PERO NOS ESPERAN AÑOS DUROS. ¿QUÉ HACER? RECONOCER ESTE DESAFÍO Y ACORDAR UN MARCO FISCAL DE MEDIANO PLAZO. COMO ADULTOS”. RODRIGO VALDÉS LASMEDIDAS ECONÓMICAS ADOPTADAS EN CHILE Y EL RESTO DEL MUNDO DEBIERAN SER DESMANTELADAS CUANDO PASE LA PESTE. LOS ELEVADOS RECURSOS PÚBLICOS INVOLUCRADOS PUEDEN SOSTENERSE DURANTE UN TIEMPO LIMITADO" MANUEL MARFÁN Un Estado mínimo, creo que tendrá poca defensa.
La pregunta difícil, sin embargo, escómo hacemos para que ese nuevo Estado garantice el bien común”, plantea Rodrigo Valdés, profesor de la Escuela de Gobierno de la Universidad Católica y exministro de Hacienda en el gobierno de Michelle Bachelet.
Felipe Larraín, investigador de Clapes UC y exministro de Hacienda delos gobiernos de Sebastián Piñera, plantea que el Estado tiene un rol insustituible en el desarrollo económico, principalmente a través de las políticas públicas, que se traducen en iniciativas legales y de gestión, especialmente en estas circunstancias, en tiempos de crisis.
“El Estado debe regular, promover la competencia, y también generar las condiciones para que se despliegue la iniciativa privada, que es la clave para generar buenos empleos, mejores salarios y más bienestar para las personas”, afirma. También es claro en que en esta pandemia ha requerido un rol mucho más activo de la política fiscal, no solo en Chile, sino que en el mundo.
“En tiempos en que la acti vidad privada, el empleo y los ingresos de las personas caen en forma bastante dramática, se requiere una fuerte expansión fiscal; estos son tiempos de Keynes, aunque en un sentido más amplio que aumenTar el gasto público. Hablamos de una política económico-social que provea liquidez, garantías, seguro de cesantía y otros apoyos. Pero cuando la actividad de los privados crece fuerte, es tiempo de moderar el estímulo fiscal, como se hizo en Chile en 2018. Necesitamos un mejor Estado, no necesariamente uno más grande. Poreso, debemos insistir en la urgencia de modernizar el Estado, como se ha estado haciendo desde inicios del gobierno del Presidente Piñera. La pandemia resaltó que el Estado tiene aún muchas falencias y que debemos apurar el paso”, añade el exministro. Otra opinión sobre el rol del Estado plantea Manuel Marfán, exvicepresidente del Banco Central y actual director ejecutivo del programa Cieplan-U. Talca. “Más allá del coronavirus, el concepto del rol del Estado en Chile es uno que en el mundo desarrollado no existe.
Como dice Mariana Mazzucato, reconocida economista y académica de la University College London, 'no hay que hacer lo que Estados Unidos dice, sino lo que Estados Unidos hace”. Estoes, el Estado de las economías desarrolladas es un actor que interviene desembozadamente en el desarrollo económico moderno, Solo baste recordar que la internet, el GPS y la pantalla táctil, entre muchos otros, son desarrollos tecnológicos de la industria militar”. En otro plano, agrega el también exministro de Hacienda del gobierno de Eduardo Frei Ruiz-Tagle, el fracaso de la empresa danesa Maersk para fabricar contenedores en Chile y que terminó retirando suinversión en 2018 fue —dice Marfán— una falla del Estado. “En los países desarrollados, el Estado es el principal agente para construir confianzas para iniciativas que requieE S diferentes sectores, como las nas de valor. El Estado moderno es también un agente clave para que las universidades (las dueñas del conocimiento en la sociedad del conocimiento) se involucren activa mente en el apoyo a la innovación productiva. La participación activa del Estado modemo en la economía no es en contra del sector privado, sino con el sector privado. Eso no existe en Chile”. Esosí, el economista Rodrigo Valdés también recuerda que Chile ya optó por ser una economía abierta “Nuestra vocación de ser una economía abierta, con una macroeconomía ordenada, no cambiará fundamentalmente. Pero enfrentaremos un mundo más complejo. Probablemente, habrá retrocesos en el proceso de globalización y con seguridad tendremos de herencia bastante endeudamiento. Hay áreas promisorias, como el turismo, que deberán repensarse. Tal vez el teletrabajo nos permita usar bastante menos espacio de oficinas y ahorrar en desplazamientos; bastaría un día a la semana para hacer un cambio grande. Hay mucho para pensar”, recalca.
Endeudarse y gastar ahora o después Una de las grandes discusiones en desarrollo, y que tienen que ver con el tamaño del Estado, es el nivel de endeudamiento actual y cómo evolucionaráeesa curva entreel gasto para superar la emergencia inmediata y la posterior recuperación que vendrá, sobre todo si el nivel de deuda del fisco va acercándose raudamente haciael 40%, número no visto en los últimos 30 años. Y ahí, el rol del EsTado vuelve a estar en entrevero. Manuel Maríán plantea que el coronavirus debe representar una situación transitoria en términos de gasto. “En principio, las medidas económicas adoptadas en Chile y el resto del mundo debieran ser desmanteladas cuando pase la peste. Los elevados recursos públicos involucrados pueden sostenerse durante un tiempo limitado. Prolongarlos más allá de lo necesario implicaría una trayectoria explosiva de la deuda pública. Dicho esto, algunos economistas, como el premio Nobel Robert Shiller, entre otros, han señalado que la protección del ingreso familiar es una innovación interesante de esta coyuntura que merece ser estudiada. Pero se trata de 'una medida cara que debe competir por el uso de recursos públicos conotras necesidades del Estado”, estima. Felipe Larraín acota que no es prudente usar todas las balasahora, porque esta batalla puede ser larga. “El Gobierno ha podido gastar más y endeudarse más porque parte de tunasituación fiscal muy sólida, que se ha construido con esfuerzo a través de varios gobiernos. Esto ha significado entregar alivios tributarios, ayudas de ingresos y bienes a los más vulnerables, garantías y capitalizaciones a empresas públicas. Luego de la convulsión social y del Covid-19, el Gobierno ha acelerado el paso.
Esto corresponde hacerse porque la crisis es profunda y está golpeando a los chilenos, pero hay que estar consciente de que la mayor deuda noes gratis, tiene uncoslo, y si queremos mantener condiciones de acceso favorable a los mercados para poder usarlas en alguna necesidad futura, debe accon responsabilidad”. Tal como una familia —agrega Larraín— “no querría usar todos sus ahorros y capacidad de endeudamiento en algún momento, por difícil que fuera, porque debe pensar también en el futuro, Por eso, es el momento de pensar cómo incrementar el crecimiento, que es la capacidad de generar ingresos futuros, Y es necesario guardar espacio fiscal para un plan de reactivación que permita recuperar nuestra capacidad de crecer”. Valdés advierte: “La discusión de que si podemos gastar US$ 100 llones adicionales este mes, oel tira y afloja del ministro de Hacienda en el Congreso en cada proyecto, no dan para más.
La realidad es que tene'mosespacio para gastar más. ¡Las tasas a 10 años son UF Pero nos esperan años duros más adelante desdeel punto de vista fiscal, por razones distintas a los gastos de la pandemia. ¿ Qué hacer? Reconocer este desafío y acordar un marco fiscal de mediano plazo. Como adultos”.