Autor: (*) Centro de Documentación Patrimonial Utalca

El archivo epistolar de Mariano Latorre
Efemérides/CDP Utalca A 66 años del fallecimiento del escritor nacido en Cobquecura cobran vigencia esta serie de cartas, fuentes primarias que nos remiten al pasado desde el testimonio directo de su protagonista Ariano Latorre escribió una serie de cartas a quien más tarde sería su esposa, Virginia Blanco.
Esta correspondencia enviada desde Santiago a San Javier, entre los años 1911 y 1919, constituye la médula del archivo epistolar incorporado a los fondos del Centro de Documentación Patrimonial, dependiente del Instituto de Estudios Humanísticos Juan Ignacio Molina de la Universidad de Talca. Se trata de un amplio y variado archivo de correspondencia que consta de 76 cartas, tarjetas postales, sobres franqueados y fotografías de Latorre, fechadas en 1915, autografiadas a Fernando Santiván y Jerónimo Lagos Lisboa. El archivo fue adquirido a fines de 2018 gracias a la Ley de Donaciones Culturales al historiador Jaime González Colville con recursos aportados por empresa Inmobiliaria Independencia.
Fue catalogado, digitalizado y conservado por el Centro de Documentación Patrimonial y representa la oportunidad de tensionar la obra del escritor, porque permite investigar en su memoria más íntima al punto que las cartas son fuentes primarias que nos remiten al pasado desde testimonios directos. Con el estudio de la correspondencia no solo entramos al pensamiento del escritor, también al ambiente social de la época.
Algunas de sus cartas son una excusa para construir un texto narrativo que aparece como inédito frente al otro imaginario al que Latorre escribe desde su trabajo en la Biblioteca Nacional: hay secretos, trivialidades y confesiones; es fascinante este material: “Haz leído el libro de Díaz? ¿ Llegó? Es posible que no te guste ese género de poesía” (... ) “Mi querida Virginia, por qué no te pregunté entonces los motivos de tu frialdad”, escribe Latorre en enero de 1914. Las cartas llegan de un día para otro, son despachadas en Santiago y en 24 horas Una historia desde las emociones aparecen con el timbre de San Javier. Biografías La narración biográfica de Latorre nos remite a que nació en Cobquecura el 4 de enero de 1886 y falleció en Santiago, el 10 de noviembre de 1955. Vivió su infancia en Parral y Constitución para trasladarse a Santiago. En Talca pasó fugazmente como alumno interno. Sus biógrafos señalan que escribió para medios talquinos como La Actualidad y La Libertad y para la revista capitalina Zig-Zag. Luego de abandonar la carrera de Derecho en la Universidad de Chile, que seguía paralelo a la de Pedagogía en Castellano en el Instituto Pedagógico, en 1915 se tituló como profesor de castellano. En 1936 recibió el Premio Municipal de Santiago y posteriormente el Premio Nacional de Literatura, en 1944. Latorre escribió más de 20 obras entre las que destacan Cuna de Cóndores de 1918 y Zurzulita de 1920. Falleció el 10 de noviembre de 1955 de un paro cardiaco. El género epistolar tiene una doble ventaja. Histórica, por una parte, en relación con un trabajo archivístico acerca del contexto nacional y regional en el cual se gestaron las cartas. Por otra, hablando de un género literario en sí con sus propios códigos, también es necesario considerar el aporte estético, político y ético de estas cartas. De allí el interés de la correspondencia de Mariano Latorre, valioso material que necesita ahora una edición crítica para su publicación y luego divulgación. El origen de las cartas Las cartas estaban en poder de doña Virginia Blanco, en un enorme sobre, recuerda Jaime González Colville. “La conocí en Santiago, en 1980, en casa de su hijo, el doctor Mariano Latorre Blanco en calle Suárez Mujica. Sabedora de mi admiración por don Mariano me ofreció las cartas.
Pero no alcanzó a concretar dicho acto, pero su hijo, el doctor Latorre, presente en el instante del ofrecimiento, me las trajo a Huerta de Maule en 1985, cuando hicimos un acto en homenaje de Latorre”. Por medio de la recuperación de bibliotecas, cartas, bitácoras, autobiografías y memorias, el Centro de Documentación Patrimonial de la Universidad de Talca permite a investigadores reconstruir historias locales desde fuentes digitales dispuestas para la comunidad. Las cartas, además de fuentes para la interpretación, constituyen un género en sí mismo, especialmente cuando sirven para conocer y comprender el proyecto literario, la vida y la época en que vivió un autor.
Según Violi, (1987) la escritura que se realiza en la ausencia de uno de los interlocutores constituyendo un “diálogo diferido”, donde “la presencia real del uno tan solo puede acompañarse de la reconstrucción imaginaria del otro, en un tiempo y lugar distintos”. En el subgénero de la carta de amor, la correspondencia que envió Carmen Arriagada al pintor Juan Mauricio Rugendas constituye un ejemplo valioso compilado por Óscar Pinochet de la Barra. Q

Resumen

Efemérides/CDP Utalca A 66 años del fallecimiento del escritor nacido en Cobquecura cobran vigencia esta serie de cartas, fuentes primarias que nos remiten al pasado desde el testimonio directo de su protagonista Ariano Latorre escribió una serie de cartas a quien más tarde sería su esposa, Virginia Blanco., Esta correspondencia enviada desde Santiago a San Javier, entre los años 1911 y 1919, constituye la médula del archivo epistolar incorporado a los fondos del Centro de Documentación Patrimonial, dependiente del Instituto de Estudios Humanísticos Juan Ignacio Molina de la Universidad de Talca., Se trata de un amplio y variado archivo de correspondencia que consta de 76 cartas, tarjetas postales, sobres franqueados y fotografías de Latorre, fechadas en 1915, autografiadas a Fernando Santiván y Jerónimo Lagos Lisboa.

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