Creadora de las frambuesas “santas”
Las nuevas variedades se plantan en varios países. La investigadora de la UC ya prepara una nueva generación de variedades de frambuesas y asegura que no dan abasto con la producción actual de plantas.
MARINA GAMBARDELLA: La mayor parte de la producción de frambuesas en Chile está en manos de pequeños agricultores, lo que gatilló la decisión de la genetista e investigadora Marina Gambardella de desarrollar una nueva variedad de esa especie, que ofreciera una mejor alternativa frente alas variedades tradicionales más usadas, como la Heritage. “Yo tomé la decisión de hacer este trabajo desde que tenía 14 años, impulsada por mi profesora de biología del colegio. Y luego, cuando estudiaba en la universidad, sentí la fuerte convicción de devolver el privilegio que yo tenía al poder educarme a las personas que no podían hacerlo. Por eso siempre pensé en desarrollar ciencia aplicada y hacer un producto que sirviera”, comenta la profesora de genética de la Facultad de Agronomía de la Universidad Católica.
Como directora del programa de mejoramiento genético del frambueso del Consorcio Tecnológico de la Fruta, en 2016, luego de siete años detrabajo, registró las tres primeras variedades chilenas de este berry, con el nombre de Santa Clara, Santa Teresa y Santa Catalina, que también están registradas en Europa y otros países.
“Nos recibieron mucho más fácil en el extranjero que en Chile y como ya ha pasado algo de tiempo y los productores ven que es más productiva y que les da mejores resultados, hoy no damos abasto con las plantas que producimos y estamos ampliando la capacidad de los viveros”, asegura.
Para el éxito de este tipo de investigaciones, considera clave continuar generando variedades y no limitarse a los resultados que ya han conseguido, por lo que ya tiene nuevas selecciones de frambuesos que están próximos a ser registrados y patentados. “La vara está más alta, porque ahora tenemos que superar a nuestras propias variedades y características que sean útiles para los productores, como resolver la resistencia a enfermedades y plagas”, explica. También resalta que para mantener el liderazgo que tiene Chile como exportador de frutas en el hemisferio sur, es clave continuar e intensificar los programas de mejoramiento genético. “Hay que acelerar el tranco. Hemos hecho muchos esfuerzos, pero hoy deberíamos estar hablando de nuestras variedades de diferentes frutas y la industria ya debería estar cambiándose a variedades chilenas”, recalca Marina Gambardella.