Tres detalles de la maniobra para abrir la puerta del auto sin lesionar a un ciclista
En Holanda se conoce como "Dutch Reach” Tres detalles de la maniobra para abrir la puerta del auto sin lesionar a un ciclista Se hace con la mano que está más alejada de la Eo puerta para que el cuerpo y la cabeza giren hacia atrás y el conductor pueda así advertir la presencia de un motorista o ciclista.
Danny Aulestia Muñoz Un accidente que suele ser habitual es el que se produce cuando un automovilista detiene su vehículo y abre la puerta sin darse cuenta de que va pasando un ciclista, lo cual provoca la caída de este.
En países como Holanda esto es menos frecuente debido a que, por la gran cantidad de ciclistas en ese país, los conductores suelen tener internalizada la maniobra conocida como "Dutch Reach", que consiste en abrir la puerta del vehículo con la mano opuesta.
Es decir, si el piloto se va a bajar por su izquierda, debe abrir la puerta con la derecha, realizando una maniobra de torsión del cuerpo y la cabeza, lo cual le permite advertir si viene algún ciclista motorista u otro auto. Lo mismo debe hacer el copiloto: abrir la puerta con la mano izquierda cuando se va a bajar por la derecha.
La maniobra, de uso habitual en los Países Bajos, busca ser difundida en otros países gracias a iniciativas particulares o estatales, como es el caso de Reino Unido, donde se planteó incorporarla al código de uso de las autopistas.
Y en Estados Unidos, el doctor Michael Charney creó una fundación ("Dutch Reach Project") para difundir su uso y así ayudar a salvar vidas (ver detalles en https://bit.ly/2uXbz3K). "Al hacer eso (cambiar la mano con que se abre la puerta), automáticamente giras tu cuerpo. Y colocas la cabeza y los hombros para que mires directamente. Primero más allá del espejo retrovisor.
Y luego es muy fácil mirar hacia atrás y ver si hay bicicletas o automóviles que se avecinan", asegura Charney quien decidió patrocinar esta iniciativa a raíz de la muerte de una ciclista en Cambridge, Massachusetts. Según publicó "The New York Times", Charney logró que el programa "Dutch Reach" se impartiera en algunas clases de seguridad para bicicletas y en entrenamientos de flotas profesionales en su país.
Y además "ahora dos estados, Massachusetts e Illinois, lo incluyen en sus manuales de conductor oficiales". De acuerdo con este medio, un estudio realizado en 2015 por la Universidad de Columbia Británica en Vancouver encontró que este tipo de accidente (conocido en inglés como "dooring") es el que deja con más lesiones a los ciclistas en los accidentes en que están involucrados con un auto.
Los beneficios Marta Martínez, ergónoma y jefa del departamento de investigación aplicada de la Mutual de Seguridad explica que el primer punto de la maniobra de la mano cambiada es que obliga al conductor o piloto a girar el cuerpo y la cabeza. Lo segundo es que con esto mejora su visión de la ruta para advertís si viene algún ciclista o motorista.
En ter lugar está el hecho de que "llegara la manilla es más dificultoso y empujar la puerta para su apertura implica mayor esfuerzo". Esto incide en que la puerta del auto nunca se abrirá "toda y de un golpe". Ricardo Hurtubia, académico del departamento de Ingeniería en Transporte de la UC, doctor en modelación matemática en ciudades y transportes y ciclista, considera que esta "es una excelente medida y si se pudiere incentivar en Chile sería muy bueno". A su juicio, la dificultad radica en que "que no se puede obligar a los conductores o copilotos a estar conscientes de esta maniobra y además no se puede fiscalizar.
Pero sí sería una buena medida que en los exámenes de conducción se pudiera nota por una pregunta relacionada al tema". Sobre este último punto, Rodrigo Cruces, ingeniero industrial en Transportes de la UC y especialista en seguridad vial de la Asociación Chilena de Seguridad, señala que "en el examen práctico vigente en Chile, la lógica es que se evalúa a las personas de acuerdo con las faltas cometidas y una de ellas es abrir la puerta sin antes mirar hacia atrás por si viniere algún vehículo". Cruces explica que, si bien es difícil fiscalizar, la iniciativa apunta es a crear buenos hábitos. "Va más allá de una normativa o ley, y apunta a inculcarles a las personas los riesgos que conlleva obviar algo tan simple como mirar hacia atrás antes de abrir la puerta", afirma.
La ergónoma Marta Martínez comenta que la maniobra puede representar "alguna complicación" para los conductores de tercera edad o con gran exceso de peso. "Lo recomendable es hacer este movimiento muy lento", para evitar molestias "o que algún músculo de la columna se resienta". Este cuidado se debe tener porque, además de mover el tronco, "también hay un movimiento de cabeza y lo ideal es que el cuello vaya alineado con el cuerpo al hacer el movimiento, para así evitar una contractura".