AVANZANDO HACIA LA INCLUSIÓN FEMENINA
La mujer y la minería CECILIA RIVEROS, GERENTE DE RELAVES, ARCADIS CHILE n los últimos años se ha hablado mucho sobre la importancia de aumentar el porcentaje de mujeres en las actividades laborales, situación que, lamentablemente, tuvo un retroceso durante el período de pandemia.
Lo que hemos visto en los procesos de selección vinculados a la industria minera es que se ha contratado más mujeres, privilegiando su género frente a un hombre que pudiera presentar mejores capacidades para el mismo trabajo. Pero esto no es lo que buscamos.
Lo que queremos es tener un espacio con base en nuestras capacidades, nuestros estudios, desempeño y esfuerzo, que nos permita tener la oportunidad de ir creciendo en una empresa minera sin estigmatización de trabajos históricamente realizados por hombres y de esta forma poder acceder a cargos superiores, gerenciales y directivos en la minería. Cabe destacar que el porcentaje de mujeres en altos cargos es nulo en algunas compañías mineras.
De todas formas, es importante mencionar que hoy observamos con orgullo el tener una Ministra de Minería que representa a todas las mujeres que se desenvuelven en este ámbito y que está dando una señal clara a toda la industria. Las mujeres somos más que un número estadístico para cumplir metas de inclusión anuales, sino que somos valiosas, criteriosas, valientes, con poder de decisión, colaboradoras y capaces de formar equipos. Es eso lo que deben buscar las compañías mineras y.
De esa forma, su aproximación a la sociedad tendrá una cara más amigable, cercana y de alto desempeño profesional. maximizar el bienestar social PAULA ROJAS, INGENIERA CIVIL METALÚRGICA Y ACADÉMICA FACULTAD DE INGENIERÍA Y CIENCIAS DE LA UNIVERSIDAD ADOLFO IBÁÑEZ n estos tiempos de incertidumbre, hay al menos una cosa clara: necesitamos cambiar nuestra manera de extraer, procesar, usar y desechar nuestros recursos, buscando formas de minimizar impactos negativos y maximizar el bienestar social. Lograr este objetivo requiere de una visión responsable e integradora, que congregue a personas y equipos dinámicos, multidisciplinarios y con miradas diversas detrás de un objetivo común. Es un gran desafío, pero es el único camino para desarrollar una ingeniería sostenible que permita abordar los grandes retos que enfrentamos como sociedad.
Existe la necesidad de que más mujeres se interesen, estudien y desarrollen ingeniería, aportando no solo su mirada experta, sino también su liderazgo en proyectos de impacto positivo, con menor impacto ambiental, más responsables y sostenibles.
Aunque las cifras de profesionales mujeres en ingeniería son mejores que hace un par de cifras del estudio Fuerza Laboral de la Gran Minería Chilena 2021-2030, muestran que la participación de mujeres en la industria minera es del 11,7 %, lo que demuestra que, en una de las industrias más importantes de nuestro país, la fuerza laboral femenina aún es muy baja. Por lo anterior es que desde el mundo académico vemos la urgencia de incentivar a más jóvenes mujeres a enfrentar el desafío de desarrollar una carrera en ingeniería.
Es fundamental formar profesionales que no solo tengan sólidos conocimientos técnicos, sino que valoren el trabajo colaborativo, con equipos diversos, equitativos y comprometidos con una visión más amigable y responsable, tanto con nuestras comunidades como con nuestro medio ambiente. la mujer y la mineria CECILIA RIVEROS, GERENTE DE RELAVES, ARCADIS CHILE n los últimos años se ha hablado mucho sobre la importancia de aumentar el porcentaje de mujeres en las actividades laborales, situación que, lamentablemente, tuvo un retroceso durante el período de pandemia.
Lo que hemos visto en los procesos de selección vinculados a la industria minera es que se ha contratado más mujeres, privilegiando su género frente a un hombre que pudiera presentar mejores capacidades para el mismo trabajo. Pero esto no es lo que buscamos.
Lo que queremos es tener un espacio con base en nuestras capacidades, nuestros estudios, desempeño y esfuerzo, que nos permita tener la oportunidad de ir creciendo en una empresa minera sin estigmatización de trabajos históricamente realizados por hombres y de esta forma poder acceder a cargos superiores, gerenciales y directivos en la minería. Cabe destacar que el porcentaje de mujeres en altos cargos es nulo en algunas compañías mineras.
De todas formas, es importante mencionar que hoy observamos con orgullo el tener una Ministra de Minería que representa a todas las mujeres que se desenvuelven en este ámbito y que está dando una señal clara a toda la industria. Las mujeres somos más que un número estadístico para cumplir metas de inclusión anuales, sino que somos valiosas, criteriosas, valientes, con poder de decisión, colaboradoras y capaces de formar equipos. Es eso lo que deben buscar las compañías mineras y. De esa forma, su aproximación a la sociedad tendrá una cara más amigable, cercana y de alto desempeño profesional.
Maximizar el bienestar social PAULA ROJAS, INGENIERA CIVIL METALÚRGICA Y ACADÉMICA FACULTAD DE INGENIERÍA Y CIENCIAS DE LA UNIVERSIDAD ADOLFO IBÁÑEZ n estos tiempos de incertidumbre, hay al menos una cosa clara: necesitamos cambiar nuestra manera de extraer, procesar, usar y desechar nuestros recursos, buscando formas de minimizar impactos negativos y maximizar el bienestar social. Lograr este objetivo requiere de una visión responsable e integradora, que congregue a personas y equipos dinámicos, multidisciplinarios y con miradas diversas detrás de un objetivo común. Es un gran desafío, pero es el único camino para desarrollar una ingeniería sostenible que permita abordar los grandes retos que enfrentamos como sociedad.
Existe la necesidad de que más mujeres se interesen, estudien y desarrollen ingeniería, aportando no solo su mirada experta, sino también su liderazgo en proyectos de impacto positivo, con menor impacto ambiental, más responsables y sostenibles.
Aunque las cifras de profesionales mujeres en ingeniería son mejores que hace un par de cifras del estudio Fuerza Laboral de la Gran Minería Chilena 2021-2030, muestran que la participación de mujeres en la industria minera es del 11,7 %, lo que demuestra que, en una de las industrias más importantes de nuestro país, la fuerza laboral femenina aún es muy baja. Por lo anterior es que desde el mundo académico vemos la urgencia de incentivar a más jóvenes mujeres a enfrentar el desafío de desarrollar una carrera en ingeniería.
Es fundamental formar profesionales que no solo tengan sólidos conocimientos técnicos, sino que valoren el trabajo colaborativo, con equipos diversos, equitativos y comprometidos con una visión más amigable y responsable, tanto con nuestras comunidades como con nuestro medio ambiente.