Autor: CONSTANZA MENARES
Alumnos viajan a Tierra del Fuego para estudiar las amenazas del pingüino rey
Usando cámaras trampa, dos escolares y un investigador monitorearán la mortalidad de los polluelos de estas aves. La idea es generar un registro inédito de depredadores terrestres que ponen en peligro la conservación de la especie y acercar a los jóvenes a la investigación científica en terreno.
En Bahía Inútil, un lugar inhóspito y ventoso ubicado en la costa occidental de la Isla Grande de Tierra del Fuego, se encuentra el Parque Pingúino Rey, reserva de propiedad privada que alberga la únia colonia de Aptenodytes patagonicus —nombre científico de la especie— en Sudamérica. Sin embargo, aunque el parque promueve su conservación, la existencia del pingúino rey en la zona se encuentra amenazada por causa de animales introducidos. “Desde el año pasado tenemos antecedentes de mortalidad de polluelos de pinguino rey.
Existe una gran problemática porque están siendo muy amenazados por la depredación de visón y zorro gris, ambos exóticos e invasores en la región”, dice Carlos Zurita, director del Centro de Investigación Científica Escolar (CICE) e investigador del Centro de Ecología Aplicada y Sustentabilidad de la U.
Católica (Capes). Por este motivo, Zurita viajó a la Región de Magallanes y de la Antártica Chilena junto a Raúl Meza y Vicente Araya, Proyecto de ciencia escolar: Alumnos de segundo medio e integrantes del CICE, para guiar un proyecto de ciencia escolar que monitoreará el acercamiento de depredadores a la colonia de pingúinos rey en la zona “En terreno es donde los estudiantes generan vínculos y habilidades blandas. Estando ahí experimentan vivencias y adquieren un mayor grado de compromiso con la ciencia porque crean su propio conocimiento”, cuenta el profesor. Para lograr su objetivo el equipo instaló una serie de cámaras trampa en la reserva.
La idea es que estos dispositivos —que mediante un sensor de movimiento infrarrojo captan la presencia de animales en estado salvaje— fotografíen alos zorros u otros animales cada vez que se aproximen a cazar las crías de los pingúinos. “Nuestro enfoque tiene que ver con los factores que propician la mortalidad de esta especie, como la depredación por parte de animales exóticos. El pingúino rey nunca tuvo un depredador terrestre, siempre ha tenido depredadores marinos o aéreos”, Asegura Raúl Meza. Hastajulio, el equipo viajará una vez por mesa la reserva para chequear las cámaras, reemplazar las baterías y recolectar las tarjetas de memoria con todos los datos que recopilen. Zurita explica que tras analizar este material generarán una “información de depredación que no está registrada” y quelos resultados servirán para que los encargados del parque generen nuevos planes de conservación. “Nunca había visto un pingúino, fue algo súper bacán. La investigación conlleva una lluvia de muchas emociones”, admite Vicente Araya.
Y agrega: “Una de las cosas importantes que aprendí fue el trabajo en equipo, lo que me da una motivación para continuar”. Su compañero, Raúl Meza, coincide: “Tener la oportunidad tan grande der a la zona subantártica a investigar sobre estos pingúinos me motiva mucho porque cs nozco de la flora y la fauna de una forma completamente diferente”,