Plan Alto Andino: Una promesa incumplida
6 Es el minuto de hacer este plan extraordinario para recuperar tiempo perdido.. ” José Miguel Durana Semir, senador por Arica y Parinacota Parinacota que a pesar de que abarca alrededor de un 48% de la superficie regional, concentra menos del 1,2% de la población regional, en términos de superficie y ella sigue disminuyendo y desmejorando su situación económica, en desmedro de sus habitantes y de nuestra región, por lo tanto, junto al senador, José Miguel Insulza, nos reunimos en La Moneda, con el Presidente, Sebastián Piñera, en agosto de 2018 para solicitarle, entre varias otras materias, una Política Especial para esta provincia.
En enero de 2019, junto con enumerar obras del denominado Plan de Desarrollo, el Jefe de Estado anunció que a nivel presidencial elaboraban un programa de desarrollo, especialmente diseñado para lograr un repoblamiento de la provincia de Parinacota, destacando su importancia crucial, por ser una Zona bifronteriza que por falta de políticas públicas no ha aprovechado en plenitud la ganadería camélida, la agricultura con identidad, el turismo sustentable y el sector de energías renovables para hacer de Parinacota una provincia que tenga una economía autosustentable.
Han pasado ya dos años y luego de varios encuentros en terreno, en Parinacota y Camarones, con autoridades representativas y la comunidad organizada y varias reuniones efectuadas en nuestra región y en la capital, hoy estamos en punto muerto, pese a vaRias gestiones que efectuamos a nivel parlamentario y gubernamental regional y aun cuando es entendible el contexto de la pandemia que se inició hace un año, desviando el foco de atención y de recursos humanos y económicos, no es una excusa para que el gobierno no implemente el anhelado “Plan Andino”. Nuestro país no puede cometer la irresponsabilidad de seguir despoblando sus zonas fronterizas, porque estamos debilitando nuestra soberanía y ya lo vimos con la demanda de La Haya y eso es responsabilidad de todos los gobiernos que han estado de turno que han desaprovechado las riquezas naturales y culturas de nuestras tierras ancestrales.