Editorial: Hospitales para la región de Los Ríos
Editorial: Hospitales para la región de Los Ríos 0 a preocupación por los nuevos hospitales de la región de Los Ríos es transversal. Política y socialmente, todos los actores locales han manifestado inquietud y voluntad de cooperación para que se destraben procesos, avances construcciones, se hagan inversiones y finalmente la red asistencial pueda funcionar de una mejor manera. En este sentido, cabe alegrarse por las buenas noticias recientes. Los hospitales de Los Lagos y Río Bueno avanzan y estarían listos en 2027. Hubo un acuerdo con las comunidades en La Unión para un nuevo recinto y se iniciaron obras de refacción en el antiguo. Se definió la compra de un terreno para el hospital de Valdivia en un predio de la Universidad Austral. Y en Panguipulli, se aprobó el diseño para el recinto intercultural que atenderá a más de 40 mil personas. Sin embargo, en varios de estos temas es necesario ahondar más.
En la capital del Ranco, por ejemplo, la reciente visita de la ministra de Salud Ximena Aguilera por el hospital nuevo causó polémica (fue privada, sin prensa y no recibió a la comunidad que colaboró con el proyecto). Además, todavía faltan respuestas claras respecto de inicio de obras. Y en hospital antiguo, no se sabe cuándo habilitarán el escáner guardado en una bodega hace ocho meses. La Contraloría regional inició una investigación. En Valdivia, falta definir si se comprará o expropiará el predio Vista Alegre de la UACH (ubicado en Santa Elvira, en un área considerada rural) para el nuevo HBV.
Ese espacio no era el más adecuado entre las opciones estudiadas por el Servicio de Salud, pero se optó por él tras no ser factible contar con el recinto militar de calle Bueras, que cumplía mejor con las exigencias. Ahora debe materializarse la adquisición, pero no se conocen montos, ni plazos. En Panguipulli, si bien hay terreno desde 2022 y aprobación del Ministerio de Desarrollo Social para el diseño desde diciembre de 2024; aún el Minsal no asigna fondos para iniciar el proceso en 2025. Sumando todos estos factores, el panorama parece poco alentador. Y frágil. Es necesario, entonces, que se transparente datos y que los pasos sean acompañados por seguimientos reales, para que las obras efectivamente se materialicen, por el bien de las miles de personas que lo necesitan. Editorial. La Unión, Valdivia, Panguipulli, enfrentan dificultades con sus nuevos recintos. Editorial