El show efectista de Jared Leto encendió la primera jornada de Lollapalooza
El show efectista de Jared Leto encendió la primera jornada de Lollapalooza recién, luego de las 18:00 horas, se vieron las primeras multitudes frente a los escenarios. A las 12:30 horas fueron los penquistas de Machuca los encargados de abrir el festival con un punck rock testosterónico a altos decibeles que convocó a los más adultos que habían llegado hasta esa hora.
Un pequeño grupo, para una partida furiosa que en las postas de los otros escenarios ofrecía ritmos urbanos con Ceaese y latinos, con Florián, el proyecto del hijo de Vicentico, que todavía parece buscar su identidad. Luego vino el pop alternativo de la mexicana Bratty, la puertorriqueña GALE y la también mexicana Kenia OS, con su propuesta que transita entre los ritmos urbanos y el pop. Más tarde fue el turno de Dayglow, el proyecto del estadounidense Sloan Struble, con su pop feliz y alternativo, que incluyó "There She Goes" en su set, un cover a The La's.
Todo en sintonía con el sol abrazador de 29 grados de las 16:00 horas, una alta temperatura ya en el final del verano, pero que refrescaba con una brisa agradable, que entregaba aún un mejor clima en el Alternative Stage, bajo un pabellón de 2.400 metros cuadrados, un acierto en esta edición y que tuvo a un León Larregui brindando una gran presentación ahí, seguido por un público que colmó ese lugar, convenientemente, bajo la sombra. Y una Jessie Reyez, que llegó como uno de los reemplazos de una baja sensible en el cartel, como la de Rina Sawayama, que realizó una presentación lúdica con el público.
La canadiense se comunicó en español, bromeó con la gente y cantó "One Kiss", de Calvin Harris junto a Dua Lipa, "porque yo la escribí", dijo, sobre el tema que figura en los créditos como una coautoría entre los tres.
Esto, mientras en los otros escenarios se desataba el post hardcore de Pierce The Veil, el trap de Akriila y la presentación de Hozier, que se despidió con su éxito, "Take Me To The Church", para una tarde que mostró largas filas para ingresar al Beer Garden, en el primer año en que se vendió alcohol en el festival.
E l público tardó en llegar ayer al arranque de la nueva edición de Lollapalooza y fue recién en el turno de Thirty Seconds To Mars, poco antes de las 19:00 horas, que se vieron las primeras estampidas de asistentes entre escenarios, desde el final de Hozier y el comienzo de la banda de Jared Leto.
El taquillero actor de Hollywood comenzó con estridencia y lanzamiento de confeti, para su pop rock grandilocuente y a la vez anémico, con un cantante y actor que asume el rol de un vocalista protagónico, igual que en sus papeles en el cine, aunque sin la posproducción que hace la magia en el séptimo arte.
La banda comenzó con "Up In The Air" y tocó canciones como "This Is War" y "Rescue Me", donde subió al escenario a un grupo de fans desde el público y "Walk On The Water", además de temas de su último álbum, como "Stuck", virando al pop electrónico, en una primera jornada de festival a la que aún le restaban sus números principales: Limp Bizkit y el primer cabeza de cartel urbano, el colombiano Feid.
Arranque furioso Pasado el mediodía se abrieron las puertas del Parque Cerrillos para la entrada de los primeros fans, un grupo principalmente juvenil que ingresó con entusiasmo adolescente, con rostros de haber cambiado las clases por el festival.
Se distribuyeron entre los diversos escenarios, seis oficiales en el programa, pero que en el recorrido por el lugar se iban descubriendo otros más pequeños, incluso los stands de algunas marcas, como el de una bebida energética que tenía batalllas de freestyle, para un paseo que iba ofreciendo música en vivo desde múltiples sectores y al mismo tiempo.
Lollapalooza se activó desde temprano, aunque la llegada del público en las primeras horas fue pausada y El show efectista de Jared Leto encendió la primera jornada de Lollapalooza JOSÉ VÁSQUEZ El taquillero actor de Hollywood, junto a su banda Thirty Seconds To Mars, tuvo la mayor convocatoria de la tarde en el festival, justo antes de los números principales.
ATON El festival también fue aéreo Justo cuando Jessie Reyez se presentaba en uno de los escenarios principales, comenzó el espectáculo aéreo de Los Halcones de la FACh, a las 17:30 horas en punto, llevando las miradas del público al cielo, que apuntó a los aviones con sus celulares. "Esperamos que la gente que va a ver a sus artistas y pasar un rato agradable con sus amigos, también pueda tener un momento grato con nosotros", contaba antes del vuelo el capitán de bandada Francisco Quiroga. "El año pasado hicimos maniobras muy reducidas, acotadas al espacio de tiempo que tuvimos en el festival y ahora, que tenemos más tiempo, haremos una rutina abreviada, pero que incluye todo tipo de acrobacias en formación y de acrobacias a nivel individual", explicó sobre esta nueva participación en el evento que mostró trucos tales como formar un corazón en el cielo.
El despegue y el aterrizaje de Los Halcones se realiza desde la Base Aérea de El Bosque, por lo que geográficamente algunos de los pilotos alcanzarían a volver para ver los shows finales. "A mí, personalmente, me gustaría ver a Blink-182 (que se presentan hoy), pero primero tenemos que enfocarnos en el vuelo y después, si es que hay tiempo, tratar de ir", señala Quiroga, que hoy y mañana, junto a su escuadrilla, repetirá este espectáculo aéreo sobre el Parque Cerrillos..