Autor: Eduardo Henríquez Ormeño
“Esta institución es el resultado de la tenacidad de su fundadora, Lucía Hernández”
FOTO: HECTOR ANDRADE / AGENCIA UNO Elga Arroyo Cortés, presidenta de la Corporación de Coros y Conciertos Santa Cecilia de Temuco: La Corporación Santa Cecilia acaba de cumplir 75 años de trayectoria en Temuco. Su misión sigue siendo la difusión y promoción de la cultura musical, el legado se su fallecida creadora, a través del desarrollo de coros y conciertos.
Hoy, bajo la presidencia de Elga Arroyo, matrona y una de las más experimentadas integrantes del histórico coro polifónico, proyecta unir nuevos lazos con el medio local y nacional para retomar la actividad de la sala y motivar a la comunidad a vivir la música como su fundadora soñaba. Emuco puede jactarse T de tener organizaciones culturales de larga data y vigencia. Una de ellas es la agrupación ecológica Sociedad Amigos del Árbol y otra, definitivamente, es la Corporación de Coros y Conciertos Santa Cecilia. Esta última debe ser una de la entidades artísticoculturales más antiguas del sur del país.
Fundada por la maestra de música Lucía Hernández Rivas (QEPD), hoy esta entidad es presidida por Elga Arroyo Cortés, exalumna de la profesora, matrona y una de las integrantes con mayor trayectoria del histórico Coro Polifónico Santa Cecilia, cuna de una institución que acaba de cumplir 75 años y que se proyecta al futuro con una serie de iniciativas y sueños por cumplir, todos anhelos acuñados desde el 1946, fecha en que todo comenzara con un tímido primer ensayo coral en Portales 854, la casa de Lucía Hernández Rivas.
Setenta y cinco años después, explica su actual timonel, “Santa Cecilia” se apresta a extender el legado de Hernández, que no solo deja una herencia monetaria, sino una serie de propósitos y compromisos que pasan por aportar al desarrollo de la cultura musical y estimular la formación y educación en el arte de la música y el canto de niños, niñas y adolescentes, trabajo que ni la pandemia ha podido frenar.
Con planes de retomar la programación de la Sala de Conciertos, la actividad coral y la realización del concurso de violín para jóvenes talentos, la actual presidenta de Santa Cecilia comparte hoy el significado de estos 75 años cumplidos y qué retos esperan a la corporación. -Son 75 años de trayectoria y vigencia, ¿qué significa esta historia? Y ¿ cuáles son las características de esta corporación que le han permitido sobrevivir al paso del tiempo? - La verdad es que yo tegré al Coro Polifónico Santa Cecilia en 1971 y no lo dejé jamás, a pesar de que me fui tres años a trabajar a Lonquimay.
Para entonces, la señorita Lucía extendía una invitación y motivaba a sus estudiantes (del Instituto Superior de Comercio, Liceo de Niñas Gabriela Mistral, Universidad Católica y otras) a integrarse como socias de la agrupación (... ). Yo soy una las más antiguas integrantes del coro, pero hay una compañera que destaca por ello, es Leonides Cárcamo, que se unió en 1955 y sigue cantando.
Así que ¿ qué tiene de especial esta corporación? Creo que lo más importante es su fundadora y gestora, la señorita Lucía “Creo que lo más importante es su fundadora y gestora, la señorita Lucía Hernández Rivas (... ). Porque lo que hace especial esta institución es que es el resultado del amor, la pasión y la tenacidad de la esta singular mujer”. “Retomamos los contactos con instituciones que son importantes para nuestro trabajo.
Con la Municipalidad de Temuco para poder contar con su apoyo (... ). También queremos mantener una relación estrecha con la Seremi de Educación y por supuesto, con la Universidad de La Frontera (... ), con algunos *vecinos' de Temuco que tienen un desarrollo interesante en la música (... ), incluso con la Universidad de Chile y la Usach”. “Somos parte del inicio de la vida cultural de Temuco y hay cosas que, de pronto, si no se retoman y conversan se van perdiendo.
Hoy hacemos un llamado a las personas de la comunidad a integrarse a nuestro coro y a nuestras actividades, queremos socios para nuestros conciertos, que nos ayuden mucho porque cada ayuda es un granito de arena que vamos recibiendo y nos permite mantenernos”. hernández Rivas, estudiante de piano graduada como profesora de música en la Universidad de Chile, en Santiago; la hermana menor de una familia de músicos que un día regresó para aportar a la cultura musical de Temuco. - ¿ Recuerda algún episodio de años bado? - Hace poco revisando unos archivadores con recortes de El Austral que guardaba la señorita Lucía me di cuenta que había algo que pensé que había soñado y que fue cierto.
En octubre de 1974 la Sala de Conciertos Santa Cecilia tuvo como invitada a la cantante y actriz Malú Gatica, que para entonces ya era famosísima, una estrella de Hollywood chilena, y que con una guitarra en los brazos hizo gala de vozarrón en el escenario de nuestra corporación. Ese es uno de tantos recuerdos memorables. Y a propósito de la pregunta anterior, hace poco hablaba con los nuevos integrantes del coro y les preguntaba qué sentimientos tenían por la institución. Todos coinciden en que se sienten dentro de una familia y agradecidos de la inclusión, de la posibilidad de integrar una agrupación con tanta trayectoria. Algunas fueron alumnas de la señorita Lucía y recuerdan notablemente su esfuerzo y su tenacidad.
Eso es muy bonito, porque esta institución es el resultado de la tenacidad de su fundadora, es que es el resultado del amor y la pasión de esta singular mujer. - ¿ El histórico coro polifónico sigue vigente? - Así es.
Conversaba con el actual director, Juan Díaz Ñanco, que se integró en 1986 y que hoy es profesor de música, y recordábamos que la señorita Lucía antes de morir vislumbró quién debía seguir al frente y lo ubicó para dejarle la tarea. Hasta antes de la crisis sanitaria, teníamos el coro adulto, uno juvenil y uno de niños que estaba partiendo. Después vino la pandemia y nos paralizó un rato, hasta que Juan Díaz motivó a buena parte del grupo para trabajar en modo virtual. Así continuaron los ensayos.
Fue todo un aprendizaje gracias al cual logramos grabar algunos villancicos en formato de video y este año que pasó repetimos la experiencia. -Son 75 años transcurridos. ¿Qué es de la corporación hoy? ¿ Cuáles son sus propósitos en esta nueva etapa? - Nuestra corporación siempre ha pretendido seguir las líneas de trabajo trazadas por su fundadora, que son la gestión, el coro y los conciertos. Mantener activa la responsabilidad administrativa no es menor porque vivimos del respaldo de benefactores. Así que tener funcionando esta entidad no es una tarea fácil.
Esta corporación privada sin fines de lucro que requiere de benefactores para subsistir... - Y ¿ todavía hay benefactores en Temuco? - Nosotros tenemos personas que nos ayudan y eso nos ha permitido, por ejemplo, llegar al Cuarto Concurso de Violín para Niños, Niñas y Jóvenes, sin ellos no podríamos hacerlo porque todo significa dinero. La vida cotidiana de nuestra organización tiene un costo y hay que mantenerla; además de los costos adicionales que hoy representa sanitizar la sala para responder a las exigencias sanitarias. Nosotros recibimos de la señorita Lucía una herencia y ese dinero se ha ido invirtiendo. Hoy nuestros colaboradores siguen siendo personas de Temuco y mientras sigamos contacto con ellos y ellas vamos a poder continuar.
También hay que reconocer que en muchas etapas de nuestra vida institucional hemos recibido el apoyo de la Municipalidad de Temuco, y esa relación se ha dado a través de una subvención destinada a financiar nuestro programa de conciertos. - de esto. ¿Qué pasó con su programa? Dado que se sabe que la pandemia congeló la actividad artística, especialmente, los conciertos... - El 2020 la sala de conciertos estuvo cerrada y recién en noviembre de 2021 la abrimos, justamente, con nuestro concurso de violín como primera actividad. Luego, en diciembre recibimos la visita de un quinteto de vientos de la Universidad de Santiago de Chile, y después, el coro grabó algunos Villancicos.
Así que pudimos abrir la sala nuevamente al público, un espacio con capacidad para 120 personas. - El concurso de violín es un compromiso adquirido con la comunidad para difundir y promover la música y sus valores entre las nuevas generaciones. ¿Cómo resultó esa cuarta versión? - Muy bien.
Es importante reconocer porque aquí tuvimos el apoyo importante de la Secretaría Regional Ministerial de Educación, donde la encargada de cultura, Nora de Rosas, jugó un papel importante en la difusión del certamen para llegar a muchos colegios de la Región. Fue muy interesante este año, se generó este vínculo que estamos decididos a mantener; porque tuvimos a estudiantes de Cholchol, de Villarrica y de Temuco en dos categorías, entre ellos talentos de la Escuela Trigales. Por ello, estamos muy agradecidos de los profesores que han asumido una tarea formativa, del entusiasmo de los propios jóvenes y de sus familias, que son fundamentales.
Este año, la categoría hasta 18 años la ganó Javiera Bravo Ceballos, de la Escuela Armando Dufey y la categoría de hasta 13 años fue para Daira González Girot, de Escuela Los Trigales. - En cuanto a gestión, ¿cómo se relaciona hoy la corporación con el medio regional y nacional para continuar su legado? - El segundo semestre de 2021 retomamos los contactos con instituciones que son importantes para nuestro trabajo.
Con la Municipalidad de Temuco para poder contar con su apoyo, y de hecho, para la última versión del concurso de violín nos regalaron libros para nuestros talentos juveniles, fue algo muy bonito porque nos juntamos en la idea de fortalecer la lectura. Allí tenemos un lazo creado y tenemos conversaciones pendientes para desarrollar algunas actividades en 2022. También queremos mantener una relación estrecha con la Seremi de Educación y por supuesto, con la Universidad de La Frontera, que también nos ayudó en el reciente concurso. Queremos formar lazos también con algunos “vecinos” de Temuco que tienen un desarrollo interesante en la música. Así que estamos retomando los vínculos, incluso con la Universidad de Chile y la Usach para hacer algunas actividades con ellos y sus artistas.
Todo esto dependerá de cómo nos vaya en la gestión y la administración. - ¿ Qué proyectos o planes hay para 2022? - Se viene una nueva versión del concurso de violín, la idea es retomarlo desde temprano para que más personas, colegios, comunas y quizá regiones vecinas puedan participar. Con el coro polifónico queremos reconectar con aquellas personas que se restaron en pandemia, atraer a nuevos integrantes y confiamos en que la crisis sanitaria nos permita poder hacer ensayos presenciales. De hecho, ahora estamos invitando a audiciones para marzo. Y pensamos también reactivar nuestro programa de conciertos. Tenemos ideas surgiendo. Una de ellas es retomar los antiguos conciertos en el Cerro Ñielol, donde tuvimos una estrecha coordinación con la Sociedad Amigos del Árbol.
Y para todo esto queremos pedir a los medios de comunicación y al diario que nos acompañen en la difusión de nuestras actividades, que sigan cerca nuestro después de 75 años de historia, porque nosotros somos parte del inicio de la vida cultural de Temuco y hay cosas que, de pronto, si no se retoman y conversan se van perdiendo.
Hoy hacemos un llamado a las personas de la comunidad a integrarse a nuestro coro y a nuestras actividades, queremos socios para nuestros conciertos, que nos ayuden mucho porque cada ayuda es un granito de arena que vamos recibiendo y nos permite mantenernos.