La historia de la locomotora que fue sacada sin previo aviso de la Villa Covico en Coquimbo
M El municipio buscará financiamiento de la obra a través del Fondo Regional de Iniciativa Local del Gobierno Regional 2022 (FRIL), para ser implementado durante el transcurso del 2022.
Se habría evaluado la participación de Ferronor en el costo de la reparación de la máquina, pero sería el municipio el que correría con esos gastos, más el de la plaza en general, bajo el formato mencionado anteriormente. La famosa locomotora a vapor ADI-1056, marca Schindler, Suiza, del año 1955, fue donada por Ferrocarriles del Estado en honor a sus trabajadores que habitaban en su mayoría en el sector Covico de Coquimbo. Tras décadas convirtiéndose en un verdadero centro de atención, sobre todo para niños, la máquina fue sacada sin previo aviso por la empresa Ferronor en el año 2012. Dijeron que iba y volvía, que el objetivo era repararla y luego la traerían de vuelta. Pasó el tiempo y nada. Vecinos se organizaron para buscar su regreso, sueño que sería un hecho, pues el denominado monumento sería parte de un ambicioso proyecto que la administración Manouchehri puso como prioridad para el 2023. Desde el municipio informaron de un avance del diseño de una plaza con la obra inmersa que alcanza un 90%. Muchos pensaron que había sido vendida, decían los transcendidos. Más de alguno recuerda paseos, tardes de amigos o pololeo, en ese mítico espacio que de la noche a la mañana desapareció repentinamente. Era todo un espectáculo subirse, cuentan vecinos a LA REGIÓN, recordando con nostalgia momentos de antaño. La locomotora en cuestión estaba obsoleta, por eso nunca estuvo operativa para la empresa Ferrocarriles.
Y si bien la máquina había sido víctima de inescrupulosos que la rayaron una y cuantas veces, lo orinaron, e incluso robaron parte de su estructura, como la campana, la obra era respetada por la comunidad, ya que tocaba el corazón de los habitantes que se ganaron la vida en el oficio. La mañana del 4 de abril, hace 10 años atrás, funcionarios de la empresa Ferronor retiraban el tren con maquinaria pesada. En menos de media hora lo sacaban de la ex oficina administrativa de ferrocarriles, hoy la oficina de Dideco, lugar donde estuvo emplazado todo este tiempo. Antes también había estado encerrada en el patio del CEDIN.
Los hijos de ex ferroviarios, y otros vecinos adultos mayores, cuentan que se quedaron tranquilos con la explicación que daba la empresa, la promesa era que se la llevaban solo por un tiempo corto y por motivos de mantención. Se la llevaron hasta las inmediaciones de la maestranza, lugar donde ha sido guardada sin hacerle mayores cambios. Imágenes filtradas a este medio denotan un deterioro importante y que recuperarla traería mucho trabajo. Es acá donde agarra protagonismo don Alfonso rojas, presidente de la comunidad «Hijos de la Covico». Nacido y criado en el sector, impulsa con fuerza la vuelta del tren. Ha golpeado puertas durante años, convirtiéndose en el «caballito de batalla» del organismo que representa a un centenar de vecinos porteños. Hizo que el ex alcalde Marcelo Pereira formara una comisión especial para ver el tema.
Viajaron a Santiago, hasta las oficinas de Ferronor, junto al concejal Guido Hernández, para apurar el añorado regreso, sin embargo, reconoce que hubo trabas desde el comienzo. «Hubo un momento en que debía ir recurrentemente a Santiago, ahí iba yo a catetear a las oficinas de la empresa. Lo cierto es que no estaban convencidos, me decían que ya lo verían, que íbamos a hacer una reunión en Coquimbo, pero nunca se concretó nada. Luego vinieron el estallido social y la pandemia y eso se estancó», dice el dirigente. Según cuenta don Alfonso, la petición tuvo cabida recién con el arribo de Alí Manoucheri al mando de la comuna.
Hace referencia a que tras presentarle un proyecto para traer de vuelta la maquinaria, el edil los instó a armar un proyecto «bueno», confiesa el presidente de los hijos de la Covico, pues el que llevaban en carpeta no daba el ancho. El diseño, a cargo del profesional Jorge Gómez, tiene un 90% de avance.