“Su pérdida me deja un dolor inconmensurable”, confiesa hijo cuyo padre iba en el avión Hércules
Presento una querella criminal por cuasidelito de homicidio, aunque sabe que la partida de Miguel Angel Balladares, “no puede ser reparada con nada”. Uertemente afectado F dolido aún por la pérdida irreparable de su padre en el fatal accidente del avión C-130 Hércules de la Fuerza Aérea de Chile, el suboficial Miguel Angel Balladares Saavedra, su hijo, Matías Balladares Muñoz, interpuso una querella criminal en contra de “todos quienes resulten responsables en calidad de autores, cómplices o encubridores”, por hechos que a su juicio son constitutivos de un “cuasidelito de homicidio”. El Juzgado de Garantía de Punta Arenas acogió la presentación a trámite y remitió al fiscal que investiga este accidente, Eugenio Campos Lucero, acción judicial que se suma a otras del mismo tenor.
En esta, el hijo da cuenta de que su padre, suboficial activo de la Fach, formaba parte de los 38 pasajeros que encontraron la muerte en ese fatídico viaje del 9 de diciembre, cuando la aeronave volaba desde Punta Arenas a la base antártica » “Elobjetivo del viaje de mi padre sería el de relevar a otro funcionario de la misma Fach, durante el período de un mes en la base Presidente Eduardo Frei, específicamente labores en las instalaciones de combustible de aquella base” Matías Balladares Muñoz Presidente Eduardo Frei Montalva.
En la querella, patrocinada por el abogado Omar Carrasco, menciona que “dentro de los escasos restos que se han podido recobrar del avión siniestrado, se pudo obtener suficiente material biológico para que el Servicio Médico Legal pudiese establecer científi Camente que parte de estos restos biológicos correspondían a los de mi padre”. El certificado de defunción emitido por el Servicio de Registro Civil e Identificación señala que la muerte fue “politraumatismo/accidente aéreo”. “El objetivo del viaje de mi padre sería el de relevar a otro funcionario de la misMa Fach, durante el período de un mes en la base Presidente Eduardo Frei, específicamente labores en las instalaciones de combustible de aquella base.
Luego de aquella misión comenzaría a preparar su expediente para el ascenso al grado de suboficial mayor, para posteriormente pasar a retiro, ya que se encontraba pronto a cumplir los 30 años de servicio”. En la acción penal el hijo da cuenta de la buena relación que mantenía con su padre, señalando que “al ser su único hijo éramos muy cercanos y amigos.
Su pérdida me deja un dolor inconmensurable, siendo una pérdida que no puede ser Teparada con nada”. Como antecedentes técNicos de la aeronave siniestrada, menciona que tenía una antigúedad de 40 años de servicio, y que tres años Antes de ser adquirido por Chile la milicia estadounidense lo había dado de baja. El querellante exige que Se determine fehacientemente las responsabilidades penales de todos los involucrados. /LPA