COMENTARIOS
Igualdad de género, un pilar para la democracia
Avanzar en la eliminación de todo tipo de discriminaciones arbitrarias hacia las mujeres, constituye un mínimo civilizatorio para nuestra sociedad. Pero, aún nos falta mucho.
Una de las preguntas que deberíamos hacernos, entre otras, es cómo enfrentamos la situación de fragilidad múltiple que viven las mujeres para tener un acceso digno y de calidad en educación, salud, trabajo, seguridad social, vivienda, economía, entre otras áreas. Avanzar rápida y profundamente en estos campos significa fortalecer nuestra democracia. La democracia no se aprende sólo al interior de las aulas universitarias o en clases de educación cívica; es, por sobre todas las cosas, una experiencia vital, activay participativa. Tenemos que empaparnos de democracia todos los días, en nuestras interacciones cotidianas, en nuestras oficinas y centros de trabajo, en los lugares públicos, al interior de las familias. Necesitamos democracia en el país y en la casa, como rezaba la histórica consigna del movimiento feminista que enfrentó a la dictadura en los años 80. Esto implica necesariamente el reconocimiento de los derechos del 51% de nuestra población, que está constituido por mujeres. Requiere también profundizar en los procesos de empoderamiento de sus talentos culturales, políticos y económicos. En estos días, a Su Vez, se conmemoran tres años desde el inicio de la pandemia de Covid 19 en Chile.
No está de más recordar que quienes estuvieron en la primera línea de los servicios de salud y quienes educaron en difíciles condiciones a los niños, niñas y adolescentes de nuestro país fueron en su gran mayoría mujeres.
Como vemos, la igualdad de género no es solo un derecho humano, sino uno de los pilares de una democracia próspera y sostenible, un cimiento de una sociedad más amable y acogedora, la base de un país con mayor crecimiento y desarrollo económico, social y cultural, el cual entrega la oportunidad para que se desenvuelvan en su máximo su potencial las capacidades de todas y todos los ciudadanos y ciudadanas de esta larga y angosta faja de tierra.
6 La democracia no se aprende sólo al interior de las aulas universitarias o en clases de educación cívica”. José Albuccó Académico de la Universidad Católica Silva Henríquez