FElevando la discusión: los debates que marcaron la semana
Efectos secundarios Afines delos 90 se estrenó en Reino Unido una serie que se llamaba Bernardo y sureloj-la dieron por acá algunos años después-. Y si bien era un programa infantil, el eje dela historia resuena en algo a lo vivido por estos días. La magia de Bernardo era que tenía un reloj que podía detener el tiempo.. , al menos por unos minutos, lo suficiente para corregir lo que había salido mal. Y Bernardo sabía usarlo bien, era un altruista. Por acá sucedió lo mismo en las últimas semanas... pero a la inversa. De pronto retrocedimos no unos minutos, sino 50 años y salimos de la conmemoración del11 deseptiembre con los ánimos más crispados y la relación entre gobierno y la oposición quebrada. Esta vez no fue Bernardo, sino otros los que usaron el reloj, y de arreglar lo que salió mal, nada. Cuesta salir de nuestro "día de la marmota", como escribe en su columna Gonzalo Cordero.
Al igual que el personaje de Bill Murray en esa ya clásica película, "aveces, alas sociedades les pasa lomismo", apunta, y "se detienen en un momento que son incapaces de superar". Seconvierte ese día "en una maldición". "Sin esperanzas" ni tampoco "desafíos nuevos", escribe, "el día de la marmota es otra forma de morir". Nada de crear un espacio común como se hizo en Europa a 45 años del fin dela Segunda Guerra Mundial con la firma del acuerdo de Schengen.
No, "50 años después del 11 de septiembre", dice Cordero, aún "no somos capaces de convertir nuestro país (... ) en un "espacio Schengen', en el que podamos circular libremente con nuestras ideas". Es esa "repetición" de la que escribía Max Colodro el domingo pasado, o "la ironía y la paradoja de la generación hoy en el poder", una que tras el fracaso de su proyecto refundacional -con el rechazo ala propuesta de la Convención"se quedó sin presente ni futuro" y se vio "obligada a refugiarse en un mítico pasado". Pero tras este juego de alquimia política, del que escribía Ascanio Cavallo hace algunas semanas, lo que terminó saliendo fue un país "más dividido que ayer" y "donde desapareció para siempre el Chile de los últimos 30 años" -ese delos consensos y de los acuerdos"y en su lugar hay ahora uno más parecidoal de aquel 11 deseptiembre" --el del 73 "donde los mínimos comunes son cada vez más difíciles". El problema de todo ello, a la luz de lo que plantea Ascanio Cavallo, es que si uno les cree a las encuestas, "el gobierno ha logrado todo loque no quería con la conmemoración de los 50 años del Golpe: indiferencia, enojo, polarización, culpabilización (¡ en contra del Presidente Allende ni más ni menos! )" -ahí está el sondeo donde casi un 40% lo responsabiliza del Golpe. Pero "sobre lo responsabiliza del Golpe. Pero "sobre lo responsabiliza del Golpe.
Pero "sobre Elevando la discusión: los debates que marcaron la semana Por Juan Paulo Iglesias Je Je todo hastío", apunta, "porque no hay nada que hastíe más que recordar el odio". Y, para Cavallo, "el 11 es el día de una desgracia", y "el Golpe es una parte de ella, acaso la principal", perono la única, "la otra, la más profunda, es el quiebre dela convivencia civil". Poreso, "desde ese punto de vista el 11es puro dolor y no hay ninguno desus protagonistas que no lo recuerde de esa manera". La guerra de la historia "Las guerras por la historia tienen una gran víctima, el pasado", titulaba esta semana Stephen Bush una columna en el Financial Times.
Y si bien el título parece rimar con nuestro debate local, el asunto no era Chile, sinoelusodelantiguo nombre de Bharat por parte del gobierno de Narendra Modi para referirse a India olosintentos del gobernador Ron DeSantis para modificarla historia del tráfico de esclavos en los currículos de los colegios de Florida. Sólo un ejemplo de que al final las discusiones sobreel pasado no son una exclusividad local. Y como escribe Bush, el trabajo de los historiadores "no consiste en clasificar las acciones pasadas de las personas o un país en buenas o malas", aunque algunos así lo quieran.
Y si de debates históricos se trata, algunos apuntaron a los aprendizajes -o ala falta de ellos que mostraron las discusiones sobre los 50 años. "La derecha", siones sobre los 50 años. "La derecha", siones sobre los 50 años. "La derecha", siones sobre los 50 años. "La derecha", siones sobre los 50 años. "La derecha", siones sobre los 50 años. "La derecha", siones sobre los 50 años. "La derecha", apuntó Carlos Peña en una entrevista de Daniel Hopenhayn, "se mostró como es, aferrada a sus traumas de la UPeincapaz de desprenderse de ladictadura". Ese sectorno ha logrado, según él, "emitirun juicio de condena moral sobre el Golpe de Estado". Porque juicio debe haber, apunta. "Si bien todo acontecimiento humano merece un juicio moral neutro sobre sus causas", sostiene Peña, otracosa. es la pregunta moral que hay que hacerse sobre si es correcto que algo así haya ocurrido, agrega, porque "si suprimimos ese juicio, suprimimos la política". ¿Una diferencia sutil?... Demasiado, ala luz de lo que plantea Pablo Ortúzar en una respuesta al propio Peña.
Hay una "excesiva moralización del debate respecto del Golpe de Estado de 1973", dice y en eso "hasta el rector Peña se ve arrastrado". Maquiavelo decía que la moral no tiene nada que hacer en política, pero aquí para algunos, el asunto se cruza.
Según Ortúzar, tanto así, que "hasta el rector, que siempre ha sido un enemigo de la superstición, se deja llevar a tal punto frente al asunto de 1973 quetermina cediendo ala lógica del ritualismo arcaico". Y no sólo eso, "nos convoca a un "nunca más' tipo danza de la lluvia o sacrificio azteca". En estos tiempos, todo loque uno diga puedeser usado en su contra, como ese mantra que se repite en las series policiales.
Pero este es también un momento para reflexionar inspirados en los que han reflexionado otros, como hace Yanira Zúñiga al recordar a Hannah Arendt y su "banalidad del mal". Porque para ella, algo hay de eso en quienes hoy reconstruyen "nuestra historia, presentándotruyen "nuestra historia, presentándotruyen "nuestra historia, presentándoNEWSLETTER DE OPINIÓN NEWSLETTER DE OPINIÓN NEWSLETTER DE OPINIÓN NEWSLETTER DE OPINIÓN NEWSLETTER DE OPINIÓN Suscríbase al newsletter de Opinión, Elevando la discusión, los debates que marcaron la semana, para conocer los temas que fijaron agenda y las columNas de la semana. latercera. com Nas de la semana. latercera. com la como una zona elástica de grises" y "suspenden su juicio crítico". O, como apunta Joaquín Trujillo, al recordar a Giambattista Vico y su tesis sobre los tiempos cíclicos.
Pasamos de "la era de los dioses" a la "de los héroes" y ala "de los seres humanos", y es en esta última "donde suele irse a pique el desarrollo logrado". Todo se repite una y otra vez. La pregunta es ¿ cuáles serán en Chile nuestraseras y vanidades? Y la sospecha, según él, es que estamos en la última. De vuelta a la Constitución Pero como --pese al reloj de Bernardoel tiempo no se detiene, los otros asuntos permanecen. Es como el dinosaurio de Monterroso: pasaron los 50 años del 11 y los problemas siguen ahí. Y problemas no faltan. El primero, como dice Paula Escobar, es que estamos en "una parálisis muy preocupante", con "un sistema político incapaz de sacar adelante" las cosas.
Y eso es lo que más "fragiliza a las democracias". Es un abono, apunta, "al que "se vayan todos'". Por eso, la urgencia hoy de "los liderazgos responsables es sacarnos de este pantano". Hay que buscar acuerdos.
La historia enseña, como apunta Escobar, que "Chile ya lo hizo y lo puede hacer de nuevo". Se necesitan acuerdos "en materias de seguridad y combate al crimen, en materia de pensiones, de listas de espera de salud y de reactivación y recuperación educativa", dice Escobar. Pero más que eso, se necesita también con la nueva Constitución. Y ahíelcamino no se ve fácil, como agrega Juan Ignacio Brito.
Para él, las perspectivas deese "acuerdo" no sonesperanzadoras, porque el desinterés sobre un proceso que ha perdido la atención de la sociedad provoca que el debate sobre la nueva Constitución se centre en titulares y percepciones". Y para cuando la redacción definitiva sea pública "es probable que no haya tiempo para cambiar actitudes". Sea así o no, para Carlos Ominami el hecho es que el panorama actual es una "alerta a la democracia". Una democracia que, como agrega Sylvia Eyzaguirre, no atraviesa su mejor momento y no sólo en Chile, sino en el mundo. Ahí está el Democracy Report 2023 que revela que el 72% de la población vive en autocracias. Por eso, el desafío, dice, es protegerla.
Y para ello, hay que "cuidar el lenguaje", "anteponer el diálogo y la razón por sobre la violencia", "asegurarnos de queel Estado haga la pega" y "revisar la historia"-para aprender de ella-. Es lo que tenemos. Como decía Churchill, la democracia "es el peor sistema de gobierno, con la excepción de todos los demás". Por eso, el reloj de Bernardo hay que usarlo con cuidado. Bernardo hay que usarlo con cuidado. FElevando la discusión: los debates que marcaron la semana.