Autor: Alejandro Reid
Columnas de Opinión: La revolución recién comienza
Columnas de Opinión: La revolución recién comienza Oo Columna E since stamos entrando en ciando el inicio de una transformación profunda que impactará fuertemente alas futuras generaciones. La revolución dela inteligenciaartificial, 0 cuarta revolución industrial como muchos le dicen, no es un sueño lejano ni está sacado de una película de ciencia ficción. Está ocurriendo ahora, en Chile, a nuestro alrededor. Desde cómo buscamos información, solucionamos problemas prácticos o interactuamos con nuestros dispositivos, lalA está transformando cada aspecto de nuestras vidas. Lo que hemosvisto hasta ahoraes solola punta del iceberg. La IA está cambiando industrias a un ritmo sin precedos, se abren posibilidades que apenas imaginamos. Autos autónomos, ciudadesinteligentes y medicina personalizada son soloel comienzo de un cambio mássustancial. Pero la revolución de la IA traedesafiosimportantes. Hay preocupaciones sobre el trabajo, la privacidad y el uso ético de esta tecnología. A medida que las máquinas avanzan, debemos asegurar que su desarrollo beneficie atodos. Pores10 es fundamental invertir en educación, actualizar regulaciones y fomentar discusiones abiertassobre el rol dela IA en lasociedad. Las implicancias económicas son profundas. Algunos trabajos desaparecerán, pero surgirán otros nuevos, enáreas dentes. En salud, los algoritmos ayudan a los médicos a diagnosticar enfermedades de forma mástemprana y precisa: la comparación de imágenes a la piel puede detectar cáncer en cuestión de minutos. En finanzas, lalA. es capaz de detectar fraudes y predecir tendencias del mercado de manera simple y eficiente. En educa ción, las plataformas adaptativas personalizan el aprendizaje, adaptando los ritmos de enseñanza acada alumno. Incluso en áreas creativas, la IA es capaz de componer música, generar arte y escribir historias, superando límites que nunca creímos posibles. El verdadero potencial de la JA está en su capacidad de aprender, mejorar y analizar grandes cantidades de datos para luego reconocer patrones complejos y tomar decisiones con poca intervención humana. A medida que estos sistemas se vuelven más sofisticadonde los humanos somos irreemplazables. La clave es preparar alafuerza laboral para esta transición. Las empresas deben invertir, los gobiernos mejorarla educación y las personas adoptar el aprendizaje continuo, para ir adquiriendo nuevos conocimientos y empujar esta tecnología hacia nuevas fronteras. Es fundamental recordar que la IA es una herramienta poderosa, pero sigue siendo solo una herramienta. Su impacto depende mucho de cómola usemos, de cómo logremos llevarla a resultados que aporten, quesitúen ala humanidad en el centro, como decía nuestro nuevo Papa León hace algunos días.
Si enfrentamos esta revolución con curiosidad, responsabilidad y compromiso con el bien común, la [A puede ayudarnos a resolver grandes desafios, e impulsarnos en un futuro prometedor. *Centro de Estudios de la Comunicación (ECU) Universidad delos Andes “Es fundamental recordar que la IA es una herramienta poderosa, pero sigue siendo solo una herramienta. Su impacto depende mucho de cómo la usemos, de cómo logremos llevarla a resultados que aporten”..