Autor: Por Nicolle Peña
Lo que se juega el Presidente Boric
Los tropiezos que el gobierno de Boric tuvo durante el último mes en el ámbito internacional -como el ocurrido con el embajador de Israel o el hasta ahora infructuoso nombramiento de Sebastián Depolo en Brasilpodrían afectar la votación. Así lo advierte Robert Funk, académico de la U.
De Chile: “Países como Estados Unidos toman nota de incidentes como el del embajador de Israel, porque son señales del ladó en que Chile se ubica con las democracias occidentales o con regímenes que prefieren gestos dramáticos.
Efectivamente, lo que comparten los ejemplos de Israel y Brasil es la tendencia a subyugar normas diplomáticas a las preferencias personales del Presidente”. La votación de la próxima semana, añade Funk, es clave para Boric dada su aspiración de “representar una nueva izquierda, moderna, basada en temas como el cambio climático, feminismo y derechos humanos”. Para ello, tener presencia en el Consejo de DD.HH.
Es una herramienta fundamental, Pablo Cabrera, exdirector de la Academia Diplomática y consejero del Centro de Estudios Internacionales UC, comparte que “esta votación ha adquirido una dimensión especial dada la línea que adoptó el Presidente desde el inicio de su gobierno”, al señalar que los derechos humanos estarían al centro de su accionar. La presión por un buen desempeño resulta aún mayor -dicesi se considera que la ministra de Relaciones Exteriores, Antonia Urrejola, presidió la Comisión Interamericana de Derechos Humanos. “Es un eje central de la política exterior chilena, que en el caso de este gobierno fue confirmada con mucha claridad en el primer discurso que hace el Presidente ante las Naciones Unidas. No solo la BP” promoción de derechos humanos, sino que condenó la violación a los DD.HH. Y lo focalizó incluso en algunos países, sabiendo que venía la votación”, recalca Cabrera. En términos internacionales, agrega, Chile se juega la impronta de promoción de la democracia y apego a los DD.HH. Que ha mantenido desde el retorno a la democracia, además de la posibilidad de ejercer una coordinación en la materia. No ser electos, sostiene Cabrera, ameritaría una reflexión profunda sobre el desempeño de la Cancillería y el posicionamiento de Chile en la agenda mundial. De todos modos, prevé que Brasil votará por Chile y que el impasse con el embajador de Israel no mermaría el apoyo hacia Chile, ya que temas como los DD.HH. Responden a una agenda que trasciende a lo coyuntural. Eso sí, admite que siempre hay negociaciones entre los países que podrían terminar impactando. “Supongo que eso es parte de las evaluaciones que hace Cancillería”, comenta.