Autor: CATALINA MUÑOZ-KAPPES
Morosidad en créditos comerciales sigue al alza y se ubica por sobre niveles prepandemia
El indicador de deuda en préstamos de consumo también continúa en un tramo elevado, pese a que disminuyó en marzo, lo que sería a causa de una menor demanda por parte de los hogares. Un máximo en una década registraron los impagos de tres cuotas o más de créditos comerciales en marzo, en un reflejo del complejo momento económico del país.
Según informó ayer la Comisión para el Mercado Financiero (CMP), el indicador de morosidad de 90 días o más alcanzó 2,33% de la cartera comercial del sistema bancario, el más alto desde el inicio de la medi ción en marzo de 2014. Los impagos en los préstamos de consumo, en tanto, retrocedieron levemente desde el máximo que alcanzaron en febrero, aunque aún se mantienen altos. En detalle, el indicador de morosidad para los créditos de consumo alcanzó 2,94%, por debajo del 3,04% registrado el mes anterior. Desde la Asociación de Bancos (Abif) resaltaron las cifras de morosidad de marzo. “Más allá delas fluctuaciones de corto plazo, la morosidad de las carteras comercial y de consumo ya supera los niveles prepandemia”, señalaron.
Por otro lado, los impagos en los créditos hipotecarios se mantienen por debajo de lo observado antes dela crisissanitaria, aunque también han ido al alza y se están acercando a ese nivel (Ver infografía). Para Héctor Osorio, académico de la Escuela de Negocios UAI, la moderación en la morosidad de loscréditos de consumo en marzo se da “porque las personas están dejando de consumir”. En contraste con esta situación, afirma que, enel caso de las empresas y los negocios, no existe la posibilidad de ajustarse como precaución. “Las empresas lo están pasando mal, porque la economía está floja, sobre todo en las expectativas. Yo creo que la autoridad política no logra generar niveles de confianza que serían útiles para estas circunstancias que estamos viviendo”, afirma.
En la misma línea, Agustín Herrera, gerente de Consultoría de PwC Chile, explica el alza en la morosidad como producto del “contexto económico desafiante”, En especial, resalta las altas tasas de desocupación, que cambian el contexto de cuando se tomaron los créditos. Para Alejandro Weber, decade la Facultad de Economía y Negocios USS, "la morosidad es un buen termómetro del funcionamiento de nuestra economía.
Cuando nuestro país ha crecido, y con ello el empleo, la moro: dad ha caído”. En contraste, señala que “hoy estamos en un ciclo negativo, con caída del PIB per cápita en 2023 y un desempleo elevado que se ha sostenido los últimos dos años, lo que ha reducido la liquidez y capacidad de pago de los chilenos” Baja actividad Para la Abif, el crédito bancario continúa mostrando un bajo nivel de actividad, especialmente en el segmento de préstamos comerciales. Según informó la CMF, al cierre del primer trimestre, los préstamos aumentaron 2,2% en un año.
Los créditos comerciales vieron un alza de 16%, mientras que los hipotecarios subieron en 3,6%. En contraste, los préstamos de consumo disminuyeron en 11%. Según la Abif, el flujo de nuevos créditos comerciales ha si guido perdiendo fuerza. Al ps mertrimestre delaño, seregistró una caída de 8,2% en términos reales, lo que equivale a un promedio mensual de US$7.371millones. En particular, sigue débil la entrega de préstamos al segmento de mipymes, que en enero se ubicó un 46% por debajo del promedio prepandemia. “El bajo dinamismo del crédito comercial se explica sobre todo por el lado de la demanda. En efecto, la Encuesta de Crédito Bancario del primer trimestre de 2024 revela que una proporción. Creciente de bancos reporta un debilitamiento de la demanda crediticia comparado con el trimestre previo, tanto en el segmento de pymes como en el de grandes empresas. En tanto, los estándares de aprobación no registran cambios en el margen, tras varios trimestres en terreno restrictivo”, explicaron. De manera similar a los créditos comerciales, el flujo de nuevos préstamos para la vivi continúa debilitándose. Trimestre móvil de enero a marzo el monto total otorgado alcanzó un promedio mensual de US$ 660 millones, un 11% menos que hace seis meses”, señalaron desde la Abif. Para el gremio financiero, la desaceleración de la actividad crediticia se refleja también en la menor demanda que perciben los bancos. De acuerdo con la Encuesta de Crédito Bancario, un 45% de las entidades reporta una demanda más débil respecto del trimestre anterior, mientras que ninguna entidad indica lo contrario. Esta situación se da en un contexto de altas tasas hipotecarias que aún no van a la baja. Según informó el Banco Central ayer, en la tercera semana de abril, la tasa de interés llegó a un 4,89%, igual al promedio mensual de la tasa en marzo. Expertos ven aumento en impagos de tres cuotas o más como reflejo de la economía:
