Autor: Gonzalo Islas Decano Facultad de Ingeniería y Negocios, U. De Las Américas
¿Réquiem para un sueño?
La austria uene una considerable no sólo para el progreso material y económico del país, sino también para el mejoramiento social de la población”. Así comenzaba el “Plan de Desarrollo Industrial” elaborado en 1939 por la recién creada Corfo, y que sentó las bases de la industrialización basada en sustitución de importaciones, fundamental en la estrategia de desarrollo de la economía chilena por más de 30 años. Aunque a veces se abusa del término, la Compañía Siderúrgica Huachipato es, sin duda, una empresa emblemática.
La producción de acero estaba en el corazón del plan de Corfo, y junto a otras empresas creadas por Estado, como Endesa, Enap y lansa, transformaron nuestra economía y tuvieron un impacto indudable en las comunidades donde se instalaron. Por ello su cierre impacta, tal como ocurrió hace algunos años con el cese de la planta de lansa en Linares. Las políticas de apertura comercial implementadas a partir de 1974 significaron el término del sueño de la sustitución de importaciones. Por otra parte, las privatizaciones, iniciadas en dictadura y continuadas en democracia, llevaron a un rol menor del Estado empresario. Las empresas privatizadas siguieron distintos en algunos casos con gran éxito, como el caso de CAP, matriz de Huachipato, cuyo precio de la acción aumentó más de 5% el día del anuncio del cierre.
Los costos para los trabajadores y para toda la región son enormes, y, de materializarse el cierre, se requerirá de un diseño inteligente para facilitar la reconversión de sus trabajadores y los servicios anexos, más aún en una zona que tiene vivo el recuerdo del caso de las minas de carbón.
Sin embargo, intentar sostener las operaciones de Huachipato por medio de sobretasas arancelarias no justificadas sería un gran error, ya que termina generando costos por la vía de Mayores precios que afectan a todo el país.
Es importante mantener el perfil técnico de la Comisión de Distorsiones, un ente poco conocido pero clave en una economía inserta al mundo como la nuestra, La sustitución de importaciones tuvo muchas luces, pero también sombras. Las ventajas competitivas de nuestra economía no están en la industria manufacturera. Sostener artificialmente a firmas ineficientes o sectores poco competitivos no es un buen uso de los recursos públicos.