Autor: JOAQUÍN ABUD

Extraña aparición de Tortuga carey en playa de Tailanda: anidó 80 huevos
Animal se encuentra en peligro crítico de extinción por la caza ilegal, contaminación y ocupación de su hábitat “Su coraza es una joya en si La comercialización de su caparazón fue declarado ilegal en 1977. Japón es el principal destino de este material. Yas de Tailandia, por la paralización del turismo, se convirtió en una nueva oportunidad para las tortugas carey de anidar en estos lugares. Resulta que en la isla Koh Samui, del país asiático, una hembra de 30 años de esta especie en peligro crítico de extinción fue descubierta depositando cerca de 80 huevos en la costa. La tortuga carey es una especie famosa en la caza ilegal debido al alto valor comercial de su caparazón, con el que se confeccionan joyas, marcos de anteojos y peines, entre otros productos. “Su coraza es una joya en sí misma.
Es muy lisa y tiene formas y dibujos muy atractivos, por lo que mucha gente las colecciona”, explica el biólogo marino y decano de la Facultad de Ciencias del Mar y Recursos Naturales de la Universidad de Valparaíso, Ricardo Bravo La isla de Koh Samui, donde ocurrió el hecho, tiene una alta presencia de turismo.
De hecho, según Reuters, esta actividad representa el 12% de la economía del país y solo en esa isla llegaron 40.000 de turistas en 2019. "La caza ilegal no es la única actividad que ha | a baja presencia de personas en las plaContribuido en el camino a la extinción de esta especie, sino que la ocupación de sus espacios de reproducción, como las playas, también es un factor fatal para las tortugas”, sentencia Bravo.
Estado de trance Una vez que la tortuga comenzó a cavar la arena de la playa para hacer su nido, un equipo de veterinarios presentes en la la se acercó a ella para examinar su estado de salud e instalarle un chip de rastreo.
Sobre este último paso, el biólogo marino de la Universidad de Concepción, Raúl Cortés, comenta que es un paso clave, sobre todo para estas especies que corren tanto peligro, ya que se pueden conocer mejor sus tendenMisma. Es muy lisa y tiene formas y dibujos muy atractivos”, explica Ricardo Bravo, Biólogo marino.
Cias migratorias para controlar su población”. Carol Medrano, investigadora del Centro de Ecología Aplicada y Sustentabilidad (Capes) de la Universidad Católica y especialista en tortugas, comenta que el ritual de anidación de este animal es muy particular: “Las tortugas elijen muy cuidadosamente las playas donde van a poner sus huevos y, una vez que comienzan a cavar en la arena, entran en una especie de trance en el que no sienten si es que están siendo manipuladas ni se percatan de nada en su entorno, lo que hace posible medirlas, examinarlas e instalarles un chip sin que les moleste”. Cambio momentáneo A pesar de que las playas son ambientes claves para la reproducción de las tortugas, son lugares en los que ellas se queden, ya que nacen ahí y luego pasan la mayor parte De sus vidas en el mar”, explica Medrano.
Sin embargo, la investigadora señala que “las tortugas siempre tienden a hacer sus nidos en las mismas playas en que nacieron, por lo que el sector podría ser clave para la preservación de la especie en el futuro”. Por su parte, Ricardo Bravo señala que, a pesar de este fenómeno, “es muy probable que apenas vuelva a activarse el turismo la tortuga de carey se mantenga alejada de la isla”, agregando que, “en ese caso el rastreo que se le haga a este ejemplar puede ser muy valioso para saber como se comportará cuando esto ocurra”. Caza ilegal, joyas y peines La presencia de esta especie de tortuga se extiende por los océanos Pacífico, Atlántico e Índico y su caza fue declarada ilegal en 1977.
Un estudio publicado en abril de 2019 por la revista "Science Advance” (ver aquí: identifica a Japón como el principal destino de este caparazón, con un 76% de las importaciones totales, comerciado desde Malasia, Indonesia y Tailandia, principalmente.
Según especifica el documento, uno de los artículos más famosos hechos con este material son los peines de carey, que datan desde hace más de 300 años en Japón, donde se usa mucho en los vestidos de boda de las mujeres. Sobre esto, Ricardo Bravo dice que "por suerte esta especie se encuentra en varios lugares del mundo, lo que permite que hayan varias zonas de reserva nacional en distintos países para su cuidado. De otra manera, su destino sería mucho peor”.