Autor: CAMILA FIGUEROA
Pinzas con sensores de presión avisan cuándo la palta está lista para comerla
Estudiantes de primer año participaron en la "Feria Desafíos de la Ingeniería UC”, donde presentaron 120 proyectos. Acá, una selección.
Refrimanta Con esta manta de frío los feriantes pueden prolongar la duración de las frutas, gracias a que en su interior contiene un gel compuesto de ácido aglínico, poliacrilamida y carboximetilcelulosa: juntos actúan como una esponja de calor endotérmica; es decir, absorbe el calor y enfría. “Fuimos a ferias a probar el producto, específicamente en frutillas que estaban a una temperatura de 24 grados Celsius. Determinamos que las frutas comenzaban a pudrirse a las 30 horas sin la manta, pero con la manta ese tiempo aumentó a 80 horas”, afirma Sebastián Burgos, integrante del grupo conformado por siete estudiantes. Innovaciones ingenieriles para no desperdiciar alimentos Huevolsa Vicente Carrillo cuenta que, en promedio, de cada 30 huevos, 3,4 llegan rotos a su destino. Esta pérdida, calcula, se traduce en que una familia de tres integrantes cada uno consume 235 huevos anuales que cuestan $170en tres años se pierden casi $70.000 en huevos quebrados. “Muchos huevos se quiebran debido al trasporte en bolsas sin protección. Por eso creamos esta bolsa rígida, ideada con un tamaño para trasladar la caja de 30 huevos. Es de madera liviana, tiene un sistema de acolchado en su interior y se cierra con un sistema de velcros.
Al probarla vimos que el tiempo promedio en la compra de huevos en la feria disminuyó de 41 segundos a 9 segundos”, afirma el estudiante, acompañado de Nikolás Cabezón, Cristóbal Celle, Cristian Chávez, Javiera Donoso, Constanza Vera, Fernanda Vicente y Matías Yung. Paltómetro Para evitar que las paltas se estropeen de tanto apretarlas, un grupo de estudiantes creó unas pinzas capaces de determinar su nivel de madurez gracias al sensor de presión que evite toquetearlas. “La pinza se conecta a un sistema eléctrico que tiene tres ampolletas. Si se enciende la verde, significa que la palta está lista para el consumo. Si prende la amarilla, le faltan dos o tres días; si se enciende la roja es porque le faltan más de cinco días”, detalla Benjamín González, acompañado de su compañera Constanza Rojas.