Autor: Daniel Rozas
"Más que falta de colaboración, hubo dificultad en encontrar nombres de consenso"
Constanza Schónhaut, constituyente La abogada no cree que el proceso de esta semana haya sido “un espectáculo” y afirma que lo importante son los aprendizajes.
“Tenemos una responsabilidad muy grande y ahora lo que corresponde es volver al trabajo de normas y contenidos”, dice. | martes, tras ocho votaciones, los constituyentes cerraron una maratónica jornada a las 5 de la mañana. Sin humo blanco.
Con críticas desde diversos sectores, incluso entre ellos mismos, la decisión de quiénes tomarían la posta del liderazgo de la Convención se dilató hasta el miércoles, a las 3 de la tarde, cuando después de una novena votación e inesperadamente, María Elisa Quinteros -constituyente por el Distrito 17 y odontóloga de la U. De Talcafue elegida como la nueva presidenta. A las pocas horas se confirmó la vicepresidencia: Gaspar Domínguez, de Independientes No Neutrales. Constanza Schónhaut (32), abogada de la U.
De Chile y militante de Convergencia Social dice que frente a la elección, como Frente Amplio, coalición que fundó, apostaron “a que la presidencia estuviera en otra fuerza política y por ello apoyamos la candidatura de Movimientos Sociales”. -La elección de la presidencia de la Convención mostró descoordinación y fragmentación de la izquierda. Reinó el desorden. Hubo improvisación. Pareciera que cada cual estaba preocupado del colectivo al que pertenece.
A tu juicio: ¿ por qué se generó el caos? -Ponerse de acuerdo entre fuerzas diversas siempre tiene complejidad y creo que más que falta de colaboración, hubo dificultad en encontrar los nombres de consenso, lo que terminó extendiendo la votación. -Agustín Squella dijo que dieron un espectáculo deplorable, que no es culpa de Piñera, ni de Boric, ni de los medios. Y que lo ocurrido afecta la Convención y el proceso ¿ Qué opinas? -No comparto que sea un espectáculo y creo que lo relevante son los aprendizajes.
Tenemos una responsabilidad muy grande frente al país y ahora corresponde ahora volver al trabajo de normas y contenidos, donde hemos ido avanzando con gran capacidad de diálogo y acuerdos. -María Elisa Quinteros tendrá que liderar el plebiscito de salida. ¿La ves preparada para esta segunda parte del trabajo de la Convención? -Nuestra presidenta es una constituyente muy capaz, con trabajo territorial, que cuenta con el apoyo mayoritario de las y los constituyentes, y con la disposición de colaboración de gran parte de los colectivos. Estoy segura de que estará a la altura del proceso. -Sobre los líderes salientes, ¿Qué reflexión haces sobre el trabajo de Elisa Loncon y Jaime Bassa? -Pienso que esta primera directiva marcó el proceso constituyente. Primero lograron dar inicio al trabajo de la Convención, a pesar del deficiente compromiso del gobierno con este proceso.
En segundo lugar, ambos ejercieron un liderazgo político hacia adentro y fuera de la Convención que ha sido clave para fortalecer lo colectivo, reforzando el sentido de responsabilidad, cuidando la convivencia y acercando el proceso a la ciudadanía. -En su cita con la presidenta Bachelet, les pidió que respetaran la cultura política y les aconsejó escuchar más a la ciudadanía. ¿Cómo crees que pueden mejorar comunicacionalmente? -El proceso constituyente surgió en el marco de una crisis de confianza profunda en las instituciones. Y, por tanto, es un espacio que no tiene un cheque en blanco por parte de la ciudadanía. Eso nos ha puesto desafíos en legitimar este espacio y el trabajo que se está llevando adelante. Además hemos tenido carencias comunicacionales y eso tiene que ver con dos factores: que construimos una institución desde cero, y que hemos tenido poca colaboración del gobierno en materia de financiamiento e infraestructura. Pero en el último tiempo hemos mejorado esa comunicación y ahora tenemos una secretaria de comunicaciones.
El desafío es simplificar los lenguajes y acelerar el trabajo, porque estamos entrando en la elaboración de normas que tienen que ser comprendidas por toda la ciudadanía y es importante llegar a puerto con el cumpliUna forma de repensar el poder es reflexionar sobre los espacios políticos de manera paritaria.
Y tomar decisiones horizontales”. ¿ Por qué la política debe ser con terno? Nosotros hemos dicho que la política es con llorar, que es con piel de gallina, y no con cuero de chancho porque debiese emocionarnos”. miento del cronograma en el tiempo establecido. De eso depende que la propuesta constitucional pueda ser aprobada en el plebiscito de salida. -La Convención representa a minorías postergadas. Ahora bien: ¿ Qué pasa con el centro político? -Eso se explica desde las propuestas de normas que estamos levantando. Estuvimos exponiendo la norma del derecho a vivir una vida libre de violencia porque los casos de violencia intrafamiliar han aumentado. Durante la pandemia las mujeres hemos retrocedido 10 años en materia laboral. Y vemos femicidios a diario en televisión.
También presentamos la norma de derecho al cuidado, que es algo con lo que las mujeres de todas las generaciones se sienten identificadas ya que ellas realizan la mayor cantidad de tareas en los hogares y en las áreas de cuidados. “La política se hace desde las trayectorias” Constanza cuenta que fue criada en un matriarcado, junto a su abuela, mamá, hermana y primas. Su papá biológico murió cuando tenía un año y nunca lo conoció. Y agrega que, siendo niña, el padre de sus medias hermanas le dio el apellido, pero fue un matrimonio corto con su mamá. “Mucho tiempo me sentí en una familia disfuncional. Siempre era una crisis cuando se celebraba el día del padre, porque no sabía bien a quién hacerle el regalo. Y esas cosas te hacen reflexionar sobre lo cerrada que ha sido nuestra sociedad para identificar otra formas de vida”. Una de sus hermanas, además, tiene una discapacidad cognitiva y trastorno del espectro autista. “En términos educativos fue súper duro.
Ella tiene 20 años y nos costó un montón como me pregunto: ¿ Qué pasa con las personas en situación de discapacidad? ¿ Hay un espacio laboral para que se desarrollen? Ahí te das cuenta que si sumamos todos estos grupos invisibilizados, la situación educacional es aún más desigual”. Desde cuarto básico, Constanza estudió en el colegio San Francisco del Alba, una escuela de integración social de Las Condes, que se creó a raíz de la crisis asiática.
Este recibía a jóvenes de poblaciones y a hijos de gente acomodada que había perdido su trabajo. -¿ Crees que esas brechas sociales despertaron tu interés político? -Yo vivíen Las Condes, en el sector de Colón 9000 grn parte de mi infancia y adolescencia. En el colegio efectivamente había estudiantes de los colegios municipales más tradicionales de la comuna, pero también estudiantes que venían de colegios privados y que no podían pagarlos. Yo recuerdo mucho esas diferencias. Estudiantes que venían de las poblaciones de Colón 9000, y aquellos que vivían en Los Trapenses. Creo que esas desigualdades me marcaron mucho. Y también se veían adentro del colegio, con un proceso de aprendizaje distinto entre quienes venían de colegios privados y los que veníamos de colegios municipales. Antes de estudiar Derecho -carrera por la aún tiene una deuda-, entró a Bachillerato porque quería ser médico. En la primera clase de un ramo, un profesor dijo que partirían con sumatoria. “Y puso un símbolo en la pizarra que yo nunca había visto antes en mi vida. Hubo un sonido general en la sala: esto ya lo vimos. Entonces, el profesor preguntó si ya habíamos visto la materia en el colegio y la mayoría respondió que sí”, dice. Schónhaut se dio cuenta que estaba dos pasos atrás en materia educativa. “Eso me significó hacer el doble de esfuerzo.
Pasé el ramo, pero con una sensación de injusticia porque el colegio donde nos educamos sigue teniendo un impacto a lo largo de toda nuestra vida”. -Supongo que este conjunto de experiencias fue lo que te llevó a ser dirigente estudiantil en 2011. -La decisión de destinar parte de mi tiempo universitario en construir organizaciones políticas por la educación fue debido a la vivencia de la desigualdad estructural que hay en Chile... Mi visión es que la política se hace desde las trayectorias personales y desde las emociones; desde el amor, la rabia, la esperanza. Esos sentimientos son elementos que nunca se han entendido como parte de la política, pero son centrales. Nosotros nos paramos en este espacio público con miedos, contradicciones, deseos; y eso es parte de lo que nos constituye políticamente. “Cuuestionar lo que está preestablecido” Tras conocerse el resultado de las elecciones presidenciales, Constanza celebró con el círculo cercano a Gabriel Boric.
Y junto a su pareja, la mano derecha del presidente electo: Giorgio Jackson. -Hoy se habla de los Boric Lovers, ¿Cómo analizas el fenómeno de Gabriel Boric presidente, qué representa? -Yo creo que es un fenómeno que va más allá de Gabriel. Él hoy día lo encarna, pero encarna también un proceso colectivo que viene gestándose hace tiempo; este relato de la esperanza, de que hacer cambios para vivir mejor es posible en Chile. Es una historia que viene desde el movimiento estudiantil de 2011, después con Beatriz Sánchez, luego con la ola feminista y, el 2021, cuando Gabriel logró articular todas esas distintas luchas sociales. Creo que eso es lo que le permite encarnar hoy este fenómeno de esperanza, de futuro, de cambio.
Pero pienso que el fenómeno no es Gabriel Boric en sí mismo, sino el proyecto que está representando. -Se dice que las mujeres menores de 50 definiero el resultado exitoso. ¿Cuál es tu lectura de ese dato? -Hay una capacidad de convocatoria muy fuerte detrás de la candidatura de Gabriel porque él tiene una base feminista muy fuerte. Y en segundo lugar, creo que como mujeres sentíamos un riesgo latente con José Antonio Kast. Él significaba un retroceso sustantivo en derechos sociales que nos ha costado mucho sacar adelante.
Muchas mujeres, aunque no se identificaban como feministas, se fueron acercando a la candidatura de Gabriel porque sintieron que él defendía sus derechos y que puso en el centro de su programa las demandas de las mujeres. -Volviendo a la Convención, integras la comisión de sistema político. ¿Eres partidaria de un sistema presidencialista atenuado? -Nosotros tomamos la decisión de abordar el debate sin etiquetas. Lo que estamos haciendo es convocar a un debate en torno a objetivos. Por ejemplo, tener gobiernos eficaces que puedan llevar adelante un programa de manera efectiva. O tener una institucionalidad flexible ante crisis sociales, que nos permitan salidas menos traumáticas que las del presidencialismo actual.
Y recuperar una política que esté más centrada en proyectos programáticos y menos en personalismos. -Irina Karamanos dice que hay que repensar los espacios de poder. ¿Estás de acuerdo?¿ Qué entiendes por repensar los espacios de poder? -Estoy de acuerdo y creo que para entender qué es repensar los espacios de poder hay que revisar nuestra historia. Nosotros construimos el Frente Amplio desde una generación que estaba huérfana políticamente. Fuimos construyendo organizaciones en la universidad, cuando éramos 30 personas en un colectivo y avanzamos en la medida que fueron creciendo los movimientos sociales. Decidimos salir del espacio universitario y dimos un salto político, después un paso institucional, y siempre hemos tratado de cuestionar lo que está preestablecido. Es lo que ha hecho que tengamos una sociedad desconfiada de las instituciones. Por lo tanto, una forma de repensar el poder es reflexionar sobre los espacios políticos de manera paritaria. Y tomar decisiones horizontales. O desnaturalizar el hecho de que la pareja de quien es presidente, deba asumir un rol sin importar cuál es su trayectoria profesional o cuál es su decisión de vida.
Eso tiene que ver con el rol que se nos ha puesto a las mujeres a lo largo del tiempo; esta idea de que “detrás de un gran hombre, hay una gran mujer”. -Un cambio cultural en política. -Desde el feminismo hemos planteado eso. Hasta ahora la política ha estado profundamente masculinizada y eso ha hecho que las mujeres hayamos estado marginadas del espacio público y de las decisiones importantes. Hoy queremos repensar esa forma de entender la política.
Nosotros hemos ido corriendo cercos desde 2014, cuando Gabriel asumió como diputado vestido informal, sin terno, que fue un escándalo nacional. ¿Por qué la política debe ser con terno? Nosotros hemos dicho que la política es con llorar, que es con piel de gallina, y no con cuero de chancho porque debiese emocionarnos. Y creo que, de a poco, hemos ido corriendo el cerco de lo que está naturalizado racionalmente en el ejercicio del poder.