Avanzando en el ruta hacia una economía circular
PACKAGING SOSTENIBLE Educir el impacto ambiental de nuestras actividades es hoy una premisa que cada vez cobra mayor relevancia no solo en la sociedad civil —que ha adoptado hábitos como el reciclaje—, sino también en diversos sectores económicos que, poco a poco, han hecho eco de la necesidad generar menos desechos e incorporar en sus procesos productivos materiales con menor huella ambiental. Una de estas industrias en la de envases y embalajes, cuya función es simple, pero clave: lograr que los productos se conserven de manera óptima hasta llegar al consumidor final. Y hoy la tendencia es hacerlo incorporando el ecodiseño, que según la Agencia Federal Alemana de Medio Ambiente significa —comenta Óscar Huerta, PhD.
Y académico Diseño UC— “desarrollo y diseño de productos conscientes del medio ambiente”. "Este término describe una manera sistemática que apunta a incluir aspectos ambientales en el proceso de planificación, desarrollo y diseño del producto en la primera oportunidad posible”, agrega el también académico del Centro Nacional de Excelencia para la Industria de la Madera (Cenamad) UC, según señalan Tischner, Schmincke, Rubik € Prósler, en el libro “How to do Ecodesign”?”. Este concepto, dice, ha cambiado la manera de concebir envases y embalajes, de manera tal que generen un mínimo impacto ambiental alo largo de su ciclo de vida, pues "en términos absolutos diría que actualmente no hay productos con cero impacto”. En efecto, Mariana Soto, gerente general del Centro de Envases y Embalajes de Chile (Cenem) afirma que “toda información que acompañe alguna caracteristica de un envase o embalaje debe necesariamente venir acompañada de datos validados, medidos bajo alguna normativa, con alguna metodología, por ejemplo análisis de ciclo de vida, trabajado con algún método de ecodiseño, etc”. A renglón seguido, Óscar Huerta comenta que el uso de herramientas como el ecodiseño, destinadas a miniContar con packaging que generen menos impacto ambiental es uno de los desafíos del sector de envases y embalajes, y una forma de lograrlo es incorporando elementos de ecodiseño.
Hoy la tendencia es avanzar hacia un sistema que permita aprovechar el alto potencial de valorización que tienen los materiales utilizados en los empaques, evitando así que se conviertan en desechos. mizar el impacto negativo de productos y/o hacerlos regenerativos, es "bueno para la creación de todo tipo de bienes y servicios y no solo envases y embalajes.
En particular, los productos envasados en muchos casos tienen mayor impacto que sus envases, por lo que usar ecodiseño en la creación de nuevos productos sería positivo para el medio ambiente”. Este cambio de mirada ha estado impulsado no solo por la entrada en vigencia de la Ley REP, que tiene precisamente al sector de envases y embalajes como uno de los sectores prioritarios, sino también por una mayor conciencia de todos los estamentos de la sociedad respecto de la necesidad de mitigar los efectos del cambio climático, pasando de un modelo productivo lineal a uno circular.
ESLABÓN La fabricación de empaques sostenibles busca reducir su impacto ambiental y potenciar el reciclaje y reutilización de sus materiales, lo que —en opinión de Alejandra Bernal, senior manager de Innovación Sostenible en Deloitte, es “fundamental para fomentar la economía circular y lograr un sistema de producción más responsable con el medio ambiente” y aparece como “una solución para las empresas que se plantean qué hacer con los sobrantes de su actividad y quieren evitar la opción menos sostenible: tirarlos”. Para aplicar la economia circular a los modelos de productivos, detalla Mariana Soto, es fundamental conocer el impacto ambiental de todos los productos que se fabrican, desde sus materiales hasta su disposición final.
Ello permitirá —expresa— “tomar medidas, trabajar para repensar el producto, cómo minimizar el uso de recursos, etc.”. En este contexto, existe la calculadora Ecopackaging, herramienta diseñada para medir dicho impacto en materia de envases y embalajes y que es gratuita. "El objetivo central de Ecopackaging fue desarrollar un instrumento básico —una calculadora ambiental simplificada— para realizar un análisis del ciclo de vida, y poder medir así el impacto de los envases en el ecosistema, para mejorar la sustentabilidad y competitividad del sector y de la industria de alimentos de exportación”, expresa la ejecutiva del Cenem.
La idea es —afirma— "tener información veraz, válida por la industria y levantada por un equipo de profesionales de la academia y patrocinada por Corfo, Pro Chile, Asexma y el Ministerio del Medio Ambiente”. En este sentido, la ejecutiva de Deloitte precisa que “la iniciativa del ecopackaging responde a las buenas prácticas de economía circular a nivel internacional” y detalla que una de las tendencias en la Norma ISO es avanzar y estandarizar la aplicación de los pilares de la economía circular en organizaciones y modelos de negocio. Para ello existe la NCh-1SO14006:2020, de Sistemas de Gestión Ambiental, que entrega directrices para incorporar el ecodiseño. A su vez, los requisitos del ecodiseño se complementan con otras normas tales como la ISO 9001; Gestión de Calidad, ISO 14001; Gestión Ambiental, ISO 14044; Análisis de Ciclo de Vida.
En esta línea, Chile también cuenta con la Ley 21.368 que regula la entrega de plásticos de un solo uso y las botellas plásticas, que busca disminuir la generación de residuos, al limitar la entrega de productos de un solo uso en establecimientos de expendio de alimentos. Asimismo fomenta la reutilización y la certificación de los plásticos de un solo uso y la regulación de las botellas plásticas desechables.
IMPACTO Además de disminuir el impacto ambiental, la incorporación de elementos de ecodiseño puede —detalla Óscar Huerta—“ahorrar costos al productor”. Complementa Alejandra Bernal, al señalar que, por ejemplo, las empresas pueden reducir costos de almacenaje cuando se reciclan o reutilizan los recursos ya usados en la producción de sus bienes. "Es muy importante que hoy las empresas que quieran implementar esta iniciativa no lo vean como una acción aislada, sino que entiendan que este tipo de medidas forman parte de su inserción en la sostenibilidad corporativa y dar pie a una futura estrategia de sostenibilidad. Específicamente, para el packaging sostenible se requiere mucha innovación, lo que también es un pilar fundamental en la implementación de la sostenibilidad corporativa. Por ende, es una valiosa inversión”, asevera la ejecutiva de Deloitte.
Agrega que "tiene mucho más valor si es que, además de fabricarlos, se realiza un esfuerzo en disminuir el consumo eléctrico en el proceso de manufacturación, y en reducir la contaminación en el transporte de estos packaging.
Además, enseñarles a los consumidores cómo reciclarlos para promover la educación en estos temas”. Respecto del impacto de los envases y embalajes con menor impacto ambiental tienen en la decisión de compra, Óscar Huerta afirma que "la experiencia internacional ha mostrado que para los consumidores el precio de un producto es más determinante que sus aspectos ambientales”. El punto es ratificado por Mariana Soto, quien añade que "las nuevas generaciones están más conscientes y tienen (o piden más información ) mayor sensibilidad sobre sus habitos de consumo, de manera que estén alineados con su estilo de vida”.