Autor: IGNACIO SÁNCHEZ D.
Humanitas, un proyecto visionario e imprescindible
Su nombre definió el programa que debía seguir la publicación: “el de ofrecer una contribución modesta, pero decidida, a la inmensa tarea de recuperar el auténtico sentido de lo humano”. Juan de Dios Vial Correa, Humanitas 50. El rector de la Pontificia Universidad Católica de Chile realiza un recorrido por la historia de Humanitas en sus cien números, su vínculo con la Universidad y las perspectivas a futuro. Se trata de un reconocimiento al aporte de Humanitas en la tarea de la Universidad de hacer dialogar fe y razón, educar la inteligencia y abrir horizontes de comunicación entre disciplinas y con la sociedad. El texto completo y sus referencias se encuentran disponibles en www.humanitas.cl. El martes 26 de julio a las 11:30 horas se transmitirá por el canal de Youtube de la UC la ceremonia de conmemoración de este hito.
En el acto, Inés San Martín, periodista, coeditora y responsable en Roma del periódico Crux, expondrá sobre “El momento actual de la Iglesia y el rol de los medios católicos”. Historia de Humanitas En el año 1987 nos visitó en Chile el Papa Juan Pablo TI y estuvo en la Pontificia Universidad Católica, ocasión en que sostuvo su inolvidable encuentro con los constructores de la sociedad.
Allí, y en momentos muy difíciles para nuestro país, su reflexión sobre la misión y las responsabilidades del mundo de la cultura respecto del futuro, del progreso y de un mayor bienestar integral de la nación —y en especial del pueblo chilenoresonó fuertemente y cayó en tierra fértil. Sus palabras harían eco en quien en ese momento dirigía los destinos de la Universidad Católica, el rector, Dr.
Juan De Dios Vial Correa, quien además era presidente de la Pontificia Academia Pro-Vita y comprometido en temas de Iglesia y cultura*. El rector Vial consideró muy necesario fundar una revista que abordara justamente temáticas de este tipo. Se hacía entonces imprescindible un espacio donde se pudiera exponer el pensamiento de los católicos sobre grandes temas de actualidad.
Apoyado en esta idea por el profesor y prorrector de la época, el sociólogo Pedro Morandé, prosperó la iniciativa al punto de crear Humanitas, Revista de Antropología y Cultura Cristiana, que tomó su nombre del programa homónimo que dirigía el Prorrector Morandé.
En esta idea, participó también el arzobispo de Santiago y gran canciller de la Universidad de entonces, el cardenal Carlos Oviedo, quien le propuso a Jaime Antúnez, director del cuerpo “Artes y Letras” del diario El Mercurio, que se trasladara ala Universidad para crear algo nuevo bajo su alero.
Se trataba de echar a andar este nuevo proyecto. * Antúnez, filósofo, profesor universitario e investigador, ya cumplía dieciséis años como editor cultural y buscaba un proyecto donde Pudiera aportar a futuro desde su experiencia, amplios conocimientos y gran red de contactos que había atesorado durante ese tiempo. Fue así como, en octubre de 1995, el rector Juan de Dios Vial firmó el Decreto de Rectoría N* 147/95 que creaba la revista con el nombre Humanitas.
Su nombre definió el programa que debía seguir la publicación: “el de ofrecer una contribución modesta, pero decidida, a la inmensa tarea de recuperar el auténtico sentido de lo humano”*, Su primer número vio la luz un 16 de enero de 1996 y, como lo ha hecho desde su fundación hasta ahora, quiso reflejar las preocupaciones y enseñanzas del Magisterio, a la vez que potenciar la misión de evangelización y aporte al diálogo fe y razón de nuestra Universidad.
Cabe recordar, como lo indica el rector Vial Correa, que “este empeño nació casi directamente del llamamiento profético de san Juan Pablo 11... : Non abbiate — “No tengáis miedo”, cuando iniciaba su ministerio en octubre de 1978”. Este llamado sería un signo de fe y valentía que marcaría hasta el día de hoy el camino y línea editorial de Humanitas.
Incluso, el rector emérito don Juan de Dios Vial rememora que en la época en que surge la iniciativa, existía una cierta reticencia a hablar en nombre de lo católico, por la posibilidad de que se considerara que ello podía restringir el pensamiento.
Así, Humanitas pretendió ser una publicación que dijera “yo soy efectiva y declaradamente católica, pero no trato los temas desde una perspectiva teológica”. El abordaje de las temáticas a la luz de la fe se hace de manera racional. En otras palabras, se abordarían todas las interrogantes de relevancia para el ser humano. Humanitas ha sido pues, durante su ya larga trayectoria, esa forma en que desde la Universidad aportamos al análisis, reflexión y rescate de la presencia de Dios en las cosas humanas. Han transcurrido ya veintisiete años desde aquel octubre en que partía Humanitas, y hoy nos sen= timos felices y orgullosos de su permanencia y vigencia. Este medio de transmisión de la cultura de la Universidad pudo superar el paso del tiempo, los cambios históricos, incluso trascendiendo a quienes fueron sus impulsores.
Este año conmemoramos los primeros 100 números de la revista, los que reflejan y nos recuerdan el esfuerzo realizado por la Universidad y, en especial, las personas, quienes a lo largo de su trayectoria se han involucrado en esta importante tarea. Mención especial merecen los directores Jaime Antúnez y Eduardo Valenzuela, quienes junto a su Consejo Editorial y al equipo profesional y administrativo, han sabido darle calidad, presencia y actualidad a esta publicación.
Son muchas las personas que han contribuido desde diferentes La re, ¡sta se ha con ertido en urla instancia y de comunicación donde interactúan la fe, la sociedad, la cultura y la persona, y también se presenta como una síntesis entre las diferentes distiplinas intelectuales que dialogan entre sí. En la foto, ¡sita de S.S. Juan Pablo Il a la Pontificia ersidad Católica de Chile, 3 de abril de 198_. ámbitos al éxito de Humanitas.
Quisiera mencionar de manera especial a quienes colaboraron en cimentar este camino -no exento de vicisitudes-: me refiero a sus miembros fundadores, en primer lugar al entonces rector don Juan de Dios Vial Correa; al prorrector de la época, profesor Pedro Morandé; al entonces decano de Filosofía, profesor Juan de Dios Vial Larraín; los profesores Francisco Rosende, Rafael Vicuña, René Millar, Ricardo Riesco, Hernán Corral y Gabriel Guarda O.S.B., y a su primer director, Jaime Antúnez Aldunate, quien realizó una extraordinaria labor y estuvo a cargo de la revista por más de dos décadas.
Con Humanitas hemos querido recuperar el sentido de lo humano y, para ello, nos hemos valido de una comunidad de personas comprometidas con la lectura del misterio del hombre a la luz del Verbo encarnado (Cf.
Gaudium et spes, 22). El valor de Humanitas radica desde sus inicios en la gran notabilidad de algunos de sus colaboradores y también en la dencia y vigencia de los temas que aborda, con decisiva gravitación y atingencia a las disyuntivas culturales.
A la fecha, son más de 1350 artículos los que componen parte de la historia de esta publicación con la participación de más de 540 autores, dentro de los cuales se incluyen destacadas personalidades, tanto nacionales como internacionales. Elaño 2000 se creó el sitio web que permite hoy acceder a todos los números de la revista gracias a un notable trabajo de digitalización.
Con ello se amplió de manera importante el alcance de este medio y ha permitido que hoy Humanitas sea recibida por todos los obispos latinoamericanos, por los dotes, religiosos y religiosas de Chile, por los académicos de la Pontificia Universidad Católica de Chile y por otros amigos de la revista, constituyéndose en un medio para poder disfrutar de un espacio de diálogo para distintas disciplinas y para abordar fenómenos de carácter global. Es importante señalar además que, con el deseo de ampliar los horizontes de Humanitas, en noviembre de 2011 se presentó su versión en inglés y fueron publicados nueve números consecutivos.
Con esta iniciativa se buscó servir al mundo de habla angloparlante, como una manera de “contribuir en la misión de la inculturación de la fe y la evangelización de la cultura”, como señaló el cardenal Paul Poupard, entonces presidente del Consejo Pontificio de la Fe en la ceremonia de lanzamiento en la Santa Sede. Ello permitió abrir un diálogo entre norteamérica y sudamérica que hoy se mantiene a través de la traducción de algunos artículos de interés.
Al revisar los grandes textos de Revista Humanitas es posible apreciar el vínculo editorial con los acontecimientos y problemas de la sociedad en un momento determinado, como así también la continuidad de una visión que resulta consistente e iluminadora tanto desde sus inicios como en la actualidad.
La revista conjuga muy bien la calidad de sus contenidos, la presentación, el aporte artístico y el diseño, con su comunicación efectiva, característica que sin duda ha sido clave para mantenerse vigente y tener un crecimiento objetivo en el transcurso del tiempo.
La continuidad, crecimiento y desarrollo de Humanitas, como una revista que ha trascendido a sus fundadores y a su equipo editorial, demuestran que este proyecto, concebido para una audiencia general, resultó ser una propuesta no solo viable, sino también necesaria y llena de sentido en la vida de la Universidad, en la academia nacional, internacional y en nuestra sociedad.
Misión de la Universidad que se manifiesta en Humanitas Alolargo de los cien números de la revista, ha estado presente un trabajo de reflexión riguroso orientado a colaborar en la evangelización de la cultura, ofreciendo un nuevo lugar para la presencia de Cristo en nuestra universidad y sociedad, manifestada en cada artículo, comentario o editorial.
Humanitas nace en la Universidad Católica y es, por lo tanto, depositaria también del plan delineado a todas las universidades católicas por la Constitución Apostólica Ex Corde Ecclesiae y, en sus circunstancias particulares, realiza la esperanza depositada en aquella constitución. Para la Universidad, Humanitas ha significado un muy importante apoyo para extender su misión propia de desarrollar conocimiento ala luz de la fe en esta búsqueda incansable de alcanzar la verdad en Cristo.
El cardenal John Henry Newman, uno de los grandes pensadores de la idea de Universidad, no se cansaba de repetir que “la tarea de la Universidad no es ni religiosa ni moralista, no puede consistir en salvar las almas nien inducir alos hombres al bien”. Aunque ambas sean finalidades fundamentales en la vida de todo hombre, la verdadera misión de la Universidad se dirige al saber.
Dice Newman, “la universidad educa el intelecto para que razone bien en todos los temas, para que tienda hacia la verdad, y la asimile”*, Ha sido precisamente ese espíritu de la “educación de la inteligencia” como misión de la Universidad propuesto por Newman el que ha hecho de Humanitas una revista al servicio de la búsqueda de la inteligencia, de la verdad, integrando diferentes disciplinas y saberes presentes en la Universidad.
Así, en palabras de su actual director, Eduardo Valenzuela, sociólogo y ex decano de la Facultad de Ciencias Sociales, Humanitas posee “una expresa intención de apelar a la inteligencia de la fe”*, Humanitas ofrece una invitación a contemplar la belleza de la fe, haciendo dialogar el arte, la historia y en general las humanidades, las ciencias y filosofía, tanto en su confección como en sus contenidos. Lo fundamental es enseñar a pensar y razonar de manera integradora, lo que resulta esencial en un contexto en que los diferentes saberes tienden a especializarse y enclaustrarse en sí mismos.
Así, Humanitas se ha convertido en una instancia clave y necesaria de comunicación donde interactúan la fe, la sociedad, la cultura y la persona, y también se presenta como una verdadera síntesis entre las diferentes disciplinas intelectuales que dialogan entre sí, y también desde la comunidad universitaria a la sociedad en la que nos desarrollamos.
De esta manera, comunica Humanitas a través de sus páginas y de diversas iniciativas, a la comunidad universitaria y a la opinión pública en general, la necesidad de leer y analizar la verdad de la humanidad, de todas sus obras y acontecimientos, a la luz del Verbo Encarnado y del tesoro de la tradición de la Iglesia.
Revista Humanitas constituye un instrumento de análisis excepcional entre quienes deseamos generar conocimiento y discusión en torno a aspectos profundos y permanentes de interés universal y que precisan de una mirada conjunta y ampliada con la perspectiva de la fe y la razón en su conjunto.
Como afirmara san Juan Pablo Hen los inicios de su pontificado, “una fe que no se convierte en cultura es una fe no acogida con plenitud, no pensada en su totalidad, no vivida con fidelidad”*. * Texto completo y notas disponibles en www.humanitas.cl.