Autor: Paula Cifuentes Torres Directora Ejecutiva Empoderadasmedio. Cl
En la equidad de género las cifras no mienten.
La semana pasada se publicaron dos estudios claves que nos permiten determinar cuáles son los pasos claves para avanzar a nivel nacional y regional hacia la construcción de una real equidad de género.
Cuando se plantea la pregunta ¿ Crees que la sociedad es igualitaria en acceso y oportunidades para mujeres y hombres? Las respuestas varían desde un sí rotundo aunno enfático, esta última afirmación se basa en las creencias que durante el último tiempo, se han generado mayores espacios de participación mujeres en la sociedad y que laigualdad de oportunidades está ala vuelta de la esquina. En equidad de género las cifras no mienten y conocerlas nos entregan un escenario clarificador para los diversos actores.
Es así que me basare en dos publicaciones el * Zoom de género”, elaborado por el observatorio del Contexto Económico de la UDP y la Fundación Chile Mujeres y el estudio * Cerrando Brechas de género en el Cono Sur”, publicado por el Banco Interamericano de Desarrollo ( BID). El zoom de género es una instancia interesante pues mensualmente, a contar de abril de este año, entrega datos referentes a de género de empleo femenino a nivel nacional.
En el informe de este mes destacan dos elementos: la relación entre informalidad y maternidad, aquí se plantean claramente que la brecha de género es mayor cuando la madre tiene hijos en edad preescolar menores de 3 años, alcanzando una variación negativa del 24%, con más de 120 mil empleos aún por recuperar.
El informe del BID se centró en analizar las brechas de género analizó las consecuencias económicas en las desigualdad de género, sus causas y las políticas que contribuían a mitigarla en los países del Cono Sur: Argentina, Brasil, Chile, Paraguay y Uruguay.
Un aspecto que destaca de este documento es que si se eliminaran las barreras que enfrentan las mujeres en el mercado laboral el PIB de Chile podría subir en un 9%, mientras que en los países del Cono Sur podría variar entre un 4% al 15%. Ambos estudios nos presentan conclusiones importantes: los empleos de las mujeres aún no se recuperan alos niveles de prepandemia, subsidios como el IFE laboral pierden eficacia y las mujeres sufre segregación ocupacional.
La agenda para cerrar brechas debe centrarse en aspectos claves como fortalecer el sistema formal de cuidados relacionados con la crianza de hijas e hijos, adultos mayores o personas en situación de discapacidad; capacitar en digitalización, acceso a fuentes de financiamiento, fomentar la innovación y transformación de mipymes lideradas por mujeres y contar con políticas urbanas y de transporte con enfoque de género considerando las aspiraciones y problemáticas de las mujeres.
El desafío es clave, las cifras no mienten y en un momento en que nuestro país se encuentra viviendo un nuevo contexto socio político el desafío es tomar la oportunidad que nos ofrece la equidad de género para cerrar brechas que contribuyan al empoderamiento económico femenino e impulsar políticas públicas y fomentar un cambio social en esta línea.
Las buenas noticias es que cada vez son más las organizaciones privadas y públicas que están optando por sumar la igualdad de género más allá del discurso, el desafío está en que en los diversos niveles de la sociedad opten por ir más allá de un no rotundo a actuar con información para ir cerrando brechas.