Tres economistas chilenas que rompen barreras en el extranjero
Tres economistas chilenas que rompen barreras en el extranjero "Escribir en inglés me costó mucho, ¡y todavía me cuesta! ", dice Olivia Bordeu (33). Pero es apenas un paso en una carrera ascendente. Formada como ingeniera industrial en la UC, se especializó en transporte y de allí saltó a la econometría. "Me fascinó. Ahí me quedó siempre el bichito de que quería estudiar más economía", dice. Trabajó en J-PAL, donde tomó contacto con el investigador Chris Neilson. El siguiente hito fue estudiar el doctorado. "Hice mi `pre-doc' en Princeton, trabajando directamente en investigación para Chris Neilson. Finalmente, entré a hacer mi doctorado en la escuela de negocios de la Universidad de Chicago (Booth)". Prevé graduarse en junio, tras lo cual hará un posdoctorado de un año en Princeton. A partir del 2025, ingresará como profesora asistente en Berkeley Haas, la escuela de negocios de la Universidad de California, Berkeley. Se ha especializado en economía urbana, en particular, en las herramientas y modelos de comercio internacional que se puedan aplicar a problemas de urbanismo. "Entender economía era absolutamente clave para entender cómo funcionan las ciudades.
En ingeniería, estudié cómo diseñar los mejores sistemas de transporte dado donde viven y trabajan las personas, pero la economía me ayudó a entender también cómo las personas y empresas reaccionan a distintos sistemas de transporte.
Siempre me apasionó entender estos dos procesos en conjunto, ría esa estructura urbana si construimos una nueva línea de metro, por ejemplo". --Estudió en Chile y en Estados Unidos. ¿En qué lugar siente que podía desarrollarse mejor como economista? "Dentro de la sala de clases, la calidad de las clases en Chile y Estados Unidos es parecida. La gran diferencia de Estados Unidos es la exposición que uno tiene a la presentación de papers. Cada semana, tanto profesores internos como externos presentan los papers en los que están trabajando.
Al estar en Estados Unidos y estar cerca del `centro de gravedad' de economistas académicos, uno está expuesto a un mayor número de profesores, temas y perspectivas". Observa que las diferencias de género sí se presentan al pasar a la etapa de investigación. "En economía, las presentaciones son bastante adversariales, donde el presentador tiene que defender su trabajo y el público trata de encontrar debilidades/errores. Las mujeres son sujetas a una vara un poco más alta durante estas presentaciones". La siguiente barrera la observa en el ascenso en la carrera académica, que es "poco compatible con la maternidad. Es difícil (aunque no imposible) tener hijos durante el doctorado o los primeros años después de graduarse.
Entonces, algunas mujeres deciden retrasar la maternidad para priorizar la carrera académica (... ) y eso viene a un costo personal". entendiendo la ciudad como algo `vivo' que va a evolucionar en respuesta a nueva infraestructura, y que, al diseñar infraestructura, tenemos que tomar en cuenta que la ciudad es algo dinámico que va a cambiar en respuesta a esto". "Existen muchos modelos desarrollados en comercio internacional, enfocados en entender cómo o por qué distintos países comercian arroz, servicios financieros, cobre, etc. Yo trabajo tomando estos modelos, pero usándolos para entender el `comercio' de trabajadores dentro de las ciudades. Podemos pensar que La Reina `exporta' trabajadores, en el sentido de que mucha gente vive en La Reina, pero no trabaja en La Reina. En cambio, la comuna de Santiago `importa' trabajadores.
Al pensar en la ciudad de esta forma, podemos usar estos modelos para entender por qué observamos ese patrón en la data, y cómo cambiaOLIVIA BORDEU: " La calidad de las clases en Chile y Estados Unidos es parecida" Olivia Bordeu. La trayectoria de Ana María Gazmuri Barker (40) partió en la ingeniería civil, derivó a las finanzas y continuó como asistente de investigación en el Banco Mundial en EE.UU.
Realizó su doctorado en economía en la Universidad de Pensilvania (Wharton) y postuló a numerosos puestos académicos en EE.UU., Europa y América Latina. "La mejor oferta que tuve fue en la Escuela de Economía de Toulouse (TSE) en Francia. La motivación para irme fue puramente académica. Era un privilegio poder trabajar en un lugar como TSE y poder seguir aprendiendo de profesores del más alto nivel", cuenta. Su investigación económica gira en torno a la elección de escuela y los mercados educativos. Su foco está en cómo la calidad de la educación, la segregación y el acceso a la educación se ven afectados por la competencia, las características del mercado y las políticas públicas.
En su propia historia ha debido abrirse nuevos caminos, aunque hay más por delante para las mujeres. --¿ Cuáles han sido los principales obstáculos que enfrenta y han enfrentado las mujeres en la academia? "Los obstáculos en la academia para las mujeres son parecidos a los que encontramos en otros trabajos, generalmente relacionados con la maternidad y la falta de presencia de mujeres en cargos altos. La maternidad afecta muchísimo la productividad, sobre todo los dos primeros años de vida de los hijos. Es difícil viajar para ir a conferencias, a seminarios.
Eso se ha tratado de compensar alargando lo que se llama el tenure clock, el período de evaluación para ser profesor titular". "Otra cosa que creo que también es importante es que las mujeres tendemos a ser más inseguras, a dudar más de si un proyecto es bueno, a darle más vueltas a un artículo antes de mandarlo a una revista. Esto lo he visto tanto en mis alumnas como entre mis compañeras en el doctorado". "Un último punto es la importancia en la academia de las redes de contacto. Tradicionalmente, economía ha sido un campo con mucha mayor presencia de hombres que de mujeres, y eso naturalmente impacta la posibilidad de participación de las mujeres. Eso hoy ha mejorado mucho, la mayoría de las asociaciones de economistas en Europa y EE.UU. han intentado crear instancias específicas para que mujeres académicas se encuentren y conozcan.
Estas redes son importantes para aprender de las experiencias tanto en el proceso de publicación de artículos como de postulación a fondos de investigación, etc.". ANA MARÍA GAZMURI BARKER: "La maternidad afecta muchísimo la productividad" Ana María Gazmuri Barker. Ya sea que se especialicen en áreas como la educación o la economía urbana, estas tres profesionales coinciden en que los obstáculos en la carrera académica femenina se han reducido. Sin embargo, describen los desafíos que aún enfrentan las mujeres. Ana María Gazmuri Barker, Olivia Bordeu y Carolina Concha Tres economistas chilenas que rompen barreras en el extranjero LAURA SAN MARTÍN.