Al infinito y más allá
Al infinito y más allá S orprender por fuera y emocionar por dentro.
El arquitecto chileno Óscar Mac-Clure (1922-2024) siempre supo que sus propuestas debían generar esa combinación de sensaciones, y fue lo que probablemente quiso plasmar en una de sus obras más emblemáticas: el Planetario de la Universidad de Santiago de Chile (Usach). Desde su inauguración en 1985, este recinto se convirtió en un ícono arquitectónico de la ciudad, al tiempo que se ha consolidado como un referente nacional en la divulgación del conocimiento astronómico.
El edificio por estos días celebra sus 40 años de existencia con el lanzamiento de un libro que rinde homenaje a su autor, quien también estuvo detrás de obras como el Museo Gabriela Mistral de Vicuña, el Aula Magna del Liceo Manuel de Salas y el Centro del Magisterio de Viña del Mar. Además, participó en el diseño de escuelas públicas a lo largo de todo Chile.
Planetario Usach 1985 2025 es el título de la publicación que, a través de diversos escritos, fotografías en blanco y negro y a color, así como bocetos y planos, narra la historia de este patrimonio capitalino, cuyo desarrollo estuvo marcado por diversos desafíos. Todo comenzó con la llegada a Chile del proyector Carl Zeiss VI a finales de la década de los 60, donación cuyo origen aún no está cien por ciento claro.
Lo que sí se supo de inmediato es que se trataba de un complejo aparato que contaba con la más avanzada tecnología de la época, pero que no tenía dónde ser instaAl infinito y más allá El Planetario de la Universidad de Santiago (Usach) celebra sus 40 años con el lanzamiento de un libro conmemorativo que recorre su historia mediante textos, fotografías, bocetos y planos. Una retrospectiva que busca rendir tributo a su autor, el arquitecto Óscar Mac-Clure, cuya inspiración para dar forma a esta innovadora e icónica obra provino de las pirámides mayas. Texto, Constanza Toledo Soto. Fotografías, Carla Pinilla G. El Planetario tiene 4.350 m 2. Su cúpula, de 20 metros de diámetro, lo ha convertido en un ícono. En 1997, con el apoyo de Codelco, el simbólico cono truncado se revistió con planchas de cobre, lo que modernizó la estructura. La construcción se llevó a cabo entre 1982 y 1984, según el diseño del arquitecto Óscar Mac-Clure. PATRIMONIO. Al infinito y más allá lado.
Durante los años 70, el proyector pasó de manos del Ministerio de Educación a la antigua antigua Universidad Técnica del Estado, y la misión, misión, entonces, era encontrar un terreno y obtener obtener fondos para levantar el hogar” que lo cobijaría: “El lugar que finalmente se eligió y donde se emplaza hoy el Planetario correspondía correspondía a la zona adyacente a la antigua casa patronal de la Hacienda San José de Chuchunco, Chuchunco, ocupada en ese entonces por galpones galpones de la Feria Tattersall”, relata el Dr. Rodrigo Vidal Rojas, actual rector de la Usach, y añade que luego se compraron nuevos paños hacia el sector de Alameda con Matucana.
Tras la transformación de la UTE en Universidad Universidad de Santiago, en 1981, comenzaron los trabajos de construcción en 1982, según los planos del visionario arquitecto Óscar Mac-Clure, quien relaté en una entrevista: “En 1969, con el fin de obtener información técnica, fui en comisión de servicio a la industria industria Carl Zeiss de Oberkochen, Alemania Occidental, Occidental, realizando otras visitas programadas programadas a los planetarios de Núremberg, Berlín, Zúrich, Lucerna, París y Londres. Posteriormente, Posteriormente, visité por mi cuenta los planetarios de Nueva York y Buenos Aires.
En México visité los del Instituto Politécnico de Zacatenco en la Capital Federal y los de Morelia y Villahermosa”. Villahermosa”. Quizás por eso no sea casualidad que la obra evoque al observatorio astronómico de Chichón ltzá, ni menos que uno de sus espejos espejos de agua emule un cenote maya, sitio donde solía estudiarse el universo y las estrellas estrellas a través del reflejo que se producía durante durante la noche: Óscar Mac-Clure imaginó las piscinas del Planetario como actualizaciones de estas estructuras geomorfológicas de Yucatán, Yucatán, consideradas espacios sagrados por la cultura maya al ser las puertas que los conectaban conectaban con el inframundo”, cita el libro.
Desde su inauguración en 1985, el Planetario Planetario Usach se ha consolidado como uno de los más grandes del mundo, destacando no solo por su importante labor de divulgación científica, científica, sino también por la funcionalidad e innovación innovación de sus elementos arquitectónicos. Un ejemplo de esto es que, antiguamente, cada vez que el proyector estaba en marcha, una cascada de agua descendía por el cono truncado truncado que define la estructura de la construcción. construcción. De esta manera, desde la calle, el público público podía identificar al instante que la función había comenzado. VD La Sala Albert Einstein está ubicada en la cúpula cúpula central y alberga el proyector Carl Zeiss VI, un complejo aparato óptico que llegó a Chile a finales de los 60. La entrada principal conduce directamente al Anillo Central, espacio donde se exhiben maquetas de diversos hitos astronómicos. El proyector Zeiss es el corazón del planetario. Un artefacto artefacto de dos cabezas cabezas yi6o lentes que da vida a un show de constelaciones sobre un domo. Debido a la crisis hídrica, este sector de la obra reemplazó a la antigua cascada de agua que descendía por el cono truncado..