Autor: Tarik Lama y Willams Valenzuela Académicos Escuela de Derecho Universidad de Las Américas
1 de mayo: una reflexión necesaria
1 de mayo: una reflexión necesaria Cada 1 de mayo conmemoramos el Día Internacional del Trabajador, instancia que nos recuerda la lucha por mejores condiciones laborales. La historia de esta fecha se remonta a 1886, cuando en Chicago, Estados Unidos, miles de personas se movilizaron exigiendo una jornada de trabajo de ocho horas. Este acontecimiento que lamentablemente se vio empañado por la represión, obreros asesinados y violencia, marcó un hito para la humanidad.
A partir del contexto anterior, resulta fundamental señalar que en nuestro país hemos sido testigos de importantes avances en materia laboral, como la reciente promulgación de la Ley Karin, que busca prevenir y sancionar el acoso sexual y laboral, sumado a la condena por violencia en el trabajo y discriminación. Esta ley representa un paso radical hacia el desarrollo de un Chile más justo e inclusivo conforme al convenio 190 de la OIT.
Asimismo, destaca la Ley de 40 Horas que reduce gradualmente la jornada laboral ordinaria de 45 a 40 horas semanales, siendo una normativa cuyo fin radica en mejorar la calidad de vida de los trabajadores y trabajadoras, promoviendo la conciliación entre la faceta laboral y la familiar. Sin embargo, aún queda mucho por hacer. Debemos seguir velando por construir un país donde el trabajo sea digno.
Estas actualizaciones legislativas, si bien posicionan a Chile como una nación respetuosa de estándares internacionales, no serán suficientes sin un cambio cultural que promueva el respeto y la tolerancia en los entornos laborales y donde se promocione la desconexión, sin dejar de lado la productividad. En este día del trabajador, celebremos las conquistas del pasado y renovemos nuestro compromiso con la construcción de un futuro más justo y equitativo para todos los trabajadores y trabajadoras de Chile. Tarik Lama y Willams Valenzuela Académicos Escuela de Derecho Universidad de Las Américas.