Autor: TERESA VERA
¿Funciona el método de crianza "Terminator" de Arnold Schwarzenegger?
“Si tú aplicas una enseñanza a un hijo, 20% es orden-norma y 80% es sentimiento”, asegura Alejandro Cuevas, siquiatra. Atrick, el tercer hijo del actor y exgobernador de California, Arnold Schwarzenegger, reveló el método de crianza que impuso su padre a sus cuatro hijos. “Si no apagábamos la luz, estábamos desperdiciando energía. Mi papá sacaba las ampolletas. O si no hacíamos las camas, nos sacaban las sábanas y frazadas. Si dejábamos corriendo el agua en el baño, nos cortaban el agua caliente”, asegura el retoño de y María Shriver que lo secundó en el tema de las pequeñas reglas estrictas. Otra perla en el aseo y ornato de la casa.
“Si tirábamos nuestra ropa al suelo, mis padres no nos devolvían la ropa”, Según Patrick, “lo hacían con el fin de que aprendiéramos a respetar la casa y a las otras personas que vivían allí”. 20% norma y 80% sentimiento Según Alejandro Cuevas, siquiatra de la Universidad de Chile, “nunca los extremos son buenos. Y más que los extremos, al final lo que impera es cómo quien recibe estas normas extremas, las maneja y se adapta a ellas.
Y eso va a depender del tipo de personalidad en la cual se va estructurando el niño y adolescenLas r deb: acorde )) “Los adultos a cargo deben estar de acuerdo y alineados” Dominique Karahanian, sicoterapeuta Su hijo Patrick, de 27 años, reveló cómo educó a sus hijos el famoso actor hollywoodense te”. Agrega que este tipo de normas extremas muchas veces son un “aviso” de enseñanza para que “por algún motivo no se sientan especiales, por ejemplo, al ser hijos de alguna figura pública”. Recuerda que “no importa la orden si ésta viene acompañada de un sentimiento de amor de parte de los padres.
Y, de hecho, si tú aplicas una enseñanza a un hijo, 20% es ordennorma y 80% es sentimiento”. El siquiatra acota que “cuando estas normas rígidas y extremas caen en un chico, por así decirlo, inestable en su estructura o forma de ser, puede dejarlo marcado en su vida, y conseguir lo contrario, es decir, solamente ser un ente que obedezca sin ninguna posibilidad de tener iniciativa y proponer algo propio.
En resumen, por un extremo puede ser muy bueno pero por el otro extremo muy dañino”. Consenso "Siempre es importante que en las casas existan normas relacionadas con la convivencia”, estima Dominique Karahanian, sicoterapeuta y docente de la Universidad Mayor. Respecto de cuán estrictas sean “va a depender del estilo de casa familia. Tener normas muy duras no ayuda mucho porque cuando el castigo es muy frecuente pierde la efectividad. Lo que sí, las normas deben tener un refuerzo positivo como felicitar cuando hace bien las cosas”. Recalca que “es importante tener normas en toda casa y explicar el por qué. No sirve el porque el papá lo dice. Para que las normas se cumplan de manera adecuada y sean efectivas tienen que ser consensuadas”, comenta.
El hijo, en este caso, debe saber el motivo por el cual el papá le saca la ampolleta, retira las sábanas y frazadas y corta el agua caliente”. Karahanian resalta además que “los adultos a cargo deben estar de acuerdo y alineados, de lo contrario el niño se va con el más blando”. Para Carolina Pezoa, sicóloga y académica de la Universidad Central, "las norma exageradas solo hacen que los niños se resistan.
La idea es generar una disciplina que el niño sepa autorregularse y esté basada en la comprensión versus la imposición”. Recuerda que lo que cuenta Patrick "es un suceso y no el proceso, por ejemplo, que llevó al papá a retirar la ampolletas y las sábanas”. carla Martínez, sicóloga infanto juvenil, directora de Clínica Sicológica de la Universidad Autónoma, sede Temuco, analiza: "Lo primero es que sus papás eran bien estrictos, exagerados con las reglas, pero también habla de consistencia, es decir, yo dije que había una regla que cumplir y hago que se cumpla, cosa que en nuestra cultura chilena no nos pasa tanto”. Estima que se puede cuestionar el método de que se bañen con agua fría o dejarlos sin ampolleta, al límite de lo que se denomina una crianza respetuosa, pero que las medidas disciplinarias deben ser acorde con la falta.
“Es un poco drástico que por cinco minutos que se me quede encendida la luz se retire la ampolleta”, dice, como ejemplo. "Me preocupa que, a propósito de estas sanciones, algunos papás crean que es una buena idea instaurarlas.
Las sanciones deben estar acorde a la edad, debe existir una anticipación, un diálogo, anunciar la causa y consecuencia”. “Si bien estas sanciones que imponían estos papás, no fueron sentidas como maltrato para su hijo Patrick, si hay otras formas más creativas, respetuosas y divertidas para generar los mismos hábitos en los niños. Enseñarles a ser ordenados o cuidar los recursos del medio ambiente”.