Autor: C. GONZÁLEZ
El Valle del Elqui concentra una biodiversidad mayor a la conocida y aún poco estudiada
Grupo de investigadores lleva dos años documentando la zona de Paihuano: En Chile existen cerca de 450 especies de: abejas.
En el valle se han identificado al menos una S de 50 especies de animales, entre aves, roedores, reptiles y felinos; al menos 21 tipos de abejas nativas, y una gran cantidad de flora autóctona, convi ven a lo largo del Valle del Elqui, en la Región de Coquimbo.
Una diversi dad mayor a la que se creía y muy poco estudiada, según un catastro que desde hace dos años vienen realizando una docena de profesionales en la zona La iniciativa surgió como un pedido de la misma comunidad local, con el fin de conocer en detalle la flora y fauna del lugar y, así, promover ini ciativas de y conservación, en especial amenazas naturales y humanas, como la sequía o la actividad minera. La mayoría de los habitantes se dedica sobre todo a actividades agrícolas, de ganadería y el turismo. “Personas de la comunidad se contactaron con nosotros para ver la posibilidad de hacer un estudio del lugar, Loros tricahues, pumas y 21 especies de abejas nativas son parte de la flora y fauna endémicas. El registro busca apoyar a la comunidad local en su preservación.
Veintena, como la de la imagen, En particular, alertados por algunas exploraciones geológicas que está realizando una empresa minera”, explica Milen Duarte, bióloga ambiental del Instituto de Ecología y Biodiversidad (1EB), que funciona al alero de la Facultad de Ciencias de la U. De Chile. Miembros del IEB, junto a investigadores del Instituto de Entomología de la U. Metropolitana de Ciencias de la Educación (UMCE), y la Corporación para el Desarrollo de las Ciencias Ambientales (Codeciam), se dierona la tarea de hacer un detallado barrido por el sector de Paihuano. “Existen muy pocos estudios en la zona. Hay sobre todo de vegetación en la parte alta. Pero entre los 1000 y 2.500 msnm casi no había datos, y hemos encontrado una diversidad altísima, mayor de lo que se creía y muy poco estudiada”, precisa.
A la fecha, con tres campañas de Observación en el lugar, los resultados los han sorprendido: se pudo identificar la presencia de, al menos, 50 especies de animales, siendo las aves el grupo más numeroso de todos, con 35 tipos diferentes. Los roedores (8 especies), reptiles (4) y murciélagos (2), les siguen en variedad. Además, han sido registrados, un puma, un zorro culpeo, un marsupial y un anfibio. Especies amenazadas Varias de estas especies están en categoría de conservación, amenazadas en especial por la degradación y la pérdida de hábitat. “Es una zona donde habita el tricahue, por ejemplo.
Es un ave protegida que hace poco volvió a repoblar la zona luego de diez años de ausencia”. Entre las hipótesis desu desaparición está el uso de pesticidas en actividades agrícolas, que han sido regulados, así como la caza para su venta como mascota. “Debemos proteger al loro tricahue. Sinél y losecosistemas donde habita, se pierde el equilibrio natural de la vida, y se amenaza fuertemente el bienestar de las personas”, enfatiza la bióloga. Uno de los hallazgos más llamativos fue el descubrimiento de más de 21 variedades de abejas nativas. Así como la existencia de glaciares de roca no protegidos en las cumbres de las montañas, que son claves para el recurso hídrico de todo el Valle del Elqui, hasta La Serena. “Nuestra idea es recoger datos por dos años más; siempre con apoyo y autogestión de la comunidad y postulaciones a fondos”, dice Duarte. En lo inmediato, ya han realizado campañas de educación ambiental y charlas para promover la protección del patrimonio natural.
Uno de los objetivos, agrega, es contar con evidencia que permita “crear figuras de protección en el territorio que se encuentra hasta los 2 mil metros, pues sobre esta altura, sí existen medidas de protección e incluso hay un sector que es santuario de la naturaleza”.
