Las posibilidades de industrializar el CLT en Chile
Plantaciones de Pino radiata en Chile dan oportunidad de usar la materia prima nacional.
Panel madera contralaminada En la década de 1980 se creó en Austria y Alemania el CLT (Cross Laminated Timber), para dar más resistencia y fortaleza a la madera, uniendo capas de este material en forma longitudinal y transversal. Desde esos años se comenzó a analizar la construcción en madera en altura en la Universidad de Santiago de Chile, en el Departamento de Ingeniería en Obras Civiles, aunque con la incorporación de los estudios sismo resistentes las edificaciones de madera no pasaban los dos pisos.
Desde 2012, la universidad comenzó a desarrollar proyectos en torno a la ingeniería sismoresistente para diseño estructural de edificios de mediana altura en madera contralaminada.
La profesora Paulina González, directora del proyecto y especialista en ingeniería estructura) e ingeniería sísmica, señala que la motivación fue el déficit de un millón de viviendas, agravado por la cantidad de desastres naturales en Chile, lo que hacía que además se tuvieran que construir en el menor tiempo posible. "Estudiamos la madera, porque es industrializable, uno puede generar elementos que aceleren la construcción y además es ecológicamente sustentable", agrega.
"Para edificios el mejor sistema es el contralaminado y para no cambiar mucho el esquema, porque estamos acostumbrados a diseñar con muros de hormigón armado, que se asemeja estructuralmente". Sin embargo señala la académica, en Chile no existen regulaciones para el CLT. Para impulsar su desarrollo se impulsaron proyectos con la Cámara Chilena de la Construcción, como mandante, y apoyo del Ministerio de Vivienda.
"Hay otros países interesados en exportar CLT que ellos fabrican. Hay que apurar el paso, porque sino, el mercado lo van a cubrir las empresas extranjeras", dice Paulina González, destacando que Chile es el país que tiene mayor área forestal con Pino radiata, lo que da oportunidad de usar la materia prima nacional.