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Valorizó perjuicios por retraso en revisión v aprobación de provecto de ingeniería definitiva:
Nuevo Pudahuel ingresó discrepancia al Panel de Concesiones de Obras Públicas, que se suma a otras hechas previamente.
MARCO GUTIÉRREZ V.
La concesionaria Nuevo Pudahuel —ligada a Aéroports de Paris y Vinci Airports—, que opera el terminal aéreo de Santiago desde octubre de 2015, vuelve a enfrentarse con el Ministerio de Obras Públicas en el Panel Técnico de Concesiones, instancia que puede mediar en conflictos, dar recomendaciones que deriven en un acuerdo o que sigan en un arbitraje si no hay conformidad de las partes. Esta vez, la concesionaria valorizó los mayores costos y perjuicios derivados de —asegura— atrasos imputables al MOP en el proceso de revisión y aprobación del proyecto de ingeniería definitiva (PID) del recinto. En un documento presentado al Panel, la firma solicita una compensación por 4, 59 millones de UF, cerca de US$ 183 millones. Sin embargo, añade, que como el ministerio otorgó una extensión unilateral de plazo de cinco meses, sostiene que la cartera deberá pagar “desde ya” a la concesionaria 4, 13 millones de UF netas más IVA, aproximadamente
US$ 164 millones. La concesionaria valorizó lo que se indicó en la discrepancia presentada en mayo de 2018. Sostiene que los efectos económicos de los incumplimiento de parte de Obras Públicas fueron analizados y medidos hasta el 31 de diciembre de 2018. El texto añade que el 10 de septiembre de 2018, el MOP dictó actos administrativos mediante los cuales creó “puestas en servicio provisorias parciales adicionales”, dividiendo secciones de obras y sus respectivas fases de operación, para adecuarlas a la realidad del proyecto y a los atrasos. “Es un claro reconocimiento de la responsabilidad del MOP y de la disrupción de las obras del contrato de concesión”, señala. Asimismo, recuerda que el ministerio y el aeropuerto suscribieron, el 8 de enero de 2019, un protocolo no vinculante que establecía cinco meses de extensión, para luego seguir negociando compensaciones económicas. Pero las conversaciones no prosperaron. La concesionaria indica que
“actuando de forma unilateral”, el MOP autorizó recientemente, con fecha 8 de mayo de 2019, extensiones de plazos de cinco meses para la puesta en servicio provisoria dos y otros avances. La empresa dice que recurrió al Panel, además, por encontrarse “quebrado el equilibrio económico del contrato”, indica.
Otras pugnas
En febrero de 2018, el aeropuerto reclamó ante el Panel por obras adicionales ligadas a la construcción de una bodega para servicios de carga. Otro de los conflictos entre las partes ya tuvo una recomendación de la instancia mediadora. En julio de 2017, el MOP sufrió un revés ante el Panel en torno a si las tarifas máximas de los servicios regulados del terminal ya tenían incluido el IVA, o si este debía entenderse como un recargo sobre la cantidad de dinero o
precio estipulado en las bases de licitación. La entidad señaló que el IVA no estaba considerado y el tema pasó a debate en la comisión arbitral del contrato. Otra desavenencia, en 2017, fue por el pago de los ingresos que debe compartir la concesionaria con el MOP, considerando que la sociedad ofreció entregarle al Estado el 77,56 % de sus ventas. Nuevo Pudahuel indicó que hay servicios en los que no devenga todos los ingresos.
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