A cuidar el agua que estamos en sequía
Nuevosur a cargo de la captación, procesamiento y distribución de agua potable, así como del tratamiento de aguas servidas, en cuanto a asegurar el abastecimiento de este vital elemento para consumo humano -en zonas de su jurisdiccióna pesar de la dramática sequía. Muchos piensan que el agua que sale de la llave viene del río y que, simplemente, se toma por una tubería y lleva así no más a las casas. Pero las cosas no son tan simples, porque en el caso específico de Talca, capital regional, la mayor parte de la captación de agua para estos fines viene de las napas subterráneas. Y, luego, dicha agua es objeto de completos tratamientos de sanitización y tratamiento, hasta llegar al sistema de distribución domiciliaria. En el caso de las aguas servidas es exactamente, porque simplemente el agua que se libera de los domicilios no va al río directamente, ya que pasa también por un proceso de tratamiento. Ambas funciones eran originalmente labor de empresas estatales, pero en esos tiempos, nadie se hacía cargo de las aguas servidas, por lo cual, era común observar los ríos altamente contaminados y focos de insalubridad en los puntos de descarga, ya sea por tuberías o canales no abovedados a través de las ciudades. Luego se procedió a licitar a privados ambos servicios. Al principio hubo gran polémica, porque muchos reclamaron que se estaba literalmente “vendiendo” el agua a empresas extranjeras. Pero, en la práctica, el balance es mucho más alentador cuan0É importante señal de tranquilidad realizó la empresa
do se ve que seguimos teniendo agua potable en tiempos de aguda sequía. Las tarifas, además, está claramente reguladas y son parte de procesos debidamente informados a autoridades fiscalizadoras. En todo este contexto, las empresas que ejecutan estas operaciones realizan constantes inversiones destinadas, justamente, a entregar un mejor servicio y hacer más eficientes sus procesos. Pero, aunque nos digan que habrá agua saliendo de la llave, es igualmente trascendente que la comunidad ponga de su parte en la urgente necesidad de racionalizar el consumo. La reciente campaña lanzada por el gobierno busca justamente que la ciudadanía tome consciencia y cambie su cultura en cuanto al agua potable. Son acciones diarias donde todos podemos ayudar, como regar de noche los pastos y plantas para que el agua no se evapore con el calor; no deja corriendo la llave si nos lavamos los dientes; duchas más cortas y lavado de ropa en función rápida. También utilizar sistemas más eficientes para lavar la vajilla después de su uso. A la vez, otros grandes consumidores también deben poner de su parte, como ocurre con las municipalidades o grandes empresas, los cuales tiene la meta de reducir su consumo en un 10%. Si los ciudadanos colaboramos con un margen similar o superior, entonces, tendremos más asegurado el suministro para estas crisis. El agua se acaba y Chile se está secando. Dos verdades que se hacen dramáticas cuando recorremos zonas del secano costero, donde simplemente ya no queda agua. Y las lluvias será cada vez menos y los veranos cada vez más calurosos. Son fenómenos ante los cuales debemos actuar ahora y pronto, sin esperar más.
Pero, aunque nos digan que habrá agua saliendo de la llave, es igualmente trascendente que la comunidad ponga de su parte en la urgente necesidad de racionalizar el consumo