LA DGA ESTÁ EN MEDIO DE CONFLICTO
Divididos por las aguas están los canalistas de la Región del Biobío
La autoridad está por otro lado diseñando un plan estratégico, en proceso de licitación para las cuencas del Biobío y del Laja de manera de usar de mejor forma el recurso en la Región.
POR CARMEN GLORIA SANDOVAL V. Carmen. sandovalawdiarioelsur. Cl
ivididas por las aguas es D tán las asociaciones de canalistas de Biobío. Durante el año pasado se mantuvieron enfrentados en una batalla que se libró en el campo de la Dirección Regional de Aguas e incluso ha escalado hasta el Ministerio de Obras Públicas, en un aspecto específico. En una carta suscrita por el presidente de la Sociedad Agrícola del Biobío (Socabío A.G. ), José Miguel Stegmeier, y publicada en este medio este miércoles 5 de febrero, el gremio emplazó ala Dirección General de Aguas (DGA), a “ejercer la vigilancia de las aguas en los cauces naturales, velar por su adecuado aprovechamiento y supervigilar el funcionamiento de las organizaciones de usuarios, actúe con ecuanimidad y trate con equidada todos sus usuarios”. A juicio del dirigente empresarial, ciertos hechos así lo prueban como por ejemplo, que tras un largo trabajo de la Mesa de Acuerdo para la Recuperación del Lago Laja, que reunió a todos los usuarios y entidades relacionadas con esta materia, en el año 2017 se llegó a un acuerdo para constituir la Junta de Vigilancia, destinada a regular el caudal y dar garantías a todos. “Desde ese año, la indolencia y falta de interés de las autoridades regionales y nacionales de la DGA han impedido la materialización de este acuerdo, con casi tres años de completa inactividad”. Al contrario, agrega la misiva,
“en menos de cuatro meses la DGA tramitó y resolvió un reclamo por extracción ilegal de aguas desde el Río Laja por los operadores del Canal Zañartu, absolviendo al acusado en tiempo récord. En el expediente se acredita, por ejemplo, que el informe técnico de la DGA tiene fecha 1 de octubre de 2019 y el mismo día se dictó la resolución absolutoria, con una diligencia nunca antes vista”. Todas las respuestas las entregó, Andrés Esparza, director regional de la Dirección Regional de Aguas (DGA). Explicó que, respecto a los procedimientos que Socabío acusa que se resolvieron con celeridad a favor de los canalistas del Zañartu, por mandato legal cuenta con un plazo máximo de seis meses. “Entonces no es que nos hayamos demorado un tiempo extraordinario”. Fue más allá y detalló que dicha denuncia se recibió el 10 de mayo de 2019 y lo que primero que correspondía hacer es un proceso de admisibilidad que se acogió dando curso asu tramitación el 29 de mayo. Lo que procedía enseguidaen los meses de junio y julioera hacer las visitas en terreno. “Además, tenemos una estación de monitoreo en la salida del canal Zañartu y recibimos la información 24/7 de las extracciones que se están haciendo en los canales, por lo tanto, contábamos con esa información además de ir a terreno y verificar que todo estuviera acorde a la norma. Después de eso se procedió a notificar al interpelado, en este caso los canalistas del Zañartu quienes hacen sus descargos. Todo ese proceso fue avanzando, se abre un término probatorio, se hacen pruebas testimoniales y de documentos y luego viene un informe técnico”. Sobre la interpelación de Socabío en relación a que tanto el informe técnico como la resolución salieron el mismo día, el director regional de la DGA, Andrés Esparza señaló que ello se debe a que ambos documentos se van trabajando en paralelo, por lo tanto una vez que está resuelto el informe técnico, se termina la redacción de la resolución que tiene el visamiento legal y se procede a decretar la resolución y se notifica a las partes. “Desde que se admitió la denuncia hasta que se declaró admisible y se evacuó el informe técnico pasaron 125 días queson cuatro meses”.
SIN ATRIBUCIONES A pesar de que la DGA tenía antecedentes de una denuncia anterior de Colbún contra el Canal Zañartu, Esparza sostiene que de acuerdo asus estadísticas “el Canal Zañartu no ha infringido los límites máximos que tienen permitidos extraer y por lo mismo las denuncias se han denegado. Y mismo después, el 25 de noviembre del año pasado, presentaron un recurso de reclamación que nosotros como DGA se denegó porque ellos(Canal Zañartu) cumplen la norma de acuerdo a los derechos que ellos tienen”. En el otro punto reclamado por Socabío sobre la creación de una Junta de Vigilancia del Laja, que la DGA les habría impedido materializar, Esparza dijo que “se supone que se estaba trabajando en eso, pero de partida ha sido muy completo quese pongan de acuerdo las partes y poreso mismo estas denuncias, y porque cuando hay partes más interesadas es más difícil llegar a un acuerdo común. Por lo demás, esto escapa a las atribuciones que tenemos como DGA regional debido a que en especial el Canal Zañartu, tiene serias implicancias para los agricultores de la región de Nuble, y como es un tema birregional actualmenteseestá tramitando a nivel ministerial”. Los canalistas del Zañartu envían agua hacia Nuble a comunas como Pemuco, Yungay, Huépil donde desemboca. En tanto el Laja, comorío no, pero hay canales que desembocan en ríos o esteros de Nuble. Finalmente, Andrés Esparza declaró que la DGA es la más inAAA Y
teresada en que se conforme la Junta de Vigilancia. “Estamos en un contexto de cambio climático, y con una escasez hídrica generalizada que va avanzando hacia el sur, por lo que nos interesa mucho saber cómo se están utilizando los recursos hídricos. Y por lo mismo, hemos tomado
otras medidas y partimos con la cuenca más grande que tenemos en Biobío, donde estamos diseñando un plan estratégico, que hoy está en proceso delicitación, para poder usar de mejor forma el recurso en la región y donde la subcuenca del río Laja está incluida”, cerró.
Resulta muy curioso que se intente sacar desmedidamente un mayor caudal del Laja, en circunstancias de que no han aumentado los requerimientos de aquellos agricultores que se ven beneficiados del riego del Zañartu. No entendemos cual es el uso que se le quiere dar a estas aguas adicionales”. José Miguel Stegmeier
Además, tenemos una estación de monitoreo en la salida del canal Zañartu y recibimos la información 24/7 de las extracciones que se están haciendo en los canales, por lo tanto, contábamos con esa información además de ir a terreno y verificar que todo estuviera acorde
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LOS QUE NO TIENEN DERECHO
del presidente de la Socabío, José Miguel Stegmeier, sigue siendo muy grave lo que está ocurriendo en relación con el aumento de extracción de aguas del Río Laja por parte del canal Zañartu. "Históricamente este canal derivaba una cantidad razonable de metros cúbicos y nunca se escuchó de parte de los usuarios de este ducto alguna disconformidad respecto de insuficiencias en la disposición de Por esto es que hoy resulta muy curioso ue se intente sacar desmedilamente un mayor caudal del Laja, en circunstancias de que
no han aumentado los requerimientos de aquellos agricultores que se ven beneficiados del riego del Zañartu. No entendemos cual es el uso que se le quiere dar a estas aguas adicionales, pero lo que sí entendemos es que, si se consumara esta situación, todo el sistema Laja colapsaría, causando un daño enorme atodos los usuarios, principalmente a aquellos que no tienen derechos, como es el caso por ejemplo, del complejo turístico de los Saltos del Laja. A esto se suma todo el daño ecológico que seguro se le causaría a este emblemático río”.
Los canalistas del Zañartu envían agua hacia Ñuble a comunas como Pemuco, Yungay, Huépil donde desemboca. En tanto el Laja, como río no, pero hay canales que desembocan en ríos o esteros de Ñuble.
