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INFRAESTRUCTURA CRÍTICA HA TENIDO RESPUESTAS DISPARES Y PRECIPITACIONES ALCANZAN NIVELES DEL AÑO PASADO:
Un total de 83 personas aisladas, 13 rescatadas y una docena de rutas cortadas dejaba hasta ayer el invierno altiplánico en el extremo norte, en las regiones de Arica y Parinacota, Tarapacá y Antofagasta. Por segundo año consecutivo, los mayores estragos están en Tarapacá, donde el gobierno regional informó de 405 afectados, cuatro pueblos sin conexión terrestre y 53 personas aisladas en Pozo Almonte y Huara. En Camiña fue habilitado el primer albergue, con una familia de seis personas rescatadas por carabineros tras la crecida de un río.
La Ruta 5 ha sido un obstáculo casi insalvable para vehículos menores a la altura del km 1693, cerca de La Tirana, aunque no en los niveles de febrero pasado en la misma vía, en la quebrada Chiza (km 1950). Ahí, el MOP primero instaló un puente mecano y luego una estructura definitiva que hasta ayer soportaba los torrentes de agua, lodo y rocas, sin dejar aislada por vía terrestre a Arica, tal como ocurrió hace casi un año. En Camarones, el mal tiempo dejó 30 aislados, 20 viviendas anegadas y cortes de suministro de agua potable. Unos 10 km al norte, las autoridades reportaban que el cauce del río Lluta llegó a 100 y
destruyó el camino de acceso a un embalse. Dos personas aisladas fueron rescatadas en ese valle. Según registros de la Dirección Meteorológica, en la ciudad de Arica precipitó un milímetro de agua, mientras que en el poblado de Putre, a 3. 600 metros de altitud, cayeron 113 mm. En ambos casos, estos registros equivalen a las precipitaciones de todo enero de 2019. El mal tiempo también se manifestó con fuerza en la precordillera de Antofagasta con los primeros damnificados en Turi, a 90 km de Calama. En esta ciudad, la neblina obligó al desvío de vuelos comerciales.
MARIO ROJAS MARTÍNEZ
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