DIRECCIÓN GENERAL DE AGUAS SOLICITÓ ESTUDIO:
Plan de recursos hídricos, en las tres cuencas, establecerá oferta y demanda a nivel superficial y subterráneo
Proponer un plan estratégico para las cuencas de los ríos Choapa, Elqui y Limarí; dilucidar la oferta y demanda actual de agua; establecer balance hídrico y sus proyecciones a 10 años; diagnosticar el estado de información, infraestructura e instituciones que toman decisiones respecto al recurso hídrico, y proponer una cartera de acciones de la Dirección General de Aguas
(DGA), son los propósitos de un estudio que encargó ese servicio en la zona. Y es que la crisis hídrica de la región se ha intensificado con el traslado de ganado caprino a otras zonas del país, el aumento de distribución de agua en caminos aljibes, asistencia de alimento en zonas apartadas, entre otras. Por ello, el análisis, que ejecutará la consultora Eridanus, permitirá establecer la cantidad de recursos a nivel superficial, pero además subterráneo, con su respectiva adaptación al cambio climático, en cuanto a oferta, demanda, balance de agua y las herramientas de cálculo (modelos), control de extracciones, calidad físico-química de fuentes de aguas, gobernanza y red hidrométrica, de glaciología y nieves.
Todo con el propósito de definir acciones para proteger funciones ecosistémicas críticas relacionadas con los cuerpos de agua en el tiempo. “La importancia es precisamente actualizar estudios que se han hecho y no partir de cero. Estos estudios van a apoyar la generación de modelaciones y proyecciones, junto con la actualización de datos en
contexto de cambio climático”, dijo Pablo Hermán. El estudio partió en octubre del año pasado y culminará con los primeros antecedentes mediados del 2020. Su costo ascendió a los $166 millones. Así, se promete que se podrá definir acciones para restaurar condiciones de abastecimiento y calidad de las fuentes de agua potable rural y urbana, por tipo de
usuario, y diagnosticar estado de la calidad de aguas de las fuentes, inclusive se pretende diagnosticar el estado de la infraestructura hidráulica actual y proponer acciones para mejorar el monitoreo de las aguas de la cuenca, analizando su estado de funcionamiento, antigúedad y confiabilidad de los sistemas en general.
