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NEUROBIOLOGIA DEL DOLOR CRONICO: Información dolorosa nivel de médula espinal Un equipo de investigadores ha descubierto que panexina-1 participa en la transmisión de la
estudio que puede abrir un nuevo blanco farmacológico para el tratamiento de dolor crónico.
FALTAN RECURSOS PARA LOS CIENTÍFICOS
Luis Constandil considera que, en Chile, el problema de la ciencia básica es cada vez más serio en materia de fondos para l+D.
"Muchos de mis colegas han dejado la investigación debido a que cada vez los recursos económicos son más escasos. Cuesta más conseguirlos y el apoyo es de buenas intenciones más que real. Es muy difícil que los estudios y patentes desarrolladas en el campo de la biomedicina culminen con un producto en el mercado. Muchos de los estudios que se realizan en ciencia básica o preclínica, para que lleguen a la sociedad, deben seguir un largo y costoso camino. Después de que un investigador básico haya logrado presentar, publicar y patentar su descubrimiento, se debe escalar, es decir producir el producto a gran escala, luego debe ser sintetizado en laboratorios certificados y, posteriormente, se debe estudiar su efectividad en pacientes, iniciando en pequeños grupos para luego ir incrementado su número", detalla.
El experto dice que se considera que una aplicación en biomedicina, desde que sale de un laboratorio y hasta que llega a ser comercializado tarda al menos 10 años y cuesta cerca de US$ 50 millones.
"En Chile y el mundo existen muchos tipos de ayuda para seguir este camino, pero lo que no consideran es que muchos de los investigadores preferimos seguir investigando y no dedicarnos a ser emprendedores", destaca.
En un futuro podrían aparecer nuevos inhibidores asociados a la panexina-1 que podrían ser usados como analgésicos
Luis Constandíl, profesor titular de la Universidad de Santiago
Luis Constandil, profesor titular de la Universidad de Santiago, lleva casi 20 años trabajando en el estudio de la neurobiología del dolor crónico. Junto a sus colegas Alejandro Hernández (Usach), Teresa Pelissier y Ramiro Zepeda (Universidad de Chile), se encuentra, actualmente, investigado el rol de la proteina que se conoce como en la generación y mantención del dolor crónico. "Hace algunos años junto con un tesista de doctorado, el Dr. David Bravo, demostramos por primera vez, que la proteína panexina-1 participa en la conducción del dolor crónico. Observamos que la administración de moléculas que bloquean o impiden el funcionamiento de la panexina-1 (como probenecid, carbenoxolona y también lograron desaparecer la sensación de dolor crónico, es decir, funcionan como analgésicos muy potentes”, apunta En la misma línea, los investigadores se encuentran tratando de descifrar cuál es la relación que existe entre la proteina panexina-1 con otras proteinas de membrana como los receptores de glutamato, conocidos como NMDA. En forma independiente al estudio anterior, los expertos también han estudiado cómo mejorar las propiedades analgésicas de algunos fármacos, por ejemplo, la metadona. “En nuestros estudios observamos que con la coadministración de metadona, más una sal de magnesio, se obtiene el mismo efecto analgésico que con un tercio de la dosis de metadona. Este trabajo lo realizamos junto a la tesista y hoy magister Valeria González”, señala.
POSIBLES TRATAMIENTOS
Constandil explica que, en base a estos hallazgos, es posible
desarrollar tratamientos para el tratamiento del dolor crónico. “El de que panexina-1 participa en la transmisión de la información dolorosa a nivel de la médula espinal es importante porque nos muestra un nuevo blanco farmacológico que, antes de este estudio, no existía. Por lo tanto, nos permite utilizar fármacos que antes no se usaban para el tratamiento del dolor crónico”, indica. Para aumentar el tiempo de efectividad de estos fármacos, Constandil y su equipo, en conjunto con el Centro para el Desarrollo de la Nanociencia y la Nanotecnología (CEDENNA), han “empaquetado” los fármacos que inhiben la proteina panexina-1 en nanoparticulas logrando, con una sola inyección, tener tiempos de analgesia cercano a los seis días. Por otro lado, el académico asegura que tener iguales efectos analgésicos de la metadona con un tercio de la dosis más magnesio ayuda a disminuir la dosis de metadona utilizada y, por lo tanto, evitar los efectos no deseados producidos por las altas
“En un futuro no muy lejano espero que, asociado a la panexina-1, aparezcan nuevos inhibidores que puedan ser
usados como analgésicos y, en relación a la metadona, que se comience administrar mezclada con magnesio para disminuir los efectos adversos que presenta esta cuando es administrada en
altas dosis. Estamos generando nuevas alternativas de tratamiento que, esperamos, terminen siendo usadas en el tratamiento pacientes con dolor crónico algún dia”, puntualiza.
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