Imprimir Cerrar |
|
Opinión Rodrigo Azocar Guzmán Ingeniero Acuicultura, Consultor Pesca
La Comisión de Pesca e Intereses Marítimos que preside el senador Rabindranath Quinteros, de la Región de Los Lagos ha aprobado indicaciones al llamado Proyecto de Ley Corta de Pesca que modificarán, sin duda alguna, el paisaje económico pesquero de la Región de Aysén. De ahí que la iniciativa -que iniciará su segundo trámite probablemente esta semana- requiera de mejores indicaciones que respalden la posición en que queda nuestra austral región en el contexto de una ley nacional.
De aprobarse la Ley Corta como esta hoy, se modifican dos articulados: el 2° numeral 28, y el 51 letra d. Estos textos permiten que vengan pescadores de cualquier región a nuestra zona, y junto con ello que cualquier ciudadano/a pueda inscribirse en la categoría de "pescador artesanal" propiamente tal, en cualquier región del país y sin que deba acreditar la residencia efectiva durante 3 años consecutivos en la respectiva región donde realizará captura del recurso. No libera de la exigencia a armadores, buzos, recolectores de orilla y buzos apnea Lo anterior, no es más que otro alambique para traer pescadores a las regiones australes, porque indudablemente todos migrarán y/o se inscribirán en Aysén y Magallanes. ¿Por qué vienen? Simple: Por los recursos que están abiertos y también por los restringidos, ya que podrán inscribirse como pescadores en el Sernapesca para capturar jaibas, robalos cojinobas y otros tesoros regionales. Luego compraran sus propias embarcaciones, dándolas de baja en sus regiones de origen, transformándose asi en armadores artesanales de Aysén.
Así entraran en nuestro litoral. En definitiva, se abrirá de "par en par" la puerta a la total depredación de recursos pesqueros en el maritorio aysenino, para que ingresen flotas y pescadores tras los recursos que ellos ya han depredado en sus regiones. Ahora vienen por el mar de Aysén.
Ahora bien, más allá de las opiniones, el sentido regionalista y la sustentabilidad pesquera local, también nos acompañan las cifras. Según el Banco Central, Aysén vive de la Pesca (30% del PIB) y de los Servicios Públicos (26% PIB), fundamentalmente.
Aún más, la pesca, es la primera fuente de exportación regional generando alrededor de 10.000 empleos directos e indirectos.
Sumemos el que en la región conviven ya 3.091 pescadores artesanales (4% del Registro Nacional), 488 embarcaciones artesanales (4% del Registro Nacional) y 12 naves industriales (3% del total).
Dato adicional, es que el 70% de los pescadores de Aysén lleva más de 20 años en la actividad, tienen una edad promedio de 47 años, y unos 1.800 hombres de mar superan los 60 años de edad, es decir, son adultos mayores.
Hoy podemos decir que sostener el valor del PIB pesquero en un 30% ha sido posible, porque existe un equilibrio entre la abundancia de recursos y el esfuerzo pesquero. Dicho de otra forma, la Región de Aysén pesca de forma sostenible, ordenada y sin pesca ilegal.
El proyecto de ley modifica este equilibrio y no queremos proyectar si quiera en qué magnitud podría hacerlo, una vez que se desate la "carrera olímpica" por el último recurso que habite las aguas marinas de Aysén. Para entonces el litoral de la región solo será una bodega vulnerada por flotas que abastecerán a empresas pesqueras de los Lagos y del Bío Bío, sin contar los efectos del potencial incremento de la pesca ilegal.
Nuestra posición es clara y firme: Aysén debe sacar la voz ante esta futura "invasión" que destruirá nuestros principales activos pesqueros, y que asegura dejar en el camino a nuestros pescadores. La Patagonia incluye nuestro maritorio, extensión de recursos tan valiosa como los ríos, los campos de hielo o los bosques. Debemos hablar ahora y fuerte, corregir este proyecto de Ley, que puede afectar gravemente los ciclos ecológicos del litoral de Aysén, incluir nuestra visión estratégica regional respecto de la actividad pesquera, nuestras particularidades geográficas, de abundancia, marea roja, entre otras.
No actuar ahora en este sentido pone en riesgo el oficio de miles de habitantes del litoral, trabajadores y trabajadoras de plantas pesqueras y embarcadas, y también a las comunidades costeras, en definitiva, nos asegura un futuro sin retorno en donde el principal ejes económico y social que hoy sostiene la economía aysenina, se pierda para siempre.
Copyright © 2022 · LITORALPRESS