Este lunes será la lectura de la sentencia en la Corte Internacional de Justicia
Qué quiere exactamente Bolivia cómo se defendió Chile en La Haya
Expertos explican punto por punto los
argumentos chilenos,
los acuerdos suscritos entre Chile y Bolivia y la importancia del tratado de 1904.
ANDRÉS HERNÁNDEZ
espués de seis años de D trámites el caso llega a su fin. Este lunes, 15 jueces determinarán cuál de los dos países tiene la razón. Lo que quiere Bolivia es claro: que la Corte Internacional de Justicia de La Haya (CIJ) declare que Chile debe negociar, de forma obligatoria, una salida soberana al Océano Pacífico para el país vecino. Además, que esta negociación tenga un resultado en un tiempo definido y que ese resultado sea efectivO
“Bolivia dijo que Chile no negoció de buena fe, con resultados efecti- vos. Por otra parte, Chile dijo que Boli- via quiere un resultado predeterminado y Chile aclaró: ¡ Momento, no me impongan ese final! Entonces, Bolivia argumentó que después de todas las veces que negociaron, Chile lo único que hizo fue darle ilusiones. Y la defensa chilena explicó que no fue así, que Chile se sentó a conversar, el problema es que Bolivia quiere un final distinto al de ellos”, explicó la historiadora de la Universidad SEK, Ximena Prado. El equipo jurídico liderado por
el abogado Claudio Grossman, argumenta que Chile no tiene ninguna obligación de negociar y establece seis puntos que sustentan su postura.
1. El tratado legítimo Según la defensa, Chile no tiene ninguna obligación de negociar porque los límites con Bolivia están fijados a perpetuidad en el Tratado de Paz y Amistad de 1904. Te es el instrumento vigente y que fijó de manera perpetua la situación territorial entre Chile y Bolivia. Este tratado no sólo resuelve la relación territorial en un pacto de tregua sino que además, establece con precisión la frontera entre los dos países. Cosa importante, cuenta con el consentimiento de ambos estados. Fue ratificado por los congresos de ambos países”, dice el ex subsecretario de Relaciones Exteriores y académico de la Universidad Central, Edgardo Riveros.
2. Los tratados no perfeccionados En 1895, ambos países suscribieron tres tratados que buscan terminar con el estado de tregua sostenido desde el fin de la Guerra del Pacífico en 1884. Bolivia
Dijo que esos acuerdos obligaban a Chile a transferirles las provincias de Tacna y Arica. La defensa chilena asegura que esos acuerdos no son legítimos porque no fueron aprobados por el congreso boliviano. “Los tratados a los que se refieren nunca se perfeccionaron. Al no perfeccionarse no constituyen una fuente en derecho internacional. En cambio el tratado de 1904 si es un tratado que se perfeccionó. Fue ratificado por ambos estados y se incorporó en el derecho internacional y al derecho interno de cada uno de los países pactantes”, puntualiza Riveros.
3. Repartiendo territorio Después del Tratado de 1904, Chile aceptó escuchar las propuestas de Bolivia para darles salida al mar. La idea con más fuerza era la de entregarles Tacna y Arica, provincias que en ese momento estaban bajo administración chilena. Pero en 1929, Chile y Perú llegaron a un acuerdo y la idea de cederlas a Bolivia quedó desestimada. El Doctor en Estudios Americanos de la Universidad de Santiago, Cristian Garay, sostiene que “no hay que olvidar que Arica nunca fue boliviana. Cuando en 1826 se creó Bolivia, una delegación le solicitó al municipio de Arica que se incorporara a Bolivia y saliera de la soberanía peruana. La respuesta del ayuntamiento fue que Arica era
peruana”.
4. Las notas diplomáticas En 1950, ambas cancillerías intercambiaron notas que Bolivia argumenta constituyen un tratado. Por su parte, Chile desestima esto y explica que son notas que no establecen obligaciones sino que la mera voluntad política para dialogar. “Cualquier tipo de acto o conversación diplomática o cartas entre un gobierno y otro, no pueden ni son constitutivos Un tratado es una declaración formal en que dos países acuerdan algo. En el curso de cartas, se puede ofrecer, pero no es un tratado”, advierte Garay.
5, Tierra por tierra En el acto de 1975 conocido como el Abrazo de Charaña, entre los gobernantes de Chile y Bolivia, Augusto Pinochet y Hugo Banzer, nuestro país estableció la voluntad de entregarle acceso soberano al mara Bolivia a través de una faja de tierra al norte de Arica, a cambio de un canje territorial. Estas negociaciones no tuvieron resultados porque Perú no quiso perder la frontera con Chile y a su vez Bolivia no aceptó entregar una compensación territorial a nuestro país. Bolivia sostiene que Charaña contiene una obligación jurídica y que Chile la incumplió porque le pidió una
compensación territorial exorbitante. "Además, Bolivia reclama que como Chile ha negociado tantas veces con ellos, se ha creado un derecho. Y nuestra réplica es clara: resulta que todas las negociaciones diplomáticas son libres y sólo comprometen cuando se firma un tratado. Sino fuera así, entonces nadie conversaría”, afirma el académico de Derecho Internacional de la Universidad de Chile, José Rodríguez. 6. Jurisdicción versus política Según Bolivia, Chile estaría además obligado a negociar ante la Organización de Estados Americanos (OEA), debido a las once resoluciones de la OEA adoptadas y 1989. Pero la defensa chilena explica que no existe tal obligación, porque la OEA es una organización que establece efectos políticos y no jurídicos, que es lo que realmente vale. “Bolivia siempre ha querido llevar este tema a la multilateralidad. Es decir, que no es un caso que sólo comprometería a Chile y Bolivia sino que a la comunidad internacional en su conjunto. Es absolutamente imposible que Chile haya aceptado una resolución en la OEA, porque este es un tema bilateral y no debe ser tratado a nivel de organismos internacionales”, remata el analista internacional, Patricio Gajardo.