Virus Hanta: sepa identificar sí pudo adquirir la enfermedad
Aunque sus síntomas son parecidos al resfrío, hay que considerar exámenes de sangre como hemograma la evolución del paciente aspectos y/o reconstruir los lugares visitados, entre otros aspectos.
La sequía que está viviendo nuestro país no sólo está afectando la falta de agua para consumo humano y animal, la producción de alimentos o el ecosistema en sí, sino posibilitaría un problema que, de no ser detectado podríatener graves consecuencias para la salud: Hablamos del virus hanta. Esto, porque los roedores que transmiten la enfermedad se acercarían más a lugares poblados en busca de comida y líquido, y por ende, llegar cerca de los hogares. Tener precauciones y saber a qué estar alerta es fundamental. En términos médicos, hay distintas manifestaciones clínicas que indican cuándo alguien se contagió de la enfermedad y muchos de sus síntomas son similares al de un resfrío. Por ello, saber a qué estar atento es esencial para no demorar una atención o caer enla paranoia. El director de la Escuela de Medicina de la U. San Sebastián, Franco Utili, puntualiza quelo primero aconsiderares la prevención, es decir, “mantenerse alejado del contacto con roedores: hay que evitar suingreso a la vivienda, tapando orificios y cavidades por donde pudieran entrar; mantener alimentos y agua fuera del alcance de los roedores almacenándolos siempre en envases que estén sellados y herméticos; y desratizar galpones y bodegas, mantenerlas ventiladas y ordenadas, sin materiales de desecho, además de mantener el exterior de las casas libres de maleza y basura”. Destaca que si hay que entrar a alguna habitación que haya estado cerrada por mucho tiempo, “ventile por lo menos media hora antes de ingresar y luego rocíe el suelo con agua clorada. Limpie y barra el piso, ojalá usando una mascarilla durante este proceso”. El urgenciólogo hace hincapié también en que los síntomas iniciales del hanta “son muy parecidos a un cuadro gripal como fiebre, dolores musculares, dolor de cabeza y problemas digestivos (náuseas, vómitos o diarrea). Si esto se asocia, además, a antecedentes de riesgo de contacto con roedores (excursión o trabajo en áreas rurales, visitar residencias que han estado mucho tiempo cerradas, trabajo de desmalezado o limpieza de casas o bodegas deshabitadas), hay un riesgo elevado de que pudiera estar sufriendo esta enfermedad. Un dato importante: si hay congestión nasal y/o dolor de faringe es muy probable que se trate de gripe y hanta”. Finalmente, Utili destaca que “si presenta fiebre, dolores musculares, dolor de cabeza y problemas digestivos, sin congestión nasal o faríngea, es preferible consultar a un servicio de urgencia para aclarar las dudas”.