Represas en el Mar del Norte: la audaz idea para hacer frente al aumento del nivel de sus aguas
LONDRES| Sería una obra de ingeniería de una envergadura nunca antes vista —con un costo de hasta US$ 550 mil millones— y evitaría las inundaciones en una docena de países.
Na represa se extendería unos 480 kilómetros desde la costa de Escocia hasta Noruega. La otra, aproximadamente de 160 kilómetros, se elevaría desde las aguas entre el norte de Francia y el sureste de Inglaterra. Juntas, las gigantescas estructuras propuestas por los científicos encerrarían completamente el Mar del Norte y ofrecerían protección a decenas de millones de europeos amenazados por el aumento del nivel del mar causado por el cambio climático. Los científicos detrás de la propuesta —descrita en un artículo publicado el jueves en el American Journal of Meteorology— dijeron que la escala del proyecto, que existe solo en los contornos más amplios en este punto, refleja la urgencia de la crisis. “Vea esto como una advertencia”, dijo uno de los autores, Sjoerd Groeskamp, del Instituto Real de los Países Bajos para la Investigación del Mar. “Lo que estamos diciendo es: Aquí hay un plan, un plan que no queremos. Pero si terminamos necesitándolo, entonces es técnica y financieramente factible”.
Gasto compartido
El proyecto sería una de las hazañas de ingeniería más grandes que se haya intentado en el planeta y costaría entre US$ 250 mil millones y US$ 550 mil millones, según la propuesta, un costo que los autores sugieren podría ser cubierto por más de una docena de países del norte de Europa, los que serían protegidos por la barrera.
Algunos expertos expresaron dudas de que hacer represas en el Mar del Norte fuera la mejor solución para lidiar con el aumento del nivel del mar. “Mi reacción inicial es el escepticismo”, dijo Craig Goff, quien ha sido ingeniero de seguridad de represas en Gran Bretaña durante, aproximadamente, 20 años. “Sospecho que sería más barato y más rápido construir defensas a lo largo de la costa de Europa que construir estructuras de represas en el Mar del Norte”. Incluso, los científicos detrás de la propuesta reconocen que
Intentar las represas en todo el Mar del Norte no es una solución ideal. Dijeron que sería mucho mejor que la propuesta sirviera de alarma, ilustrando vívidamente el tipo de acción drástica que podría ser necesaria si los líderes mundiales no pueden encontrar una manera de abordar el cambio climático. “Podría ser imposible comprender realmente la magnitud de la amenaza” que plantea el aumento del nivel del mar, escribieron los científicos. “Sin embargo, conceptualizar la escala de las soluciones requeridas para proteGernos contra el aumento del nivel medio del mar ayuda a nuestra capacidad de reconocer y comprender la amenaza que representa el aumento del nivel del mar”. El otro coautor del artículo, Joakim Kjellsson, profesor sueco en el Centro Helmholtz para la Investigación del Océano en Kiel, Alemania, dijo que no se había hecho ninguna propuesta oficial a las naciones que estarían protegidas por la barrera. “Al final, nos dimos cuenta de que es una solución tan extrema, que sería mucho mejor y mucho menos dramático reducir nuestras emisiones de CO» y frenar el calentamiento global para que no necesitemos este tipo de cosas”, dijo en una entrevista. Si la contaminación por carbono continúa creciendo, el aumento del nivel del mar en 2100 podría superar un 1 metro, apuntó Groeskamp. Si nada cambia, insistió Kjellsson, millones de personas serán obligadas a abandonar sus hogares, convirtiéndose efectivamente en refugiados climáticos. Incluso hoy, las ciudades costeras, como San Francisco y Manila, se enfrentan a las consecuencias del aumento del nivel del mar. Para 2050, unos 150 millones de personas en ciudades costeras bajas podrían encontrarse por debajo de la línea de la marea alta, lo que amenazaría con sumergir ciudades enteras, según un informe de Climate Central, una organización científica con sede en Nueva Jersey.
Especies afectadas
Las represas propuestas eclipsarían las barreras más grandes construidas hasta ahora: Afsluitdijk, en los Países Bajos, y Saemangeum Seawall, en Corea del Sur, que con 33,7 kilómetros de longitud es el malecón más largo del mundo. La construcción de tales estructuras en el Mar del Norte alteraría para siempre la composición ecológica de la zona. Contener el mar detendría el flujo de las mareas, convirtiéndolo en un tipo de lago de agua dulce que haría imposible que vivieran ahí especies que dependen del agua salada. Eso, a su vez, tendría consecuencias económicas, incluso sobre los ingresos de la pesca en el Mar del Norte. Pero, como señalan los autores de la propuesta, las buenas opciones se reducen a medida que aumenta la amenaza del incremento del nivel del mar.
LLAMADO DE ATENCIÓN
Los científicos que idearon las represas admiten que el proyecto genera muchas externalidades. Pero advierten que a medida que pasa el tiempo, las mejores opciones —como reducir las emisiones de carbono— se van acabando.
CLAIRE MOSES, THE NEW YORK TIMES