Creando ecosistemas en casas o departamentos
N los últimos años el efecto del Cambio Climático nos ha dejado claro que ha llegado para quedarse, y no se ve de manera nítida la posibilidad de revertir un fenómeno que actualmente tiene, por ejemplo a Chile con una mega sequía. Independiente de las grandes discusiones mundiales sobre la importancia de disminuir las emisiones de CO2, el trabajo de sensibilización y resguardo de nuestro medioambiente también se puede hacer desde casa (o departamento). Podemos promover entre nuestros pares el uso eficiente del agua con sistemas de regadío que regulen el recurso hídrico, crear pequeños huertos para generar nuestro propio alimento, y/o reciclar y reutilizar los desechos orgánicos para tener abono natural. También podemos usar técnicas de bioconstrucción, instalar paneles solares para una nueva casa, y construir nuestras propias huertas o jardines, pero si usted piensa que el espacio es el mayor obstáculo para lograrlo, no hay nada de qué preocuparse, porque hoy en paisajismo o decoración de ambientes lo que está ganando terreno es la intervención natural de pequeños espacios. La paisajista Alejandra Carvajal, que tiene más de 10 años de experiencia en la materia, señala que en los departamentos es posible construir “huertos verticales”, por ejemplo. Generalmente en ellos se instalan plantaciones de tomates, lechugas, acelgas, rúcula y hierbas medicinales. De alguna manera, dice, “ayudamos, pero de una manera micro”. Más aun, la experta sugiere que es absolutamente posible impulsar sistemas de minicompostaje en pequeños espacios habitables, “especialmente hoy, donde los espacios
Las minicomposteras o “huertos verticales” marcan tendencia
en el diseño de cultivos para pequeños espacios urbanos.
Son cada vez más reducidos para vivir. Se pueden instalar cajones de fruta o habilitar una bandeja plástica. Eltamaño dependerá de los integrantes de la casa y si son vegetariano”, explica.
ESPACIO Y ESPECIES Para empezar con este desafío “casero y consciente”, lo primero es tener claridad, precisamente, del espacio con el que contamos para instalar la estructura, que puede ser de fierro, madera o bolsas de fieltro, que es un género especial de algodón, más grueso de lo normal y que se consigue en cualquier lugar donde haya venta de insumos para las plantas. “La estructura donde irá el huerto no debe ser tan pesada, por eso generalmente se recomienda madera reciclada, el resto de una escalera o una repisa”, dice Alejandra. También, si se quiere algo más estético, se puede comprar la estructura en el mercado. ¿Qué tipo de sustrato se debe usar? “Se recomienda la tierra de hoja y la turba, que es una raíz de árbol (sauce, aromo, acacio) que está en las riberas de los ríos”, agrega la especialista. Cuando ya está puesta la estructura, no se debe olvidar poner una tabla por delante y una por detrás. En el momento que ya está lista la base, se pueden plantar los almácigos que tienen hojas más grandes o semillas que son más resistentes, como por ejemplo las de lechugas, acelgas, hierbas culinarias, romero, poleo, menta, ruda, cebollín y cales, entre otros. También hay semillas pequeñas, como la albahaca u orégano. “Las pones por encimita y se riega en forma de lluvia. Importante es saber que, cuando la base es almácigo, se puede regar más fuerte porque es más resistente -día por medioy no perder de vista que como en todas las plantaciones hay que cuidar mucho el agua”, dice la paisajista, recalcando que lo importante es “regar muy temprano en la mañana o tarde en la noche”. Alejandra Carvajal detalla que la tendencia de las minicomposteras o huertos verticales va en aumento y que su ventaja, además de que forma un ecosistema, permite plantar flores como caléndulas (amarillas y anaranjadas) o también lavanda, ruda u otras plantas que ayudan a mantener el control de plagas de la huerta. “Se puede entonces formar un miniecosistema que llama a insectos para combatir plagas, como por ejemplo “chinitas”, escarabajos o las abejas, que lideran la polinización y transfieren semillas. No olvidemos que la supervivencia de la flora depende directamente de su polinización”, añade.
