Descubren enzima de hongo antártico que tendrá aplicación en biotecnología
CIENTÍFICOS. Equipo de investigadores de la Usach y de la Universidad Austral de Chile trabajó durante dos años en proyecto, con apoyo del Instituto Antártico de Chile, Inach.
UACH INVESTIGACION FUE REALIZADA POR MARIA CRISTINA RAVANAL, RENATO CHÁVEZ Y CARLOS GIL
"Nuestros resultados abren una nueva e interesante investigación sobre los posibles aspectos estructurales involucrados en la baja estabilidad térmica de esta enzima..." Dra. María Cristina Ravanal Investigadora Uach
Publicación especializada
Parte de los aportes de este trabajo desarrollado durante dos años fue publicado recientemente en la revista Fungal Biology, en un artículo cuyo primer autor es el doctor (c) Carlos Gil y los autores de correspondencia son el Dr. Renato Chávez y la Dra. María Cristina Ravanal.
En ese texto de se indica que la temperatura es uno de los principales factores ambientales que afecta a los organismos vivos, incluyendo el funcionamiento de sus enzimas y por lo tanto de su metabolismo. "Las enzimas activas en frío representan un campo de análisis esencial en la ciencia antártica.
y desde el punto de vista de sus aplicación en procesos industriales tiene buenas proyecciones", expresan los autores.
Agregan que en su laboratorio utilizaron como modelo de estudio una enzima denominada xilanasa, obtenida desde un hongo filamentoso del género Cladosporium sp. aislada de una esponja marina que vive en mar Antártico. "Esta enzima se secreta fuera de la célula, por lo tanto ejerce su acción en el medio ambiente frío sin protección. La baja termoestabilidad es una de la características de esta xilanasa, esto porque las enzimas en ambientes fríos deben superar la barrera energética que impone la baja temperatura para poder funcionar apropiadamente", se destaca en el texto.
Investigadores de la Universidad Austral de Chile y de la Universidad de Santiago con apoyo del Instituto Antártico Chileno (Inach), realizaron un importante descubrimiento, que tendría aplicación en biotecnología y que está relacionado con una enzima de un hongo antártico.
El equipo, integrado por la doctora María Cristina Ravanal (Uach); el doctor Renato Chávez (Usach) y por el doctor (c)
Carlos Gil, estudiante del doctorado en Biotecnología de esa casa de estudios, purificó por primera vez una xilanasa (enzima de origen natural) proveniente de un hongo filamentoso aislado de la Antártica, en el marco de la investigación titulada "Una xilanasa de un hongo antártico como modelo de estudio de enzimas activas en frío".
Según explicó la doctora Ravanal, las xilanasas son enzimas que producen "muchos microorganismos para degradar un tipo de polisacárido (xilano) presente en maderas plantas y algunas algas. Las xilanasas -subraya- generan azúcares más simples que estos microorganismos pueden utilizar para alimentarse". Respecto a la xilanasa estudiada en la investigación, la académica del Instituto de Ciencia y Tecnología de los Alimentos (Icytal) de la Facultad de Ciencias Agrarias de la Uach, indicó que "presenta una muy baja termoestabilidad, siendo la más sensible a la temperatura descrita hasta ahora en un hongo filamentoso. Nuestros resultados, abren una nueva e interesante investigación sobre los posibles aspectos estructurales involucrados en la baja estabilidad térmica de esta enzima".
INDUSTRIA ALIMENTARIA
La doctora Ravanal explicó que "estas enzimas pueden ser utilizadas en diferentes áreas, como por ejemplo, en la industria de alimentos para animales, específicamente para animales no rumiantes como pollos y cerdos, ya que permitan mejorar la digestibilidad de los nutrientes".
Agregó que las xilanasas también son utilizadas en el proceso de clarificación de mostos y jugos de fruta junto con otras enzimas (pectinasas). Esa etapa que se realiza a baja temperatura, por lo cual el estudio de enzimas que puedan trabajar a esas temperaturas toma mayor interés. Por otra parte, en la industria panadera contribuirían a acondicionar la masa antes del horneado, ya que mejora el volumen del pan. También afirma- que estas enzimas se utilizan en la extracción de almidón, café y aceites vegetales, facilitando estos procesos.
"En todas estas áreas se necesitan xilanasas con características específicas, por lo cual es importante investigar y producir enzimas que tengan propiedades diferentes a las típicas estudiadas" subraya la académica.
ADAPTACIÓN AL FRÍO
El doctor Renato Chávez explicó que este estudio, "permitirá avanzaren el conocimiento general de cómo funcionan las enzimas activas en frío, ya que si bien existen avances en esa área, aún no están claros los mecanismos subyacentes a su adaptación en frío". Por su paite el doctor (c) Gil indicó que uno de los mayores aportes de este hallazgo es "la alta actividad que presenta esta enzima a bajas temperaturas. Esta característica la hace muy atractiva para aplicaciones biotecnológicas ya que, su uso disminuirá el gasto de energía y los tiempos de reacción de los procesos, haciéndolos más eficientes}' limpios".
(Colaboración Paola Segovia Facultad Cs Agrarias Uach)