Crítica es la situación por la que atraviesan en la Ouebrada Alvarado, de Olmué. Adultos mayores han tenido que ser trasladados a otros domicilios, mientras los padres se preocupan por el retorno a clases de sus hijos.
La Estrella de Quillota - Petorca
brir la llave y que lo que salga de lla sea aire. Esa es
la cruda realidad que están enfrentando los vecinos de la Quebrada Alvarado, en Olmué, donde el fantasma de la escasez hídrica parece haber llegado para instalarse desde la reciente primavera. Para intentar distribuir de la mejor manera posible el poco recurso hídrico con el que cuentan, la directiva del Comité de Agua Potable Rural Quebrada Alvarado se ha visto en la obligación de establecer un sistema de turnos para cada sector. Esto se ha ordenado considerando desde cuál acumulador de agua se alimenta cada lugar. De este modo, existen lugares donde incluso no cuentan con agua por cinco días. Si ese panorama ya es complejo, la situación incluso se vuelve incluso peor para sectores donde se han construido viviendas en las ladera de cerros, ya que impulsar el agua hasta allá es casi una hazaña considerando la baja cantidad que hay en los dos pozos que actualmente están abasteciendo al sistema. En estos domicilios que se encuentran a una altura mayor que el resto de la comunidad, si en teoría de acuerdo al calendario debieran contar con el recurso hídrico, la cantidad es tan ínfima que incluso hay veces que no les alcanza para suplir las necesidades básicas de aseo para cierta parte de la población, como son los adultos mayores. La tesorera del comité, Mónica Lanyon, comenta que han sabido de casos donde las familias han
tomado la difícil decisión de sacar a las personas de la tercera edad de las casas donde han estado toda su vida, para llevarlos donde familiares en otras zonas e incluso comunas. “Acá hay mucho adulto mayor y se los han tenido que llevar a otro lugar y eso es una cosa muy complicada. No tienen acceso a ducha todos los días o la presión no llega para que funcione la ducha”, dice, visiblemente preocupada.
REGRESO A CLASES Si el panorama para estos vecinos ya es complejo, todo podría empeorar a contar de la próxima semana, cuando los niños y adolescentes retornen a clases en los dos colegios y los dos jardines infantiles que hay en la Quebrada Alvarado. Valeria Hidalgo, administradora del Comité de Agua Potable Rural, explica que la situación es de suma importancia porque en los establecimientos educacionales “deben tener agua de forma permanente, en forma continua. Vamos a tener que poner a trabajar a toda capacidad el principal pozo que ahora nos está abasteciendo para asegurar agua en esos lugares”. Para intentar subsanar ese problema en el corto plazo, desde la municipalidad de Olmué, informaron que se está haciendo entrega de agua en camión aljibe para apoyar el abastecimiento del sistema de Quebrada Alvarado. En particular, son 20 mil litros de forma diaria. Asimismo, en el contexto de una reunión que tuvieron con los habitantes del lugar, desde la
Gobernación de Marga Marga se comprometieron a aumentar la cantidad de agua que ya destinan al sistema de APR. No obstante, como la escasez hídrica es un problema que seguirá latente a futuro debido al cambio climático, en el mediano y largo plazo la directiva del APR ve como una solución la habilitación de un nuevo pozo. De hecho, afirmaron que actualmente están en contacto con la Dirección de Obras Hidráulicas para la búsqueda de puntos donde poder excavar un nuevo pozo. Para esos trabajos, haciendo un gran esfuerzo, la comunidad de Quebrada Alvarado ya facilitó algunos recursos al Comité. Actualmente para llegar con el agua a las viviendas ubicadas en los sectores más altos, se utiliza un sistema de elevadores, pero por la baja cantidad de agua en el pozo principal (Sondaje 3) y
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días sin agua llevan algunos hogares de la Quebrada Alvarado en Olmué.
Mirian Mondaca Herrera
El segundo que están usando (Arrayán 2), no está siendo suficiente. Claudia Toledo, primera directora, explica que “el problema radica en que antiguamente la matriz se mantenía llena porque todos los pozos estaban abasteciendo y entonces el agua no se cortaba”.
DEMANDA EN VERANO Asimismo, agrega que “en este minuto tenemos pozos que ya están secos o si nos dan agua nos dan muy pocas horas, entonces la matriz ya no está llena por ende los elevadores deben impulsar con mayor fuerza y no alcanzan a llegar a todas las casas”. Esto, sumado a que en la temporada de más calor existe una demanda mayor en el consumo de
agua, vuelve más grave la situación. De hecho, Mónica Lanyon consigna que “en septiembre ya se empieza a notar como baja el nivel de los pozos, porque se empiezan a llenar las piscinas en las cabañas, centros turísticos o casas de veraneo”. Ajuicio de la tesorera, actualmente todavía existe un consumo “indiscriminado” de agua en la zona. “La usan como si estuviéramos en los mejores tiempos y no es así. Se debe empezar a tomar consciencia”, manifiesta, agregando que sus palabras no significan que la cooperativa esté contra la actividad turística en la zona, sino que el consumo del vital elemento debe ser con mayor mesura. %
A AA A NOTORIA DIFERENCIA
Dessiete puntos donde antes extraían agua, actualmente solo el pozo “Sondaje 3” y “El Arrayán aportando al sistema de APR en Quebrada Alvarado. De ellos, el primero se lleva toda la carga y el segundo funciona como apoyo. Para graficar lo complejo de la problemática del agua, actualmente “Sondaje 3” entrega 3, 7 litros por segundo de agua y antes de la
escasez hídrica entregaba 12 litros por segundo.
