Durante el mes de enero el río Maipo presentó un déficit del 70 por ciento en su caudal respecto al año anterior.
A escasez de agua en la zona central del país es una realidad que tiene preocupadas a las autoridades y que sigue afectando a diversas comunidades que han tenido que ir adecuándose a las actuales condiciones de sequía. Con un 2019 en donde escaseó la lluvia, el país ha tenido que adaptarse a este nuevo panorama tan poco alentador. En agosto pasado se difundió el ranking mundial de estrés hídrico realizado por el Instituto Mundial de Recursos, instancia en la que Chile ocupa la ubicación 18. En la provincia de San Antonio la falta de precipitaciones también ha traído problemas para los agricultores, quienes se han visto en la necesidad de comprar agua en camiones aljibes para mantener en pie sus producciones. La situación, según comenta Alejandro Pérez, subgerente zonal de Esval (empresa que abastece de agua potable a toda la provincia de San Antonio, exceptuando la comuna de Santo Domingo), es algo que los tiene alertados.
DESDE HACE UNA DÉCADA “Estamos enfrentando una sequía estructural desde hace más de una década, lo que se refleja en bajas históricas de los caudales de los ríos y menor acumulación de nieve. La provincia de San Antonio no es la excepción, y aunque la condición de la zona no es tan crítica como
el resto de la región, el río
Maipo también se ha visto afectado, registrándose en enero un déficit del 70% en su caudal, respecto del mismo mes del año pasado”, reconoce Alejandro Pérez. Respecto a las medidas que ha realizado Esval como una forma de afrontar este escenario, el subgerente zonal reconoce que “solo en los últimos seis años hemos destinado más de $34.000 millones a lo largo de la región para abordar la sequía, que se han traducido en nuevos
tranques, pozos, estanques, grandes conducciones, convenios y compras de derechos de agua, entre otras acciones. En el caso de la provincia, hemos reforzado nuestra conducción de agua potable Cartagena-San Sebastián con
una nueva tubería de más de cuatro kilómetros; además, en nuestro sistema productivo de San Juan, construimos cuatro norias y dos sondajes, además de habilitar una nueva batería de fuentes subterráneas, obras que nos permiten aportar más de 700 litros por segundo al sistema”. El subgerente de Esval agrega que “adicionalmente, estamos trabajando en un nuevo proyecto para aumentar el aporte de fuentes subterráneas a nuestra planta de agua potable de San Juan, lo que nos permitirá incorporar 260 litros por segundo adicionales al sistema. Estimamos finalizar esta obra, en su primera fase, a mediados de este año”.
-¿ Cómo están enfrentando la sequía en la provincia de San Antonio y también con los desvíos de aguas? -Para enfrentar la grave sequía que nos afecta, ha sido muy importante la colaboración de las autoridades y los diversos actores de las cuencas. En ese sentido, la protección de los cauces que llegan a nuestras plantas -como el río Maipoes una de nuestras prioridades, y por
En el caso de la provincia, hemos reforzado nuestra conducción de agua potable Cartagena-San Sebastián con una nueva tubería de más de cuatro kilómetros ”,
Alejandro Pérez, Esval.
EN SAN JUAN
La planta de producción de agua potable de la empresa Esval en la provincia se encuentra ubicada en el sector
de San Juan, en San Antonio. Allí se produce el suministro que abastece a las siguientes comunas: Algarrobo, El Quisco, El Tabo, Cartagena y San Antonio. Y tal como lo menciona Alejandro Pérez, subgerente zonal de Esval, este lugar de producción cuenta desde hace poco con cuatro nuevas norias y dos sondajes, lo que permitirá aportar 700 litros por segundos al sistema de producción.
Pablo Jesús Gómez
Ello, trabajamos con drones, brigadas que recorren los cauces y denunciamos cualquier ilícito que pueda comprometer el consumo humano. Por el momento, nuestra producción de agua potable en la zona no se ha visto comprometida, pero es un tema que nos preocupa y por el cual seguimos trabajando. SIGUE EL DIQUE En Santo Domingo, elaumento de la población flotante durante la temporada estival hace que el consumo de agua aumente entre diciembre y febrero. “En invierno la demanda baja en un tercio, por lo que podemos abastecer a la gente ya que se hace más fácil la producción, aparte que tenemos pozos subterráneos que también ayudan a satisfacer al 100% de la población”, explica Juan Pablo Esturillo, gerente general de Coopagua, empresa que abastece de agua potable a la comuna parque. En cuanto a los problemas de escasez de agua, Esturillo admite que “la sequía ha implicado que
el caudal del río Maipo haya bajado drásticamente su caudal y se hace complicada la producción de agua potable”, El ejecutivo reconoce que “el suministro estará condicionado a tener un caudal disponible para la producción de agua potable, el problema será cuando no tengamos este caudal del río, pero espero ser optimista y pensar que no habrá problemas, pero eso no está asegurado”. Respecto al dique que se instaló hace algunas semanas en el río Maipo y que causó polémica en redes sociales después que un grupo de vecinos destruyera parte de esa estructura, Juan Pablo Esturillo detalla que “la situación actual del río ha ayudado a que las temperaturas bajen y hemos contado con la cooperación de los distintos usuarios del río, por lo que estamos agradecidos. Pero la situación sigue siendo complicada y lamentablemente necesitamos contar con esta barrera de contención. Nuestra intención es mantenerlo con la comprensión de la ciudadanía, porque su función es necesaria para impedir que la salinidad del mar llegue a nuestro punto de captación, el cual ya se modificó y estamos captando agua un kilómetro más arriba de lo que lo hacíamos hace tres meses”, O
34 mil
millones de pesos ha destinado Esval en los últimos seis años para abordar la sequía.
