¿Licitar 100% de la pesca industrial?
Julio Peña Investigador Ctapes UC
La reforma a la ley de pesca propone aumentar el porcentaje a subastar de cuotas industriales de 15% a 100%, una vez cumplidos los 20 años de vigencia de las cuotas asignadas.
Las nuevas cuotas también durarían 20 años y luego se volverían a licitar. Bajo la ley actual, el 85% de cuotas no licitadas se renuevan (sin licitación) cada 20 años y pagan un royalty anual de tenencia de cuotas, cuyo valor se indexa, entre otros factores, al precio pagado en las licitaciones. Las cuotas artesanales se han asignado, en su mayoría, de forma gratuita, lo que no cambia bajo la reforma propuesta.
La justificación ofrecida para subastar el 100% de las cuotas industriales es que permitiría la entrada de nuevos actores o la expansión de los existentes de menor tamaño, lo que disminuiría la concentración en este mercado. Pero esta justificación abre varios flancos de duda. 1) En el sector existen importantes economías de escala y de coordinación productiva, que se optimizan integrando la propiedad de flotas y plantas. Si los peces se vuelven más escasos, la eficiencia de esos arreglos aumenta. Desconcentrar la industria implica sacrificar eficiencia productiva. Esto podría valer la pena si mejora la competencia. Pero no hay evidencia de falta de competencia. Así lo dictaminó con voto unánime el TDLC: comprobó que no es evidencia per se de problemas de competencia, que ocurra poca entrada (los incumbentes pueden tener ventajas sobre entrantes y aun así competir entre ellos), ni que disminuyan en el tiempo las transferencias de propiedad de cuotas (esto es lo esperable en un mercado eficiente). 2) Si desconcentrar fuese el objetivo correcto: ¿se lograría subastando el 100%? Probablemente no. Las subastas de pesca industrial no han generado entrada relevante de nuevos actores. En aquellas sin restricciones sobre quiénes pueden competir han ganado incumbentes. La industria pesquera ha invertido por años en activos de uso específico ("costos hundidos" en la jerga económica) y éstos entregan ventajas de competencia a quienes ya los poseen. Al competir por cuotas esos costos solo son relevantes para nuevos entrantes.
Licitando el 100% industrial se recaudaría más. El sector hoy paga vía cobros sectoriales anuales, 6,7% de sus ventas finales. Las empresas afectas a royalty y patente mineros pagaron por estos conceptos, durante 2012-2013,1,6% de sus ventas finales. Sectores que usan otros recursos naturales pagan aún menos (concesiones acuícolas, derechos de agua, entre otros). La pesca industrial en otros países enfrenta menores cobros sectoriales (2% en Perú y Nueva Zelandia; 3,5% en Islandia).La licitación del 100% de la pesca industrial no garantiza la desconcentración y si ello ocurriese se perdería eficiencia productiva. El sector entonces pagaría aún más que en países competidores y bastante más que otros sectores en Chile. La inversión sectorial podría migrar a otros países o sectores. ¿Gana Chile así?