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PRUEBAS EN CLIMAS SECOS Y MANEJO DE DATOS:
Vides más resistentes, manejo inteligente del riego y la exploración de nuevos injertos son parte de las herramientas con las que se busca blindar a los cultivos de la escasez de agua y un clima más cálido
Ciones de cambio del clima están a pensar cómo las vi des se van a adaptar a esta nueva reali dad. Con eso en mente, el programa de Viticultura del Desierto de Inia Intihuadesarrollando estrategias de manejo agronómico para que la producción de vino pueda adaptarse al cambio climático, Para ello están utilizando varias herramientas. Una de ellas es a información satelital, la que permite identificar virtualmente las necesidades de riego de los cultivos. Las imágenes muestran cuál es la demanda especíica de cada zona, información clave para su manejo. Junto con ello, están probando distintas formas de riego eficiente, ya que el cambio climático no solo implica más calor, sino también menos agua. Una de ellas es evitar la pérdida de la humedad del suelo cubriendo la zona mojada con distintos materiales plásticos u orgánicos. Así, se asegura que solo se pierda una mínima cantidad de agua. Con la aridización se produce la salinización del suelo, explica Claudio BalL: prolongada sequía y las proyecbontín, investigador en riego del Inia Intihuasi. Eso es justamente lo que irá ocurriendo en laszonas viñateras tradicionales, sobre todo en las ubicadas en zonas del norte chico. “Por eso estamos trabajando, desde el punto de vista genético, con portainjertos (o planta que se hace de un injerto) capaces de tolerar mayores niveles de sal”, dice. La resistencia dela vid al clima no se traduce necesariamente en un vino de calidad, son aspectos que deben trabajarse por separado. Por ello el grupo está experimentando, en el valle del Elqui, qué pasa con las vides cuando aumenta la temperatura del aire y el contenido de alcohol probable que puede alcanzar la uva. “Llevamos tres vendimias y hasta ahora hemos tenido buenos resultados respecto a la calidad con el manejo que hemos hecho”, asegura el experto. La experiencia de lo logrado en el norte chico, específicamente en las áreas que tradicionalmente han sido más desérticas, es clave para poder afrontar los cambios que se están produciendo más al sur con la nueva realidad climática. “Las condiciones adversas, sumadas a la escasez de agua, son factores a los cuales los agricultores de la zona norte del país han sabido sobreponerse para poder desarrollar viticultura en el desierto”, dice el ministro de Agricultura, Antonio Wal Ker. “Este es un ejemplo de un desarrollo sostenible en un escenario donde el cambio climático llegó para quedarse, y es hacia ahí donde debe avanzar la agricultura chilena, adaptarse y sobreponerse ala adversidad”, agrega. Otra iniciativa, para entender cómo el entorno del vino está cambiando, es una nueva plataforma que mapea los servicios que la naturaleza provee en el valle de Colchagua. El proyecto desarrollado por el Programa del Vino, Cambio Climático y Biodiversidad del Instituto de Ecología y Biodiversidad y la Universidad Austral de Chile, en
conjunto con el Joint Nature Conservation Committee (INC), busca ser una herramienta de toma de decisiones para el uso eficiente de agua. “Las proyecciones de cambio climático tienen una escala muy grande, por ello no son suficientes para tomar deiones localmente”, explica Kari Godoy, coordinadora del programa. “La plataforma permite identificar con mayor detalle, a escala comunal, cómo los sistemas naturales entregan las provisiones de agua”, agrega. La plataforma está compuesta de mapas que permiten visualizar, por ejemplo, cómo un bosque entrega agua a su entorno en forma paulatina y cómo el manejo de las plantaciones puede afectar ese proceso que generalmente no se ve. “Esto entrega información que permite planificar el manejo”.
El riego eficiente es otro aspecto testeado en las plantaciones de vides, así como el manejo de plagas. Estas últimas cambian según el clima.
PRODUCCIÓN Y CONSUMO
09
La degradación dela tierra, la disminución de la fertilidad del suelo y el uso insostenible del agua están disminuyendo la capacidad de la base de recursos naturales para suministrar alimentos.
LORENA GUZMÁN H.
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